MOTOGP | GP SOLIDARIO

Las lágrimas de Fonsi Nieto por el título de Jorge Martín que explican su redención: "Me acordé de mi tío Ángel, de mis lesiones, la videollamada con mis hijos..."

El jefe de equipo, que nunca pudo ser campeón mientras fue piloto, termina entre lágrimas tras la victoria de su pupilo.

El equipo de Jorge Martín celebra el título. /EFE
El equipo de Jorge Martín celebra el título. EFE
Gonzalo Cabeza

Gonzalo Cabeza

El apellido Nieto es el del motociclismo, porque aunque después llegaron otros muchos y muy grandes, Ángel Nieto era otra cosa. Durante años también llegó la familia, estuvo su hijo, Gelete, y también su sobrino Fonsi, que fue un buen piloto pero no un campeón. No encima de la moto al menos, porque ahora, gracias también a Jorge Martín, ya puede decir que fue el mejor, aunque sea como director de equipo.

"Ya no tengo voz. Solo me sale la palabra acojonante, lo que se ha conseguido, lo que hemos sufrido, hemos pasado por todo tipo de momentos. Tuvo un accidente en Portimao que lo quería dejar, se levantó, siguió apretando, el equipo le ha apoyado siempre, ha sido un trabajo de cuatro años de mucha gente, de mucho tiempo sin dormir", explicaba Fonsi en los micrófonos de DAZN poco después de acabar la carrera, cuando en el box ya olía a champán, pero la celebración no había hecho más que especial.

El campeonato de Martín es meritorio por muchos motivos diferentes, el campeón siempre tiene esa vitola, pero quizá en este caso un poco más porque Martinator no era el favorito de su fábrica, con todo lo que eso supone.

"Hemos pasado por estados de ánimo difíciles con las decisiones de Ducati, ha sido un poco la guerra de David contra Goliat, poder ganar de esta manera, un equipo pequeño, más humilde, más familiar, a un monstruo como Ducati con mucho más presupuesto es alucinante", comentaba el expiloto tras la victoria de su pupilo. Efectivamente, Prima Pramark Racing corría con la montura italiana, pero no era el equipo oficial, así que aunque sus medios técnicos eran parecidos, la moto era parecida, lo cierto es que sus recursos eran menores y eso solo dispara el mérito.

Nieto, de todos modos, también tenía cosas buenas que decir de Ducati, al fin y al cabo es la moto más potente del campeonato con bastante diferencia y haber podido pilotarla parece una condición irrenunciable para haber levantado el título.

"Darles las gracias también porque aun sabiendo que nos íbamos a Yamaha y Jorge a Aprilia hemos recibido el mismo apoyo, y es de señores agradecerlo porque ha sido así", remataba Fonsi. Es una mezcla rara la de este campeonato, ha sido un título gracias a Ducati pero también un poco en contra de Ducati.

Las victorias también son como una película, un momento en el que las imágenes se suceden en la cabeza y aparecen los buenos y los malos momentos, no solo del campeonato, que por supuesto, sino casi de una vida entera. "Me he acordado mucho de mi tío Ángel, de mis lesiones, de los momentos en los que me he caído. Hacer una videollamada con mis hijos que estaban llorando. Pues bueno, esto merece la pena", comentaba Fonsi, en una somera enumeración.

"Hay muchos estados de ánimo, pasan muchas cosas, son muchos viajes, caídas, momentos difíciles y la clave ha sido el ímpetu de Jorge, cómo ha tirado del carro. Somos un equipo muy familiar, ojalá hubiese tenido yo un equipo así cuando corría, creo que tendría algún título que otro", zanjaba Nieto.

Es importante esto, porque aunque en el deporte a veces se sobrevalora un poco el buen ambiente, es difícil pensar que en este caso el castillo hubiese resistido sin una excelente relación de todos. Con el tema de Ducati de fondo, y el equipo y el piloto pensando también en las próximas etapas de sus vidas, cada uno de ellos en un lugar distinto, solo la conciencia de un objetivo común ha llevado a que todo pudiese resistir.

Y en esto hay, por supuesto, mucho de relación personal. Así lo resume Fonsi: "Es que yo con Jorge he cogido... es como un hermano pequeño, mucho cariño, mucha amistad, es especial. Cuando corres es diferente por la adrenalina, pero el sabor de boca es muy parecido". Esa es la historia de Fonsi Nieto, ahora él también campeón.