Identificados algunos ultras del Benfica que lanzaron bengalas a los aficionados de la Real Sociedad

Vergüenza en Anoeta. El partido entre la Real y el Benfica estuvo marcado por los incidentes y acciones vergonzosas que protagonizaron un nutrido grupo de ultras del Benfica. Primero en las calles y después en el mismo encuentro, donde en el minuto 52, con 3-1 en el marcador, los portugueses lanzaron desde su grada (segundo piso) hasta dos bengalas dirigidas al área de abajo, donde se situaban aficionados de la Real. La primera impactó en la grada y otra en la misma zona, aunque aterrizó en el área donde se ubican los fotógrafos, detrás de la portería. "VERGÜENZA AFICIONADOS DEL @SLBenfica", tuiteó la Real Sociedad a los pocos instantes de los lanzamientos. Algunos ya están identificados e imputados por lo sucedido, tal y como informó el club.

El colegiado del encuentro, Anthony Taylor, no paró el partido. Desde la megafonía del estadio se rogó que dejaran de lanzar objetos e incluso Otamendi, central del Benfica, se acercó a la zona en la que se situaban los radicales de su club para pedirles que dejaran de encender bengalas.

Unos actos lamentables y peligrosos que ya protagonizaron en 2015 en un encuentro en Madrid contra el Atlético (1-2). Aquel día fue en la celebración del gol del empate de Gaitán. Desde lo alto del fondo en el que se ubicaron las aficiones visitantes, los lisboetas lanzaron hasta cinco bengalas a los aficionados colchoneros situados en el primer anfiteatro y en la zona de seguridad entre la grada y el terreno de juego donde se situaban los seguidores con movilidad reducida. Una de ellas golpeó a un niño. El club portugués recibió una sanción de la UEFA de 20.000 euros.

Antes del encuentro, sobre las 17.30 horas, los ultras del Benfica irrumpieron en la plaza de Armerías del barrio de Amara corriendo y gritando, al tiempo que arrojaron sillas, bengalas y otros objetos. Un centenar de los seguidores más radicales del equipo lisboeta fueron los autores de estos actos vandálicos.

Armados, incluso con palos, no tuvieron reparo alguno en golpear a los aficionados que pasaban por allí. Hay que recordar que la plaza de Armerías es el habitual lugar de reunión de la hinchada realzale antes de cada partido. Por eso, los aficionados más ruidosos de la Real no se quedaron de brazos cruzados y respondieron.

Tras los incidentes y ante la ausencia de la Ertzaintza, que no se encontraba en el lugar en el momento y a la que la pelea ha pillado por sorpresa, abandonaron el lugar a la carrera para dirigirse directamente a Anoeta. Finalmente, esos incidentes acabaron con cuatro detenidos que no pudieron acceder al campo y que fueron llevados a comisaría.

Ya dentro del estadio, a la salida de los dos equipos al campo y mientras sonaba el himno de la Champions, los hinchas lisboetas recibieron a los suyos con bengalas, provocando los gritos de protesta de los aficionados de la Real que han poblado las gradas del Reale Arena. La Policía ya ha identificado a algunos de los ultras que provocaron estos incidentes.

No es el primer altercado entre aficionados ultras que se produce en nuestro país esta temporada. Recientemente, ultras del Osasuna tuvieron una salvaje pelea en Sevilla con radicales del Betis e incluso llegaron a propinar una brutal paliza a uno de ellos, que se quedó tendido en el suelo inconsciente.