'Goliat' Honda se pone en las manos de 'David' Kalex
El gigante japonés ha decidido explorar una nueva vía técnica a través de la pequeña ingeniería alemana que domina Moto2.
Autódromo Internacional del Algarve (Portugal)-. Honda, el gran gigante del motociclismo y la marca que más títulos ha ganado, está viviendo una crisis de la que intenta salir. Una situación que ya provocó cambios internos al finalizar la pasada temporada, después de que su estrella Marc Márquez regresase tras su operación (todavía convaleciente, pero como Aquiles en la Ilíada tratando de dar ánimos a los aqueos en su pelea contra los troyanos) para apretar las clavijas a los ingenieros japoneses. A su antiguo director técnico, Takeo Yokoyama, que había celebrado los títulos del astro español, le sustituyeron por Ken Kawauchi, el responsable de la Suzuki campeona del mundo, que se había quedado fuera del paddock de MotoGP tras la espantada de la fábrica nipona.
Kawauchi se ha dedicado a marear a Márquez haciéndole hacer mil pruebas durante el invierno. "Entiendo que es normal, pero ya el último día de entrenamientos les pedí que ya está, que quería trabajar con mi equipo en mi moto para encontrar mis sensaciones y mi puesta a punto", explicaba el 93 ya en el Autódromo Internacional del Algarve (Portugal), en el arranque del Mundial de Motociclismo 2023. Unas pruebas que deberían servir para entender qué funciona y qué no de la RC213V, aunque este plan está más pensado para el medio-largo plazo que para el corto. Así que, de momento, el piloto español va a tener que apañarse con lo que tiene para pelear por el objetivo con el que confiesa arrancar el curso, por lo menos hasta que la realidad le diga lo contrario: el título.
"Cuando lleguemos a fines de semana donde tú no puedes entrenar antes, no puedes hacer un test previo, no llegas tan al límite de la moto, ahí es donde veré realmente dónde estoy. Cuando lleguemos a Argentina, a Austin, y sobre todo a Jerez y a Le Mans. Ahí es donde se verá dónde estamos y si realmente hay opciones o toca continuar trabajando para lograrlo en un futuro", ha asegurado Marquez. Las segunda, tercera, cuarta y quinta citas del calendario, con las dos americanas como escenarios muy propicios para su estilo de pilotaje. Y según informaba el sitio especializado Motorsport.com, será antes del viaje a Estados Unidos cuando Honda pruebe su nueva idea, en una sorprendente vinculación con una pequeña ingeniería alemana que triunfa en Moto2: Kalex. Como si Goliat se aliase con David.
Kalex llegó al Mundial con la irrupción de Moto2 (2010), con muchos otros pequeños constructores que querían probar fortuna en la nueva categoría: Suter, FTR, Moriwaki, Motobi, RSV, SpeedUp, Bimota, Promoharris, BQR… Y Pons Kalex, porque solo el equipo de Sito Pons se atrevió a apostar por los germanos, que cuentan con un pequeño espacio en un polígono industrial cerca de Augsburgo y que tuvieron que aceptar la alianza con el team manager español. El nombre Kalex surge de la unión de los de sus dos creadores, Alex Baumgärtel y Klaus Hirsekorn, que iban presentándose en 2009 a los equipos con su dossier bajo el brazo. Pons decidió visitar su sede junto a su director técnico, el mítico Santi Mulero, y este último se quedó impresionado con el nivel de esta pequeña ingeniería. Catorce temporadas después de su debut, Kalex domina Moto2, donde sólo han resistido dos SpeedUp y dos Forward.
Y ahora su nombre está en boca de todos después de la noticia adelantada desde una web especializada suiza, Speedweek, en la que desvelaba que estaban trabajando en un chasis para Honda. De hecho, según ha podido saber Relevo, Yokoyama, el exjefe técnico del Repsol Honda, estuvo el año pasado analizando con detalle el chasis de Moto2 (Honda cuenta con un equipo en la categoría, con Ai Ogura y Somkiat Chantra como pilotos), y viendo la finura de la obra decidió apostar por esta vía (ha habido otra reunión este mismo jueves en Portimao). ¿Y qué puede llevar a la todopoderosa Honda a tomar una decisión de este calado?
La explicación va vinculada a la velocidad de reacción. Y a la vía europea. Porque si de una cosa se han dado cuenta las fábricas japonesas es que con el ritmo de desarrollo técnico que han impuesto marcas como Ducati o Aprilia (y aunque aún no se perciben del todo los frutos, KTM) necesitan algo diferente. Yamaha ya lo ha hecho, con una apuesta italiana en el desarrollo de su aerodinámica. Y Suzuki tenía en mente una idea parecida. Con este movimiento, Honda, si la unión con Kalex le funciona, podrá implementar más rápidamente sus innovaciones. Porque en este área el ritmo de producción de los alemanes, evitando el ida y vuelta de ideas y fabricación con Japón, es mucho más rápido (ya tuvieron una pista el año pasado cuando en el test de Misano Márquez probó un basculante de este mismo fabricante). "Que Honda siga trayendo piezas", incluía este jueves el campeón español en su lista de necesidades para volver a ser competitivo. Y parece que Honda está dejando de lado incluso su orgullo para complacerle.