Éxtasis en casa de Jorge Martín entre cerveza, paella y derrapes: "Hoy San Sebastián de los Reyes era Montmeló"

San Sebastián de los Reyes.- "Mejor que gane hoy que sino mañana habrá infartos...". Toda la espera del sábado valió la pena y estalló el domingo... pero sin ningún infarto de por medio. Eso sí, con muchos nervios y tensión en la plaza de la Constitución de San Sebastián de los Reyes, donde Relevo vivió el título de campeón del mundo de Jorge Martín.

El silencio en forma de absoluta concentración de las más de mil personas, según datos del Ayuntamiento, reinó durante gran parte de la carrera. Los habitantes del municipio natal del campeón de MotoGP no querían sustos ni sobresaltos en pista. Dejaron atrás las horas que llevaban animando a su ídolo para poner los cinco sentidos en la pantalla gigante que instaló el Consistorio. Ya habían tenido bastante con la 'no-celebración' del día anterior.

La plaza también había estado llena durante la carrera al sprint del sábado pues Martín podía haberse proclamado campeón en esa cita. El escenario, la pantalla, los cientos de asientos repartidos y la música del DJ terminaron siendo un ensayo para el gran día. "Llevo aquí desde las diez de la mañana", exclamó un aficionado el sábado tras sustraerle el micrófono al speaker 24 horas antes de la celebración.

El piloto fue a asegurar en la sprint para tener en bandeja el campeonato el domingo y regalar a los habitantes de San Sebastián de los Reyes un día que nunca olvidarán. Igual que el sábado, reinó el ambiente motero y los derrapes y acelerones de algunos seguidores silenciaron la retransmisión de DAZN que copaba el pantallón. La previa duró varias horas, desde primera de la mañana hasta el mediodía, cuando se apagó el semáforo en Montmeló.

¿Cómo ocupar tantas horas y matar los nervios? Más de uno empezó con la cerveza desde primera hora de la mañana. El bar La Plaza hizo su agosto satisfaciendo a sedientos y acompañándoles con un generoso bocadillo. Otros llegaban con un plato de plástico de paella de otros lares, también con bebercio en mano. Entre todo, ondeaban banderas teñidas de naranja de 'Martinator' por cortesía de la peña de aficionados del nuevo campeón.

El DJ se encargó de poner reggaetón todo lo alto que pudo en los ratitos en que le dejaban, hasta que los encargados de sonido dieron protagonismo a Pablo Juanarena, narrador en DAZN. La espera se hizo eterna cuando en realidad todos, en el fondo, sabían lo 'fácil' que lo tenía su piloto: le bastaba con no arriesgar para ser noveno aunque su rival Pecco Bagnaia ganara la prueba como terminó haciendo.

"Hoy San Sebastián de los Reyes es Montmeló", exclamaban algunos mientras animaban a Martín minutos antes de cruzar la meta. Quedaban pocas vueltas y todos rezaban porque no hubiera caída, que era lo único que podía privar al madrileño del título que estaba agarrando con una mano. Vitoreaban los adelantamientos de Aleix Espargaró, unas posiciones más atrás, para llevarse algo a la boca en la tranquila carrera de Martín.

Tras la tensión de la carrera, éxtasis total. Las más de mil personas presentes celebraron con gritos y banderas el campeonato de su ídolo. "Jorge, Jorge", fue el cántico más repetido mientras se dejaban las gargantas. Abrazos, besos y mucho ruido. Mucho color morado y naranja. Los valientes moteros cogieron protagonismo invadiendo la plaza y realizando acelerones y derrapes con sus motos.

Ahora ya no era un simulacro sino la dulce realidad: Jorge Martín se acababa de proclamar campeón. Llenaron de humo una atmósfera de celebración donde empezó a sonar el 'We are the Champions'. Esperaron el sábado para desatar la locura el domingo. Así sabe mejor. MotoGP tiene nuevo campeón del mundo y en San Sebastián de los Reyes no pudo haber más orgullo por su Jorge Martín.