El descubrimiento de Xavi para frenar a Vinicius vuelve a salir a flote para la vuelta de semifinales
El Barça acabó el partido con cuatro centrales. La lesión de Koundé abre la puerta de la titularidad de Araujo y Eric Garcia.

El Barcelona llega al último tramo de temporada derrapando. Con la Copa del Rey y la Supercopa esperando ser mostradas en el futuro museo blaugrana, cuatro puntos de ventaja sobre el Real Madrid en Liga y en semifinales de Champions, el barcelonismo ha perdido un punto de perspectiva. Es complicado tomar cierto margen y apuntar a que el proyecto de Hansi Flick se encuentra solamente en su primer año. Si bien una de sus revoluciones ha sido cambiar el motor del equipo, el físico, el vestuario llega al fin de curso exprimido.
El pinchazo de Jules Kounde en la primera parte contra el Inter de Milán probó que nadie está a salvo de las lesiones. Tras más de 100 partidos consecutivos jugando, en lo que fue todo un desafío a la lógica del físico de los futbolistas, y más de 4.400 minutos esta temporada —el que más de la plantilla— su cuerpo dijo basta. Flick decidió dar entrada a Eric Garcia, que ya había actuado como lateral, pero de cara a la vuelta de las semifinales la gama de posibilidades para la banda aumenta. Héctor Fort, por otro lado, parece gustar a Flick más por la izquierda.
Inzaghi propuso un dos contra dos muy marcado arriba, con Lautaro Martínez y Marcus Thuram sobre Pau Cubarsí e Iñigo Martínez. El partido como centrales, sin embargo, lo acabaron Araujo y Christensen, que reapareció ocho meses después. En las bandas quedaron el mencionado Eric e Iñigo, que ocupó el puesto de Gerard Martín, sustituido al descanso por el central uruguayo. El planteamiento del Inter, reactivo y bastante más incisivo en el segundo tiempo, invita a reflexionar sobre qué futbolistas deberían ocupar las bandas en el Giuseppe Meazza.
El que podría solucionar un problema es Alejandro Balde, que ultima su recuperación y podría estar listo para la vuelta, como Lewandowski. Dependerá del último 'ok' del cuerpo médico. En el sector derecho habría más dudas. Por un lado, Eric, cumplidor allá donde tenga que jugar, se ha convertido en un recambio de garantías de Kounde. Ya jugó en banda contra el Mallorca y contra el Inter fue la primera opción en la que pensó Flick. Aunque lo punzantes que son las bandas italianas en la izquierda, con Di Marco y Carlos Augusto, deja en el escaparate la opción de Araujo.
No sería una posición nueva para Ronald, que en su día ya le planteó a Xavi estar molesto por tener que jugar en banda, como Kounde, a pesar de que ambos ejercían de laterales con sus selecciones. De hecho, Xavi descubrió en el Araujo lateral un comodín para frenar a Vinicius. En escenarios en los que priorizar la defensa por delante de la gestión de balón, Araujo es una opción que gana enteros. Como central, con un Inter propositivo en la presión a tramos, no sufrió más de la cuenta.
Los goles recibidos a balón parado
El Barça se enfrentaba el miércoles al equipo menos goleado de la Champions (5) y le endosó tres. Sin embargo, también recibió tres. En total, son cinco goles encajados en los últimos dos partidos. Cuatro de ellos han sido a balón parado: Tchouameni y Dumfries por partido a la salida de un córner, además del gol de falta de Mbappé. "Hemos recibido dos goles a pelota parada ante el mejor equipo de Europa en ese aspecto. Lo tenemos que mejorar el martes. Estamos en una situación similar a la del Atlético. Es una final antes de la final", valoró Flick.
Incredible goals on the ultimate stage 🤯
UEFA Champions League (@ChampionsLeague) April 30, 2025
Yamal, Thuram, Dumfries: Who did it best? 👏@Heineken | #UCLGOTD pic.twitter.com/cIe07jyyFa
En este aspecto, los centímetros de Araujo podrían ayudar al equipo en la estrategia. En el gol de Tchouameni, fue Kounde quien perdió la marca. En el primero de Dumfries, Acerbi le ganó el duelo aéreo a Gerard Martín y el neerlandés entró solo desde la frontal. Nada pudieron hacer Pedri y Olmo para molestar. En el 2-3, con Araujo sujetando a Acerbi, fue a Olmo a quien se le escapó su par. Sin embargo, en la foto apareció la salida en falso de Szczesny. El Barça acabó el partido jugando con cuatro centrales.