Las declaraciones de Valentino Rossi esconden un mensaje: "Es la única manera que tiene de ayudar a Bagnaia"

Valentino Rossi decidió abrir nuevamente la caja de Pandora hace apenas unos días en el podcast de su amigo Andrea Migno y no era una sorpresa que el primer día del Gran Premio de la Emilia Romaña sería el lugar escogido para seguir rizando el rizo, como si de la propia temporada de 2015 -cuando estalló todo el conflicto-, se tratase. El italiano ha vuelto a convertirse en el foco mediático tras sus declaraciones acusando fuertemente al catalán de un hecho que, a pesar de quedar lejos, ha vuelto a llenar titulares y como era de esperar, las reacciones y los análisis no han parado de sucederse.

La primera y más esperada la del otro involucrado: Marc Márquez. En su llegada al trazado italiano, donde hace menos de dos semanas consiguió su segunda victoria de la temporada, el catalán atajó cualquier polémica de la manera más sencilla posible. "Lógicamente, lo he escuchado y, aparte, vi el vídeo. Bien, pero, ahora mismo, tengo cosas mucho más importantes en mi cabeza para estar atento, o prestarle atención a esas palabras", reconocía el catalán a los micrófonos de DAZN.

En ese sentido, el ilerdense ya tiene callo. Él mismo ya vivió en sus propias carnes hace nueve años la parte más interna de una polémica que sigue traspasando fronteras y que a día de hoy sigue provocando reacciones entre los aficionados que acuden a los circuitos -en el pasado Gran Premio, Márquez fue abucheado en el podio-. Desde entonces han pasado mil cosas, sin embargo, lo que no ha cambiado es su sed por seguir aumentando su leyenda en el motociclismo. De hecho, el octacampeón llega a la decimocuarta cita de la temporada después de sumar dos victorias seguidas y con poco más de 50 puntos de diferencia frente al primer clasificado.

Valentino Rossi, por su parte, siempre se ha caracterizado por desestabilizar a sus rivales tanto dentro como fuera de la pista con las conocidas guerras psicológicas que a lo largo de la historia han formado parte del juego. Y en ese aspecto y teniendo en cuenta el momento que atraviesa el catalán cualquier pequeña desestabilización puede ser decisiva. O no. Porque si alguien conoce perfectamente de qué se trata la otra parte deportiva es Marc Márquez, el otro gran involucrado. "Marc también es muy bueno en esto y no se va a dejar influenciar", analizaba Pol Espargaró en su llegada al circuito.

"Valentino sabe la importancia del momento en el que se encuentra Pecco Bagnaia y pocas cosas puede hacer para ayudar a Pecco aparte de entrenar en el rancho como ya hacen. Y como hemos visto a lo largo de la carrera deportiva de Rossi, esas guerras psicológicas que él siempre ha manejado tan bien, como las que mantuvo con Sete (Gibernau) o Max Biaggi. Él siempre se ha manejado muy bien y ahora está intentando sacar la presión de encima a Bagnaia, desviar la atención y poner esa presión o malestar encima de Marc", añadía el piloto probador de KTM.

Actualmente Bagnaia -la gran apuesta de la academia del piloto de Tavullia-, se encuentra en la lucha por su tercer título consecutivo. Y a pesar de que el principal rival del italiano para el título es Jorge Martín, los últimos resultados de Marc Márquez han provocado que más de una apuesta se atreva a meter al piloto de Cervera entre los contendientes para el título. Porque a pesar de que actualmente es casi imposible, mientras las matemáticas sigan dando esa posibilidad, todo puede pasar.

"Yo tengo la faena ahora en pista, soy un piloto en activo, así que no me interesan ni me afectan esas guerras. Ya he pasado por todo, así que sé, perfectamente, dónde tiene que estar mi cabeza y que nadie, ya no pasó en el pasado y no pasará en el presente, el que nadie me despiste", concluía el propio Márquez volviendo a cerrar una caja de Pandora que nunca terminará de olvidarse.