Chus Mateo y Rudy piden perdón
Técnico y jugador del Madrid comparecieron junto a Rudy para disculparse por lo sucedido y agachar la cabeza ante el juego del equipo.

La batalla campal sobre el parqué del WiZink Center ha dado la vuelta al mundo en cuestión de segundos. Mientras el planeta hablaba segundo a segundo de todo lo ocurrido en el pabellón, los protagonistas estaban en los vestuarios reflexionando sobre una escena que no debía volver a ocurrir. Faltaba su opinión, su testimonio, el más valioso para dar carpetazo a una historia que jamás debió comenzar. Primero fue Obradovic el que pidió paz y que los incidentes se quedaran, tan solo, en lo ocurrido en la noche de este jueves. Luego fue Chus Mateo, acompañado de Rudy Fernández (uno de los capitanes), los que alzaron la voz en señal de disculpa.
El entrenador blanco, en primer lugar, explicó con detalle lo ocurrido: "Por normativa, salir del banquillo implica estar fuera. También ha habido más faltas descalificantes y han decidido suspender el partido. Espero que esto no llegue a más. Todos pedimos perdón. Hay que entender el momento, la frustración. No nos gusta ver esto. A nadie. Pedimos perdón, sin duda alguna. Hay que ponerse en la piel de los jugadores en un momento de frustración". Salvo Leday, Llull y el descalificado por faltas Poirier, todos los demás salieron expulsados de la reyerta.
Y prosigue: "Esto es un deporte que nos gusta y a nadie le gusta lo que ha pasado al final. Hay que levantar la mano y saber quién podría estar calmado en una situación así. Por ahí ha podido venir la reacción. Los jugadores han sido capaces de calmarse. En los vestuarios todo se ha calmado más. Lo único que puedo decir es que vamos a pelear hasta el final. Ojalá podamos entender el cómo. No va a ser fácil, pero tampoco imposible".
Pese a que era impensable valorar lo ocurrido sobre la pista hasta antes del incidente, también era labor de entrenador ofrecer un análisis completo de la victoria contundente del Partizan en Madrid. Hasta el momento, Chus Mateo era cuestionado por aficionados, al no conseguir los resultados esperados como con la temprana eliminación de la Copa del Rey. Él y sus jugadores se mantenían firmes, creyendo en el proyecto y dando tiempo a la evolución. La derrota ante el equipo serbio, sin embargo, implica graves consecuencias deportivas, como estar a una sola derrota de perder el acceso a la Final Four, uno de los grandes objetivos de la temporada.
Por ello, incluso antes de hablar de lo ocurrido, Chus Mateo realizó un largo discurso pidiendo disculpas por su lectura: "Aunque el playoff no ha acabado todavía, me gustaría pedir disculpas a mis aficionados y a mi equipo porque no he sabido bien transmitir lo que era este segundo partido del playoff. Hemos estado demasiado ansiosos, no hemos entendido por dónde iba a ir el juego. Teníamos muchas ganas de agradar y lo hemos malentendido. Nos ha faltado muchísima cabeza y disciplina. Entono el mea culpa. Los jugadores lo han intentado y es honesto decir que yo no he sido capaz de transmitir a mis chicos lo que es este partido. Han sabido jugar bien con nuestros nervios. No hemos entendido el cómo. No hemos sido disciplinados defensivamente. Nos han atacado desde muy lejos de canasta y nos han anotado exageradamente fácil".
La labor de capitán de Rudy Fernández
El Real Madrid programó una rueda de prensa en la que el entrenador y uno de los capitanes, de forma simultánea, daban respuestas a los medios de comunicación. La ocasión lo requería. Era necesario dar un mensaje rotundo y directo. Y Rudy, un líder tanto en la Liga Endesa como en la Selección, supo transmitir una clave de serenidad: "Es difícil estar en esta situación. Lo vivo como jugador y teniendo campo a favor... El Partizan ha jugado mejor. Lo de Punter, la reacción de Sergi... Por eso estamos aquí para decir que la prioridad es el baloncesto. Debemos dar un buen espectáculo y no el que hemos ofrecido. Le agradecemos a Obradovic sus palabras para tranquilizar a las aficiones, a la de ellos y la nuestra. Ahora planteamos una eliminatoria muy cuesta arriba. El Madrid siempre tiene que luchar hasta el final".
Precisamente Obradovic ofreció, minutos antes, un ejemplo de paz ante los allí presentes. El técnico desveló cómo los vestuarios habían hablado, llegando a buen puerto, y pidió centrarse en el baloncesto. Rudy se lo agradeció: "Lo que hemos vivido hoy es para que pidamos perdón a nuestros aficionados y a los aficionados del baloncesto. En estas situaciones a veces hay errores y hoy es uno de ellos. Lo ha dicho Obradovic, ellos nos consideran un equipo amigo y nosotros también. Zeljko conoce muy bien esta casa. La tensión del partido tiene que quedarse en lo de hoy. Espero que el próximo día hagamos un partido de baloncesto. Espero que no vuelva a pasar esto".
Más allá de las declaraciones, hay imágenes que valen más que mil palabras. Dos leyendas de esto, como Rudy y Obradovic, salieron de la pista abrazados, en señal de hermanamiento. Una imagen llamativa y más tras una reyerta que acabó con 21 descalificaciones. Señal de que su vínculo va más allá de este partido: "Para mí Obradovic es un referente. Hemos vivido muchísimas cosas juntos y hay muy buena conexión. Hemos hablado de lo que ha pasado y ahí se queda. No hemos hablado nada malo, hay que evitar estas situaciones. Por desgracia no lo hemos podido hacer de una mejor forma. Hemos estado hablando con los jugadores y el staff y se ha quedado ahí. Espero que los que se hayan ido lesionados, estén bien".