VELA

La falta de viento aplaza también la medalla de Xammar y Brugman

La medal race de 470 se postpone para este jueves con la pareja española segunda a siete puntos del oro.

Jordi Xammar y Nora Brugman navegan en aguas de Marsella. /RFEV
Jordi Xammar y Nora Brugman navegan en aguas de Marsella. RFEV
Nacho Gómez

Nacho Gómez

"A nosotros nos viene todo bien; si se llega a disputar la medal bien, y si se aplaza para mañana también. Estamos muy bien preparados para todo. Además, mañana parece que hay más viento y eso nos favorece, porque en esas condiciones estamos muy cómodos". Las palabras de Nora Brugman nada más oficializarse el aplazamiento de su medal race cayeron como un bálsamo en los pantalanes de Marsella, en los que la desesperación es la tónica dominante por el viento tan caprichoso y rolón que acompaña a la vela olímpica desde su inicio.

Y es que la bendita vela es lo que tiene; al final, el que manda es el viento. Ya nos pasó con la previa del oro de Diego Botín y Florian Trittel, que vieron cómo los jueces suspendían dos veces la medal race una vez iniciada, aunque la jornada siguiente, con un viento ya más imponente, sacaron el rodillo para llevarse el oro. Con el 470 ha pasado lo mismo pero, al menos, Jordi Xammar y Nora Brugman no tuvieron ni que salir al agua ya que el jurado aplazó la regata cuando la flota aún estaba en tierra.

Lo que dice Nora es una verdad como un templo: la tripulación española ha demostrado en los últimos meses que en condiciones de viento medias y altas tienen un dominio del 470 superlativo; de hecho, vienen de ser campeones del mundo y de Europa este mismo año. Mucho ha llovido desde que se conocieran cuando eran unos críos cuando sus familias organizaron conjuntamente un viaje a Perú, y ese conocimiento mutuo les ha dado una compenetración a bordo insuperable.

Jordi Xammar se encuentra más cómodo cada día que pasa, sabedor de que toda esta inestabilidad puede afectar mucho más a sus rivales que a ellos. "Yo creo que incluso nos viene bien la suspensión. Siempre es más difícil para los primeros, que llevan el peso en los hombros y siempre es más difícil el papel de perseguido que el de perseguidor. Yo estoy muy feliz porque tengo aquí a mi mujer con mi hijo ya en la barriga, mis padres... Ayer dormí de maravilla, me vi la película de Ayrton Senna y me gustó mucho".

Juan De la Fuente, el experimentado entrenador argentino que les ayuda y que está en sus séptimos Juegos, está maravillado con el comportamiento del equipo. "Ellos están muy tranquilos; Nora son sus primeros Juegos y parece una veterana, y Jordi son sus terceros Juegos, viene muy preparado... Yo desde mi posición les doy tranquilidad, pero no les hace falta".

Mañana Jordi y Nora se levantarán, se pondrán el Highway to Hell de ACDC para escucharlo conjuntamente como todos los días para venirse arriba y saldrán al agua a demostrar que su sueño de pequeños está al alcance de la mano.