El pívot que fingió alistarse en el Ejército para "sanar" mentalmente regresa a la Selección

"Quiero entrar en el Ejército, en Infantería de Marina, y terminar en las Fuerzas Especiales". Así anunciaba, el 14 de noviembre de 2020, Juan Emilio Gil (Gádor, 1997)  que colgaba las botas de fútbol sala para calzarse las militares. Ese mismo día, Jimbee Cartagena hizo pública la rescisión de contrato de tres temporadas de su fichaje estrella "ante la decisión, únicamente del jugador, de retirarse por un periodo de tiempo indeterminado". La noticia tuvo un gran recorrido en medios deportivos y nacionales. Un internacional de 23 años se retiraba para alistarse. Sin embargo, el pívot almeriense ya ha reconocido, 3 años después, que "era mentira. hasta los propios a los que yo se lo tuve que comunicar lo saben. No fue por eso. Tuve que decir eso porque yo me encontraba mal y quería salir de allí. Fue como una excusa que tuve que poner para poder salir y estar bien. No salí para irme a otro equipo. Me tiré dos años enteros para mí. Sanándome a mí". Albert Canillas ha vuelto a convocarle con la Selección española.

Parar para cuidar la salud mental ya no es un tabú gracias al ejemplo de deportistas famosos como Ricky Rubio, Álex Abrines, Víctor Camarasa o Alex Remiro. Sin embargo, Juan Emilio pensó que anunciar el comienzo de una carrera militar, teniendo ya una prometedora como jugador de fútbol sala, le podría ayudar a evitar ser estigmatizado. Al goleador andaluz le pareció la mejor salida al laberinto en el que se encontraba. Había llegado un 2 de agosto de 2020 como la gran bomba del mercado estival del conjunto melonero. Una rotura de fibras en la pierna derecha le dejó sin pretemporada. En el debut liguero ante el Burela, el 3 de octubre, anotó un gol, pero también le propinó un cabezazo a David Pazos por el que recibió una sanción de dos partidos. El 17 de octubre jugó su último partido ante Peñíscola. Después, dejó de asistir a los entrenamientos durante 21 días alegando síntomas de coronavirus. "No me fui de un equipo para ir a otro y dejarlos tirados. Me fui para desaparecer. Perdí muchísimo a nivel personal. Estaba hundido en todos los sentidos", confesó.

Hasta hace menos de tres meses, Juan Emilio había regateado las preguntas sobre su retirada y su repentina vocación castrense. Sin embargo, el jugador del Quesos El Hidalgo Manzanares, se sinceró en una impactante entrevista con un creador de contenido, Game of Futsal (José Pérez), el pasado 18 de septiembre. "Si en la vida una persona no está bien de salud mental por lo que sea, hay que dejarle su espacio y si decide retirarse que se retire para sanarse y para que esa persona esté bien", recomendó. Y tras visibilizar su problema reiteró que "primero tienes que estar bien tú. No puedes estar sufriendo por algo de alguna manera. Te tienes que sanar el tiempo que te lleve. Seis meses, uno o dos años, lo que sea y luego habrá tiempo de intentarlo otra vez y si llega o no, lo principal es eso".

Juan Emilio siempre ha vivido deprisa. Siendo cadete fue campeón juvenil de España con Andalucía en 2013. Su actuación le abrió las puertas del Barça y salió de Gádor para irse a la Ciudad Condal con 16 años. Llegó al filial azulgrana en Segunda División siendo juvenil. El 8 de enero de 2016, a punto de cumplir 19, se estrenaba como goleador en Primera con el equipo azulgrana frente al Industrias Santa Coloma a las órdenes de Marc Carmona. Aquel verano se marchó cedido a Peñíscola para ponerse a las órdenes de Albert Canillas, que había sido segundo entrenador del equipo azulgrana. 7 años después, el seleccionador interino vuelve a confiar en él. Tras ser internacional Sub-18 y sub-19, su última presencia en una convocatoria de España databa del 29 de enero de 2020 y Fede Vidal tuvo que llamar de urgencia a Bebe al no presentarse en la misma. Desde la RFEF, alegaron problemas personales para justificar la incomparecencia del almeriense en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas después de tratar de localizarse de manera infructuosa.

El 29 de enero de 2019 debutó con la Selección en un amistoso ante Hungría en Córdoba. Y un día antes de su cumpleaños (6 de febrero) brilló en la derrota de España ante Brasil (1-3) en el Wizink. Aquel partido terminó de convencer al Gazprom Ugra para pagar su cláusula de rescisión (40.000 euros) al Peñíscola el 15 de febrero. El campeón de Europa apostaba por el pívot de moda del fútbol sala español. Debutó marcando el 18 de febrero en las semifinales de la Copa de Rusia, que ganaría un mes más tarde ante el Tyumen. El goleador andaluz también anotó en la final. Sin embargo, su llegada al equipo siberiano supuso un punto de inflexión en su salud mental. Solo, a 7.000 kilómetros de España y con 22 años, reconoció que "empecé a ver la vida de otra manera. Yo notaba que esas ganas de jugar al fútbol sala iban disminuyendo".

