Adiós a la piscina de Málaga donde entrena el nadador Carlos Garach: cierra esta semana

Un club de natación que se ahoga. Un nadador de élite que se queda sin piscina y que tiene el Mundial en menos de un mes. Y eso sin contar que los Juegos Olímpicos de París están a la vuelta de la esquina. El problema de Carlos Garach, nadador granadino que entrena en la piscina Inacua de Málaga, y del club al que da nombre ese mismo centro deportivo municipal, está en sus horas más críticas. Tanto es así que el próximo 20 de noviembre habrá una manifestación para exigir una solución definitiva. ¿El motivo? La piscina cierra esta semana.

Vayamos por partes. Garach, doble campeón del mundo júnior en 800 y 1.500 metros libres, así como una de las grandes promesas de la natación vive en Málaga. Allí es donde la Federación Andaluza de Natación tiene la residencia de aquellos nadadores considerados de alto rendimiento. Sin embargo, como ya explicó Relevo, la piscina donde entrena sufre una serie de imperfectos desde hace ya más de seis meses, que siguen sin solución.

Pese a que desde el Ayuntamiento y la gerencia de la instalación han puesto algunos remedios temporales -como calentar la piscina exterior, de 25 metros de longitud, para salir del paso- las obras necesarias para reabrir la piscina cubierta de 50 metros, donde debería entrenar Carlos Garach, no llegan. Y a eso se suma que la piscina exterior dejará de calentarse en los próximos días porque cierra a final de semana.

"El problema está en la estructura que soporta el techo. Hay que sanearla y el Ayuntamiento ha pedido varios presupuestos. Pero en las últimas dos semanas no se ha movido un pelo", explica a Relevo el entrenador del nadador granadino, Xavi Casademont. "El pasado jueves debería haber ido una empresa a valorar lo que ocurre en la piscina", continúa. Sin embargo, la empresa no acudió a la cita. "No pudieron ir y, supongo, que lo harán esta semana", añade Casademont, quien también asegura que la intervención "es un arreglo relativamente rápido, de ocho o diez días". Eso sí, esto solo es un "parche" pues el problema estructural continuaría, según matiza el también director deportivo de la Federación Andaluza de Natación. "Para abrir, hace falta que un técnico firme que la estructura soporta el peso. Y los del Ayuntamiento de Málaga no están por la labor". Es decir, que sin la firma del técnico, o lo que es lo mismo, sin la obra adecuada para que la piscina esté apta, no se puede abrir.

Así las cosas, Garach ha tenido que compartir entrenamientos con otra instalación, Torremolinos, la cual es insuficiente al ser de 25 metros y no de 50, por las mañanas y tampoco tener una amplia disposición horaria. Mientras que, por las tardes, lo hacía en la piscina exterior de Inacua, que estaba siendo calentada, pero que se despide esta semana hasta el próximo verano.

A partir de la semana que viene, el nadador solo dispondrá de la instalación de Torremolinos. Si bien, como explica su entrenador, "nos salva que el día 21 me voy con Carlos a Australia hasta el Mundial y el resto de fondistas que entrena ahí se va al CAR de Sierra Nevada (Granada) hasta el Campeonato de España que arranca el día 25". Una suerte que evita un problema mayor para Garach… pero no por mucho tiempo. Porque, recapitulemos: Garach estará en Australia, el resto de nadadores se tendrá que desplazar hasta otra provincia (Granada), pero cuando el 2 de enero arranque de nuevo la temporada de entrenamientos, ¿qué va a pasar? Esa es la gran pregunta sin respuesta.

El silencio por parte de la administración, así como de la instalación, ha provocado que los familiares y miembros del CN Inacua Málaga, club que se entrena en este centro deportivo malagueño, hayan convocado una manifestación para el próximo 20 de noviembre. La marcha saldrá a las once de la mañana desde la céntrica calle Marqués de Larios y finalizará frente al ayuntamiento malagueño. Y es que, a diferencia de aquellos que sí disputarán el Campeonato de España, el resto de nadadores esta semana dice adiós a su piscina.