¿Por qué hay quien se alegra de que Van der Poel no compita? "Con él, las carreras se acaban en dos minutos"
La estrella neerlandesa domina el ciclocross y polariza la atención del público en una escena que, en realidad, gana lustre con su presencia.
![Mathieu van der Poel, en la línea de salida de una prueba de ciclocross. /FLCS](http://s3.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202501/04/media/cortadas/20250105-mvdp-uci-cx-wc-FLCSZONHOVEN-ReJrqOcOPYRHMCKIsRBMBSL-1200x648@Relevo.jpg)
El barro del ciclocross es salsa para Bélgica y Países Bajos, dos países locos por el ciclismo que en invierno se distraen de la carretera para centrarse en las campas, particularmente brillantes cuando dos estrellas como Wout van Aert y Mathieu van der Poel se acercan a iluminarlas. Este último, en particular, se ha erigido en el gran protagonista tanto por lo que sucede en competición, con cinco (aplastantes) victorias de cinco posibles, como por lo extradeportivo: los Lamborghini con los que acude a los circuitos, el jet privado con el cual se desplazó a la prueba francesa de Besançon o los 50.000€ que, según publicó La Gazzetta dello Sport, cobra por participar en las carreras que no forman parte de la Copa del Mundo.
La asturiana Lucía González Blanco, que este mes de diciembre se alzó con la Copa de España de Ciclocross por tercera edición consecutiva y se presenta habitualmente en las pruebas belgas y neerlandesas con su equipo Nesta-MMR, constata el impacto de Van der Poel: "Normalmente hay mucho público en las carreras; pero, si él participa, el circuito está a reventar". Lo mismo ocurre con Van Aert. "Es muy positivo que no se alejen del ciclocross, que no lo olviden, que sostengan esa pasión con el paso de los años. No obstante, es cierto que, con un ciclista tan superior como está siendo Van der Poel este año, las carreras son menos emocionantes".
"En Zonhoven, la carrera se acabó en dos minutos", relata el alavés Javier Ruiz de Larrinaga, otro que se ha batido durante años en el circuito belga y que este mes se estrena como seleccionador español de ciclocross sustituyendo a Pascual Momparler. En aquella prueba de la Copa del Mundo de Ciclocross UCI, que suponía su debut esta campaña, Van der Poel se destacó ya en la primera vuelta para firmar la victoria con minuto y medio de ventaja sobre el 'heredero del barro' Thibau Nys.
"A nivel de espectáculo, un dominio así puede desvirtuar la competición y restarle suspense", contempla Larrinaga. "Sin embargo, es muy positivo que un ciclista de su nivel muestre ese compromiso tanto con la carretera como con el ciclocross. Además de la atención que atrae, es la demostración palpable de que se pueden compaginar ambas disciplinas y puede servir para disipar el miedo de otros ciclistas de carretera que piensan que no pueden o no deben involucrarse en el ciclocross".
"Sin Van der Poel, las carreras están más peleadas y hay ocho candidatos a la victoria en lugar de uno solo", concluye el técnico vasco. Son Michael Vanthourenhout, Eli Iserbyt, Niels Vandeputte, Laurens Sweeck, o el alicantino Felipe Orts: un abanico de protagonistas para mantener la incertidumbre hasta el último momento y brindar competiciones espectaculares de principio a fin.
"Pero es que, como espectador, a Mathieu van der Poel hay que verlo", tercia Benjamín Noval, exciclista y padre de un juvenil homónimo que está siendo una de las sensaciones de la temporada a nivel español e incluso mundial. "Es un prodigio de la naturaleza que hace parecer fácil lo que, en realidad, es muy difícil. Sucede lo mismo que ocurría en la carretera como Miguel Indurain o Alberto Contador. Aunque su victoria se dé por descontada, el público desea verlo porque son ciclistas que marcan su época".
A los 'puristas' que prefieren ver competir a la segunda fila en detrimento del lustre de Van der Poel, unas molestias en las costillas provocadas por una caída en el ciclocross de Loenhout (que, por supuesto, ganó) les ha brindado la oportunidad de disfrutar de citas sin él. Entre ellas, el Superprestigio que este sábado se anotó Wout van Aert en Gullegem en un emocionante mano a mano con Iserbyt o la prueba de la Copa del Mundo de Ciclocross UCI de este domingo en Dendermonde (15h, Eurosport) donde el mismo Van Aert encabeza una participación de lujo pese a la ausencia de Mathieu.
Tanta conversación en torno a las pruebas masculinas corre el peligro de restar atención a las femeninas, que esta campaña están ofreciendo un 'toma y daca' excelente entre la campeona del mundo Fem Van Empel, la experta Lucinda Brand, la talentosa Puck Pieterse y la neerlandesa de origen dominicano Ceylin del Carmen Alvarado, entre otras. "En Bélgica, los aficionados están muy acostumbrados a llegar al circuito sólo para ver a los profesionales masculinos", lamenta Lucía González, "pero es que este año el panorama femenino está muy emocionante, con muchas alternativas y resoluciones ajustadas en la misma línea de meta". Ellas también se lucirán en la Copa del Mundo de Ciclocross UCI de Dendermonde (13h40, Eurosport).