La AIU abre un nuevo procedimiento a Katir de manipulación

La Unidad de Integridad del Atletismo (AIU) ha anunciado este miércoles la acusación al atleta español Mohamed Katir, que está suspendido dos años por fallar a tres controles antidopaje, por 'tampering' (manipulación).

Katir, subcampeón del mundo de 5.000 metros, fue suspendido en febrero por un periodo de dos años, hasta el 6 de febrero de 2026, por la AIU por "una infracción derivada de tres fallos de localización en los últimos doce meses".

Esta nueva acusación, de la que la AIU no ofrece más detalles que la apertura del expediente por infringir el punto 2.5 del reglamento, podría suponer un incremento de la sanción, que no obstante está aún "por determinar", según dicho organismo.

El primer control fallido fue el 28 de febrero de 2023. El agente de control acudió a la casa de Katir en Mula (Murcia) y quien le recibió fue el padre de Katir que explicó que el atleta estaba en Lisboa hasta el 2 de marzo.

Al recibir la notificación de su ausencia, Katir explicó que sí había estado presente los 60 minutos que había registrado en el sistema ADAMS, de 7 a 8 de la mañana, y que posteriormente, a las 8:30 horas, recibió un mensaje de su prometida pidiéndole que fuera a verla a Lisboa e inmediatamente reservó un vuelo y se fue al aeropuerto.

La AIU confirma que el 29 de marzo, en plena investigación sobre el control fallido, Katir remitió la reserva del vuelo después de ser solicitada en repetidas ocasiones. Para su sorpresa, el justificante de compra era de dos días antes del control, no siendo fiel a lo que había defendido el atleta. Primer control fallido y sin justificación.

La segunda ausencia ocurrió el 3 de abril de 2023. De nuevo, quien abrió la puerta de casa fue el padre de Katir y, en esta ocasión, señaló al agente de control que el atleta se encuentra entrenando en Font Romeu (Francia). En este control fallido, según ha podido saber Relevo, han estado gran parte de las opciones de defensa para librarse de la sanción por lo enrevesado de la situación.

Primero los hechos. Katir intentó cambiar su información en ADAMS para especificar que desde el 28 de marzo hasta finales de abril se iba a encontrar en suelo francés, pero según él, ni la aplicación ni el sistema funcionaban. Por tanto, envió un correo electrónico para intentar cambiar la información. El problema, según la AIU, es que envió el mail a la dirección equivocada, algo que ha confirmado el propio atleta en su comunicado.

Según la investigación, Katir recibió una respuesta automática donde se le remitía la dirección correcta para su petición pero ya no hubo respuesta alguna por parte del deportista murciano. Durante los días posteriores, Katir intentó cambiar la información registrada en ADAMS y lo logró el 29 de marzo para actualizar su localización hasta el 31 de marzo. Y el mismo 3 de abril, día del segundo control, cambió de nuevo su localización para reflejar que ese mismo día estaba en Francia.

Según Katir, lo hizo antes de la hora registrada en su perfil de ADAMS (19:50h a 20:50h), pero según la AIU lo hizo 20 minutos después del encuentro del agente de control con su padre en su casa. Por tanto, según la AIU, lo hizo tarde y cuenta como una segunda ausencia. Katir tuvo la oportunidad de solicitar una revisión administrativa sobre este control en abril de 2023, pero no lo hizo hasta diciembre, después de que le comunicaran la tercera infracción.

El tercer control fue el 10 de octubre de 2023. De nuevo, fue el padre de Katir quien abrió la puerta al agente de control y, en esta ocasión, le informó de que el atleta se encontraba entrenando a 30 minutos de su casa. Además, le comentó que estaba intentando contactarle por teléfono pero que no había podido lograrlo. La explicación de Katir fue mostrar sorpresa porque pensaba que su hora registrada era entre las 7 y 8 de la mañana, y señaló que debía ser un error de la aplicación.

En la defensa de este tercer control, Katir envió un pantallazo de su perfil de ADAMS donde se señalaba que su hora de localización era de 7 a 8 de la mañana. La AIU desmontó las alegaciones del atleta señalando que el pantallazo era real y de ese día, pero que había sido realizado tras cambiar la hora después de la visita del agente de control.

El equipo jurídico de Katir trabajó en la posibilidad de buscar una vía de escape con el segundo control y sus intentos por cambiar la localización. Además, buscando expresar que todo había sido fruto de despistes y de la personalidad de un Katir, que no suele coger el teléfono a nadie. Finalmente, tras conocer la detallada explicación de la AIU, el atleta murciano ha decidido aceptar la sanción.

"Estos fallos de localización ―explica Katir en su comunicado― se han debido al desconocimiento por mi parte del correcto funcionamiento del sistema de localizaciones a través de ADAMS, fundamentalmente en la actualización de datos tras de la presentación trimestral inicialmente realizada por mi parte. Pero, sobre todo, este problema ha venido motivado porque soy una persona muy despistada. Asumo que estos despistes o errores en la actualización de los datos de localización en ADAMS acaban por convertirse en una falta de diligencia.