FÓRMULA 1

¿Para qué sirve la parafina y el Flow Viz en Fórmula 1?

Se trata de una imagen icónica de toda pretemporada de Fórmula 1, los monoplazas recién estrenados cubiertos de pintura reflectante o flúor. Claro que tiene un por qué.

El Williams de Alex Albon rociado con parafina./Reuters
El Williams de Alex Albon rociado con parafina. Reuters
Javier Mercadal

Javier Mercadal

Cuando llegan los test de pretemporada en la Fórmula 1, la expectación por ver los nuevos coches sobre el asfalto es máxima. Los aficionados a este deporte no pierden oportunidad de analizar el aspecto de los monoplazas y su rendimiento, aunque este luego no sea extrapolable a la temporada. Como dice su nombre, los test son para probar los coches, y hacer algún cambio si fuese preciso y el reglamento lo permite. Aunque los seguidores más experimentados están habituados a ver innovaciones sobre la pista, quien se acerque por primera vez a estas carreras puede sorprenderse de algunas de las prácticas que se llevan en ellas. Sin duda, una de las más llamativas es ver a los bólidos cubiertos de pintura fluorescente. Se trata de una práctica nada fortuita, que se realiza en un deporte tan táctico y tecnológico como es la F1: tiene una intención clara e ingeniosa detrás.

El compuesto reflectante en cuestión posee el nombre de Flow Viz y está formado por un polvo fluorescente mezclado con un aceite con base de parafina. Por este motivo, también es conocido popularmente como parafina. ¿Su función? Resumiendo un poco: hacer visible al ojo humano los flujos aerodinámicos del coche.

La idea puede parecer simple, pero es bastante ocurrente. Los ingenieros eligen la parte del coche que quieren testar y un mecánico extiende el ungüento con una pistola especial antes de que el coche salga a la pista. Es necesario aplicar una gran cantidad para que el experimento funcione, por lo que suele dejar imágenes impactantes cada temporada. De esta manera, a medida que el coche acelera y pasa por curva, la pintura se seca mientras que el aceite se evapora. Esto deja a la vista las estructuras de flujo que posee el vehículo, o lo que es lo mismo, el recorrido que posee el aire al entrar en contacto con monoplaza.

Inconvenientes del uso de Flow Viz en Fórmula 1

La principal desventaja de este sistema es que el espesor máximo que ofrece es de 6 milímetros aproximadamente. Esto implica que si se crean vórtices, el sistema no los detecta. ¿Qué son los vórtices? Si hablamos en términos de aerodinámica, se trata de unos remolinos por los que los fluidos (ya sea agua o aire) se mueven de forma circular. Esto no es necesariamente algo negativo ya que hay partes del coche en los que pueden ser buscados por los ingenieros, aunque resultan profundamente contraproducentes si no se desea dicho efecto.

El otro gran problema, claro, es que está a la vista de todo el mundo. Al visibilizar el comportamiento aerodinámico por medio de pintura fluorescente, no solo los ingenieros del equipo conocen los secretos del coche, sino que estos quedan expuestos para toda la parrilla. En una competición en la que los ases en la manga son moneda común, ofrecer información de manera abierta no suele ser una buena opción.

El Red Bull de Max Verstappen con parafina en el alerón trasero. Reuters
El Red Bull de Max Verstappen con parafina en el alerón trasero. Reuters

Para paliar estos problemas, así como para esconder algunas cartas, el uso de la parafina se compagina siempre con las simulaciones de fluidos realizados por ordenador. Estas reciben el nombre de simulaciones CFD y permiten al equipo saber cómo se comportará el coche sin necesidad de sacarlo a pista. Además, los equipos también cuentan con túneles del viento en sus instalaciones que poseen un objetivo similar.

Dónde se usa la parafina en un Fórmula 1

Como hemos contado, esta técnica está pensada para conocer el comportamiento aerodinámico del coche. Por lo tanto, solo tiene sentido aplicarla en la carrocería del mismo. A partir de ahí, depende de los ingenieros del equipo y lo que deseen testar en una prueba completa. Sin duda, las partes de un monoplaza de fórmula 1 que más carga aerodinámica poseen son el morro, los portones laterales, el alerón trasero y el fondo plano. Por ello, suelen ser las elegidas para ser rociadas con Flow Viz.

No obstante, en alguna ocasión se ha podido ver cómo los equipos optan por rociar todo el coche de fluorescente. Esto tiene un sentido, y es que al final el rendimiento de un coche no solo depende de la suma de sus partes sino de su comportamiento como conjunto.

Cuándo se utilizó por primera vez la parafina en Fórmula 1

La primera vez que los aficionados pudimos observar la pintura fluorescente sobre la carrocería de un Fórmula 1 fue en la pretemporada de 2010 en el circuito de Jerez. McLaren fue el primer equipo en animarse en utilizar públicamente una técnica que, sin embargo, de puertas para adentro varios equipos llevaban usando varios años antes en sus túneles del viento. Como la parafina sirve para comprobar sobre el la pista los resultados de las simulaciones realizadas previamente por ordenador, el equipo británico creyó que no era necesario ocultar el test al resto de competidores y lo cierto es que el ejemplo rápidamente cundió en el resto de la parrilla. Así, en 2011, equipos como Red Bull, Lotus o Renault echaron mano del líquido viscoso para comprobar el rendimiento de sus bólidos.

Antes, las escuderías llevaban a cabo test similares pero con métodos más rudimentarios, como por ejemplo colocar hilos en el coche para que los ingenieros, a ojo, determinasen la trayectoria del aire al impactar con el coche o impedían que nadie tocase el vehículo si había llovido para así poder ver el flujo de las gotas de agua. Estas soluciones, si bien eran ingeniosas, no eran completamente fidedignas y podían inducir a error, algo que se corrige con el Flow Viz.