Tras año y medio viviendo en Moscú y jugando en Siberia la situación se tornó insostenible. Con expedientes abiertos por parte del Gazprom Ugra tras prolongar sus estancias en España de manera injustificada después de ser convocado por la RFEF, Juan Emilio rescindió su contrato con el equipo ruso. En el camino, la oportunidad perdida de regresar al Barça en enero de 2020 para suplir a Ferrao, pero los dirigentes rusos se negaron a negociar una cesión. Ocho meses después, regresó a España para fichar por el Jimbee Cartagena con el que apenas jugó dos partidos de Liga. Una semana después de anunciar su retirada profesional para alistarse en el ejército, el CD Gádor, el equipo de su localidad natal que militaba en Tercera División, anunció su fichaje. "Solo quería jugar con mis amigos", llegó a declarar. El equipo melonero incluyó en el acuerdo de rescisión con Juan Emilio unas penalizaciones económicas por si el jugador fichaba por un equipo de Primera, Segunda o el extranjero que nunca ejecutó ni cuando fichó por el Ejido en 2022 ni cuando el Manzanares apostó por él en 2023.

De hecho, el conjunto presidido por Miguel Ángel Jiménez fue clave para que Juan Emilio se recuperase de una grave lesión de rodilla tramitando su operación y costeando su recuperación en 2021. "Hoy en día gracias a Dios, dentro de todo lo que hice y el revuelo que tuvo, intenté volver otra vez y fue justo cuando me rompí la rodilla. Estuve un año entre operación y recuperándome para poder ponerme nuevo. Sé lo que es jugar en Primera División y tienes que recuperarte bien para poder competir", aseguró. "Me puse a buen nivel y decidí volver a jugar en El Ejido, en Segunda, en Almería y en medio de la temporada vino Manzanares". Juanlu Alonso le había entrenado en la temporada 2018-19 en el Peñíscola. "Me conocía y me dio la oportunidad", aseveró el pívot, que, en apenas un año, ha vuelto al sitio en el que se encontraba en 2020. Jugando en Primera y convocado con España. "Me encuentro bastante bien. Quiero jugar al fútbol sala. Quiero disfrutar de esto. Quiero competir. Es mi vida. Tuve lo que tuve, pero al final hay que intentar revolver la situación y luchar por intentar llegar, más alto o más bajo, pero hasta donde uno pueda dejándose el cien por cien", declaró.

Juan Emilio es un deportista más que muestra su valentía reconociendo públicamente problemas referentes a la salud mental. "Hay gente que a lo mejor todavía recuerda cuando ve mi nombre lo que pasó en aquel momento. Ciertas personas no saben realmente lo que pasó y ellos se piensan que éste está loco perdido. No, loco perdido no. Tuve un mal momento, pero no me conocen. No sabían cómo estaba ni el por qué". Con el paso del tiempo, admitió que "el problema que tuve, sinceramente, es que lo hice mal. Lo dejé sin dar la información de verdad de lo que a mí me pasaba ni nada. Dije bueno, lo dejo y por eso te tachan ya de loco perdido. A lo mejor debería haber cogido en ese momento y decir darme una cámara. Mira sabes que lo que me pasa esto, esto y esto y es verdad que no estoy bien psicológicamente".

Los psicólogos deportivos señalan que hay un cambio de mentalidad en la sociedad y que los problemas mentales de los deportistas han dejado de ser un tema tabú. "En todo este parón que yo tuve, lo pasé muy mal ya que nadie me obligó, yo tomé mis propias decisiones y obviamente me equivoqué para mí. Tomé una mala decisión en mi vida. Fueron varias cosas y cuando decidí parar no dije los motivos exactamente. Tenía mis motivos y no es necesario explicar delante de una cámara lo que tengo personalmente. Cada persona es de una manera y yo soy más reservado, pero con decir que es verdad que no estaba bien en ese momento y hasta aquí he llegado pase lo que pase, porque antes va la persona. Si no estás a gusto, necesitas volar para estar mejor da igual que seas jugador de fútbol sala, como si eres carpintero o trabajas de electricista".

La gestión de las expectativas y de la frustración generan problemas en los deportistas como Juan Emilio. "Yo no soy rico, necesito el dinero como todo el mundo. Yo cogí, levanté la mano y me fui porque no estaba bien. No estaba en condiciones de estar en un equipo y dar el cien por cien. Desde que me pasó eso, estos cuatro años he podido aprender bastante", reconoció. "Son decisiones que tomas por una edad. Todo pasa porque eres un chaval de 21 años que no tienes experiencia en la vida y te puedes equivocar. He estado sin jugar un par de años, he tenido una lesión muy grave rompiéndome el cruzado y el menisco y me ha costado mucho recuperarme para volver a introducirme. Todo este tiempo que yo he estado recapacitando y sanándome personalmente, te das cuenta que al final tomas decisiones erróneas en tu vida", explicó Juan Emilio en una entrevista sin desperdicio al youtuber 'Game of Futsal'.

Lleva 7 goles en 11 partidos con el Quesos El Hidalgo Manzanares, el equipo revelación esta temporada, seis menos que su compañero de equipo, Daniel Gabriel (13), que es el máximo goleador de Primera. Sin embargo, Albert Canillas ha confiado en él. Dos entrenadores conscientes de su potencial han ejercido de faros para poner luz al final del túnel de estos 3 años de Juan Emilio. Juanlu Alonso ha recuperado su mejor versión. El pívot almeriense 'redebutará' junto a dos paisanos como su compañero de equipo, Cortés (sustituye al lesionado Catela), y Pani (Peñíscola), las otras dos grandes novedades de España para medirse a República Checa e Italia el 15 y el 20 de diciembre, los dos partidos que cerrarán la Ronda Élite de clasificación para el Mundial de Uzbekistán 2024. El jugador andaluz mira con optimismo al futuro. "Seguimos trabajando interior y mentalmente el día a día para que cuando llegue una situación similar, no igual exactamente, sepa reaccionar ante dificultades que me pasen", finalizó Juan Emilio.