El DRS del nuevo alerón trasero condiciona a Fernando Alonso en Bakú

Era una de esas mejoras esperadas desde hacía semanas y su estreno en Bakú no ha sido el esperado. El nuevo alerón trasero de Aston Martin, una evolución arriesgada del equipo de Silverstone, ha dado problemas en las dos primeras sesiones cronometradas en las que ha estado presente. Pero Fernando Alonso ha sido capaz de, aun así, exprimir al máximo el potencial del AMR23, como lleva haciendo desde Baréin, para quedarse a solo 0,076 segundos del Mercedes de Lewis Hamilton y asegurarse el sexto puesto de parrilla para el domingo.

Desde los únicos entrenamientos libres de este primer fin de semana del nuevo formato al Sprint, el DRS del asturiano y el de su compañero, Lance Stroll, presentó problemas. Llegó a no abrirse en varios momentos de la FP1 y Aston Martin tuvo a Alonso varios minutos en boxes revisando toda la trasera de su monoplaza.

Pero el verdadero problema llegó en la clasificación del GP de Azerbaiyán, que se celebró el viernes por la tarde como parte del nuevo formato al Sprint. Aunque durante las primeras dos sesiones pareció abrirse con cierta normalidad y permitió a Alonso estar entre los cinco primeros con holgura, en la Q3 definitiva falló más de la cuenta.

El Aston Martin registró una velocidad punta durante la clasificación (326 km/h) que se quedó a nada menos que 16 km/h del mejor registro de Red Bull (a 10 de Mercedes y a 8 de Ferrari), cuando en la FP1 habían llegado a poder rodar a 333 km/h.

"Creo que podríamos hacerlo mejor. Tuvimos algunos problemas en la FP1 y también en la clasificación con el DRS, que nos costó dos décimas. Al estar tan apretados en la clasificación, marca la diferencia. Podríamos haber sido cuartos. Pero sólo es viernes, nos espera un fin de semana largo y hay que esperar y ver qué pasa. Otra clasificación mañana, otra carrera... Tenemos muchas oportunidades, así que espero que podamos recuperarnos de esto", apuntó Alonso en Bakú.

Cuando se le preguntó si le sorprendió la pole de Leclerc, Alonso contestó: "Bueno, sí y no. Creo que en Yeda también estaban en la primera fila, pero Charles tuvo que asumir la penalización después de la sanción de Baréin. Creo que en general son rápidos, pero han tenido mala suerte. También han sufrido la penalización de Carlos y el abandono de Charles en Australia. Así que creo que son rápidos y lo han demostrado hoy. Intentamos ser más constantes que ellos".

Carlos Sainz tampoco lo tuvo fácil este viernes en la batalla por la pole de cara a la carrera del domingo. El español no se encontró con su mejor versión y sufrió de lo lindo para marcar vueltas limpias, saliéndose de pista en varias ocasiones.

A pesar de todo, logró exprimir su Ferrari para asegurar el cuarto puesto, por detrás de los dos Red Bull y Leclerc, aunque a ocho décimas de su compañero de equipo. "Ha sido una mañana y una tarde muy complicadas. Desde los entrenamientos libres 1, no encontré buenas sensaciones con el coche, y sufrí bastante. Para la Q3 solo me quedaba un juego de neumáticos. No fue un buen día para mí. Es mi culpa 100% porque no tenía confianza y cada vez que apretaba, me salía de pista", apuntó el madrileño.

"Lo peor para mí es que hay parque cerrado, y será difícil cambiar algo a partir de ahora. Tendré que encontrar todo desde dentro de mí mismo para asegurarme de encontrar algo de ritmo. Por alguna razón, aquí el coche va diferente. Creo que Charles en Bakú hace buenas vueltas y está marcando la diferencia. He sufrido desde que puse el coche en marcha".

Por el momento, el sábado habrá una nueva clasificación reducida (10.30 CEST) y una carrera a 17 vueltas (15.30 CEST) en la que se repartirán 8 puntos para el ganador y puntuarán los ocho primeros. Será el aperitivo para la carrera del domingo, a 53 vueltas, donde Lewis Hamilton y Fernando Alonso volverán a salir en la misma fila de parrilla. El duelo con el que la F1 vibró en 2007 parece estar de vuelta y eso solo puede sumar.