Carlos Alcaraz cede con Zverev y no llegó la carambola milagrosa

En el último punto del primer set se decide todo. Carlos Alcaraz, contra las cuerdas, 6-5 abajo en el tie break, se revuelve y engancha un revés paralelo que Alexander Zverev devuelve como puede, dejando la bola a media pista. El murciano va como rayo, pero tan rápido que se pasa de frenada: en vez de aguantar a que la pelota bote y meterla a placer, se juega una volea baja que se le escapa. Zverev grita desahogado y Alcaraz maldice.

Ese punto clasifica matemáticamente a Zverev a las semifinales de las ATP Finals de Turín como primero de grupo -sin importar ya lo que ocurriera en el partido- y deja a Alcaraz al borde del abismo. El murciano, cabreado, lanza furioso la raqueta contra la bolsa y después se lleva la mano a la cabeza varias veces. No entiende el cortocircuito.

En el inicio del segundo set, Alcaraz entrega otra vez el servicio y un rato después ya no hay vuelta atrás: Zverev vence por 7-6 (7-5) y 6-4, elimina prácticamente Alcaraz y avanza a las semis de las ATP Finals con el currículum inmaculado, tres victorias, seis sets a favor y cero en contra. Su rival mañana será el estadounidense Taylor Fritz, mientras que por el otro lado está Jannik Sinner esperando rival.

Para ello, habrá que esperar al Andrey Rublev-Casper Ruud de esta noche. El noruego tiene todas las de ganar, ya que le basta con ganar un único set. Y a Alcaraz solo le valía una carambola remotísima que no se dio: que el noruego se hubiera retirado antes de saltar a pista. Era el único escenario en el que el murciano hubiera avanzado a semifinales. Al arrancar el Rublev-Ruud a las 20:30, Alcaraz está eliminado.

Si Rublev ganara en dos sets a Ruud, todavía podría haber un triple empate entre Alcaraz, Rublev y Ruud a una victoria y dos derrotas. Ahí entraría el primer criterio de desempate, que sería el porcentaje de sets ganados, pero los tres estarían también empatados con dos a favor y cuatro en contra. Habría que ir al porcentaje de juegos ganados y ahí Alcaraz ya no alberga ninguna posibilidad: tiene un 45,3% de juegos ganados y cualquier combinación clasifica a Rublev o a Ruud.