La Champions League sigue siendo la cuenta pendiente del PSG

El PSG vive una situación límite en Champions League. El equipo dirigido por Luis Enrique ocupa la 25ª posición, por lo que ahora mismo quedaría eliminado en la fase de grupos. Para añadirle más leña al fuego, en la quinta jornada visita al Bayern en el Allianz, un equipo acostumbrado a arrasar en la fase de grupos, pero que este nuevo formato no le está sentando tan bien, ya que ocupa el decimoséptimo lugar. Aunque los parisinos tienen la experiencia de los cuartos de final de la 2020-21, en los que su victoria en el Allianz por 2-3 es la última derrota como locales en Champions de los muniqueses.

Los de Luis Enrique llegan con la difícil tarea de revertir su situación, aunque una derrota todavía les dejaría algo de margen. Según estimó la UEFA antes del inicio de esta temporada con el nuevo formato, se necesitarían 8/9 puntos para clasificarse a los dieciseisavos, por lo que el club parisino solo necesitaría sumar 4 o 5 más en los siguientes encuentros. Aparte de la visita a Múnich, a los franceses les queda visitar Salzburgo y recibir a Monaco y City, en ese orden.

Al ser preguntado por la situación clasificatoria del equipo, el técnico asturiano ha comentado que "los resultados, sobre todo en casa, no son los que hemos merecido. Para mi han sido injustos, pero el fútbol no entiende de justo o injusto, nosotros nos hemos metido en este problema y hay que sumar".

Según la estadística avanzada de Opta, aún tienen un 65% de probabilidades de conseguir la clasificación, pero salvo que consigan un pleno de puntos, todo apunta a que los parisinos se clasificarían en una de las últimas plazas, por lo que se verían las caras ante un equipo clasificado en la parte superior de la tabla, y con la vuelta fuera de casa.

Esta situación no es nueva para el conjunto francés. En las últimas temporadas se han acostumbrado a pasar al límite. Pese a que en la era Al-Khelaifi, que llegó al club en octubre de 2011, han conseguido el pase a los octavos en todas las ediciones, en los últimos años han estado en la cuerda floja. La temporada pasada fue la más límite, porque se clasificaron en el último partido en un grupo de la muerte con Dortmund, Milan y Newcastle, en el que pasaron como segundos. De hecho, en las últimas tres campañas se clasificaron como segundos de su grupo.

En este año en el que todos los equipos están en una misma clasificación, se puede medir cómo les va a los equipos de una misma liga dentro de la competición europea. El PSG domina con mano de hierro la liga francesa y, de hecho, lleva 32 puntos de 36, el segundo mejor arranque en la era Al Khelaifi, aunque contrasta con la Liga de Campeones.

En la tabla europea, el PSG es el último de los equipos de la Ligue 1. Al contrario que pasa en la competición doméstica, los conjuntos galos superan al PSG. Monaco, que se enfrentará al PSG en la penúltima jornada, y Brest, están siendo dos de las mayores sorpresas en la Champions y son tercero y cuarto respectivamente con 10 puntos, mientras que el Lille es decimocuarto con 7 puntos tras ganar a Real Madrid y Atlético.

Hasta esta jornada, los parisinos no han cumplido con las expectativas en Champions en la primera campaña post-Mbappé. Los de Luis Enrique tan solo han ganado al Girona, han empatado con el PSV en casa, y han caído ante Atlético de Madrid y Arsenal. Pese a que, a priori, con una victoria y un empate ante Monaco y Salzburgo les podría servir para obtener la clasificación, en la ronda de play-offs se tendrían que ver las caras con un equipo de la zona alta y con la vuelta fuera de casa.

Luis Enrique ha construido un equipo muy fiable en el día a día de la competición nacional, pero la falta de una estrella del nivel de Mbappé le sigue pasando factura en Europa, que sigue siendo la mayor cuenta pendiente del club parisino.