Marc Márquez: "Tengo las mejores armas para luchar por un título más"

Marc Márquez cumplió con un compromiso que ya es tradición a través de uno de sus patrocinadores más emblemáticos, uno que le acompañará el año que viene en su nueva aventura como piloto oficial Ducati, en la temporada en la que todo el mundo espera que vuelva a pelear por el título, y en el que muchos dan un paso más y confían en que sume su novena corona, la séptima en MotoGP, aunque nadie va a escucharle decir esto. Porque Márquez ha ido creciendo en estos años en todos los terrenos, también en el de enfrentarse a los medios y en saber torear las preguntas que pretenden llevarle a respuestas contundentes. "¿Has visto cómo he sabido responder como un político?", le decía entre risas a Relevo tras escapar vivo de una de las cuestiones del momento.

"¿El Hormiguero o La Revuelta?". La primera pregunta directa tras la introducción amable por parte del organizador del evento. "Cuando te llaman programas de ese calibre es buena señal. Es lógico que se rifen al campeón y que todos lo quieran tener en sus programas. Yo he ido muchas veces a El Hormiguero y tengo buenos amigos allí, pero también me gusta mucho La Revuelta. ¿A cuál iría esta noche? En el sofá de mi casa se está bien. No es el momento de ir a un programa. Es el momento de dar protagonismo al campeón. Hay muchas veces que el piloto no puede encargarse de esas cosas, tiene que tener un equipo que le gestione estos temas. Cuando pasan estas cosas, no es responsabilidad del piloto". Cuestión esquivada, con capote a Jorge Martín.

Aunque el tema del día era el mismo, y cómo va a afrontar el curso que viene con una moto ganadora, la moto ganadora, en lo que se presume como un duelo entre él y Pecco Bagnaia. "Las que tenía para este año me las he contestado y de forma positiva", decía a Relevo sobre las preguntas que se hizo a principio de año y las respuestas que puedan haber quedado en el aire. "La gran pregunta era si era competitivo o no, y lo soy. El año que viene tendré el gran reto de tener la moto más competitiva de la parrilla y a ver de lo que soy capaz de hacer. Estoy con la moto campeona, tengo las mejores armas para luchar por un título más. Pero primero hay una pretemporada por delante y el objetivo es llegar a la primera carrera de la mejor manera". Perfil bajo, una vez más.

"Fue uno de los cambios del primer test, volví un poco a lo que era un test cuando era piloto oficial de Honda", señalaba sobre lo que vivió en su primera experiencia en el garaje rojo. "Probar muchas cosas, en un test que lo fue tanto para el equipo técnico que para ti como piloto. Por eso he dicho tantas veces que con Gresini encontré el equipo perfecto y la situación perfecta para reencontrarme a mí. En un equipo de fábrica esto cambia, en cada salida la moto es diferente, tienes un planning muy estructurado por horas, por vueltas y con lo que necesita el equipo. Eso es lo que me encontré el martes, que también lo echaba de menos. Me siento preparado para dar los comentarios precisos a la fábrica. Es una gran suerte que muchos de esos comentarios coincidan con los de mi compañero", apuntaba sobre volver a ser piloto de fábrica con todas las letras.

"Mi reto es hacer una pretemporada completa, en la que me pueda prepararme bien físicamente en los test de Malasia y Tailandia y, lógicamente, intentar luchar por el título. Estoy en el mejor equipo y con la mejor moto, en un box en el que mi compañero ha luchado por el título y ha perdido por diez sólo diez puntos con Jorge. Tengo las mejores herramientas posibles y está en mis manos lucharlo, pero está el factor humano y estamos en MotoGP, donde están los mejores del mundo, y los otros también son muy buenos". Balones fuera para una realidad que dicta que, en estos momentos, la lucha sólo tendría que ser contra Bagnaia, porque se antoja muy complicado que las demás fábricas sean capaces de recortar este invierno la distancia (mucha) con la dominadora Ducati.

"Leo que voy a arrasar con la Ducati oficial, pero estamos en MotoGP y mi compañero de equipo ha ganado 11 de 20, lo que es una barbaridad. Es difícil. La tendencia es ver que he ganado mucho, pero en el deporte se vive del presente y salen jóvenes, así que no va a ser solo un Pecco y yo, yo y Pecco. Está Acosta, hay que ver a Martin con la Aprilia, a Maverick". Mensaje precavido para escapar del runrun que hay a su alrededor. Márquez ha aterrizado en Ducati por decisión de su gurú, Gigi Dall'Igna ("Para mí es el mejor líder", anteponía sobre la faceta de ingeniero), y es consciente de que, diga lo que diga, con el nivel de perfil que imponga, está ante su gran oportunidad, construida por no haber bajado los brazos nunca, ni cuando parecía que con todo lo ganado no hacía falta jugársela más.

"El inconformismo que me ha caracterizado en toda mi carrera deportiva, el siempre querer más", destacaba para terminar como la cualidad que le hace seguir empujando. "Eso a veces te hace cometer errores que se podrían haber evitado, pero el querer más y el inconformismo también me ha hecho ganar muchos mundiales. Lógicamente estoy en un momento en el que siento que no tengo que demostrar nada, ni a mí mismo ni a nadie, porque a mí ya me lo he demostrado. Estoy aquí por pasión al motociclismo, sin más, y trataremos de disfrutar, que es lo que más me gusta". Y esto es un añadido de cosecha propia, disfrutar, y volver a ser campeón del mundo de MotoGP, el objetivo que tiene entre ceja y ceja.