Assen sufre a un intratable Bagnaia y da un justo premio a Aleix Espargaró

Circuito de Assen (Países Bajos)-. Los datos, datos son. Si uno llega a casa, busca en el teléfono móvil cómo ha quedado la carrera de MotoGP de este domingo en el Circuito de Assen y ve que los cinco primeros han terminado en 1'934 segundos, con el segundo y el quinto distanciados por apenas 7 décimas, pensaría: "¡Uau!, esto ha tenido que ser la leche!". Aunque, en realidad, fue una prueba más de tensión que de emoción.

De tensión y, una vez más, cargada de incidentes, con seis caídas (sin polémicas, con el único susto del accidente en el que se fueron al suelo los dos franceses de la categoría, Fabio Quartararo y Johann Zarco), dos pilotos retirados y uno que no pudo comparecer por lesión, Marc Márquez, aunque poco se podía esperar de la estrella española viendo su estado físico, y cómo anda su moto, aunque este era un domingo para puntuar. De hecho, lo hicieron los 14 que cruzaron la meta.

Dicho todo esto, Pecco Bagnaia fue un sólido líder, no de esos de grandes ventajas, pero sí lo suficiente para no ver peligrar su victoria desde mitad de la prueba. Por detrás, Marco Bezzecchi no cumplía con su amenaza de pleno en Assen en un día en el que le tocó desembarazarse del correoso Brad Binder, que perdió otra vez el podio por salirse de los límites de la pista en demasiadas ocasiones. Esta vez ante la presión de dos españoles: Aleix Espargaró, que regresó a un podio nueve meses después (se quedó con ese tercero por la sanción al sudafricano); y Jorge Martín, que brilló menos que en los dos Grandes Premios anteriores.

Ante más de cien mil espectadores (de nuevo MotoGP brilló con su atractivo como espectáculo en vivo) el campeón acabó de un plumazo con la superioridad en los Países Bajos de su amigo Marco Bezzecchi y consiguió frenar el empuje de Jorge Martín. Bagnaia había sumado 73 puntos en los últimos tres grandes premios, frente a los 96 del español, y tras esta prueba ha llegado a los 107, sólo cuatro menos que su rival, lo que le consolida en su rol de máximo favorito. Hizo una carrera sólida y seria, se quitó de encima a Brad Binder, y no dio opción a Bezzecchi. Puede irse tranquilo de vacaciones.

El año pasado nos hiciste vibrar en este mismo circuito, en el que diste toda una exhibición, en una remontada histórica que te llevó de estar fuera de los puntos en la quinta vuelta cuando pagaste un error de Fabio Quartararo, a terminar cuarto, con un adelantamiento doble espectacular en la última chicane de la última vuelta a dos huesos duros de roer como Brad Binder y Jack Miller. Así que Assen te debía algo, y te lo ha dado este domingo, un buen tercer puesto, más teniendo que correr con huesos rotos en tu pie, costillas dañadas, y tras haber competido con un alerón roto después de que te tocases con Luca Marini en la primera vuelta.

Es la baza española para pelear este año en MotoGP, de eso no hay ninguna duda, aunque de Assen saliese sin pisar el podio. Y todo por su mal entrenamiento oficial, porque esa caída en el primer intento de la Q2 le terminó dejando en el puesto 10 de la parrilla, y de esos polvos, estos lodos: sexto y quinto. En cualquier caso, el domingo demostró su velocidad. En la vuelta 8 era quinto a 4.5 segundos de Bagnaia; y cruzó la meta en ese mismo puesto, aunque a 1.9 segundos. Más de dos segundos y medio de recorte, aunque al final llegó sin muchas opciones de pelearle el podio a Binder y Espargaró, por las buenas frenadas del segundo, y también porque en el último giro se dio cuenta de que, como el sudafricano, había tocado la zona verde, y de haber adelantado le habrían tirado para atrás, por lo que no tenía sentido que asumiese el riesgo.

La pifió en Alemania cuando iba tercero (se fue al suelo). La pifió el sábado en el sprint al pisar fuera de los límites de la pista en la última vuelta y perdió la tercera plaza (fue quinto). Y la volvió a pifiar el domingo haciendo exactamente lo mismo que el día anterior, en el mismo sitio (no a la misma hora): curva 8, última vuelta, zona verde, y otra vez sin premio para uno de los talentos de la parrilla de la clase reina que, poco a poco, ve cómo los de delante se le escapan en la clasificación general.

El viernes salieron a pista en este Gran Premio de los Países Bajos veintitrés pilotos. La línea de meta del domingo la cruzaron catorce. Veintitrés sin los lesionados Alex Rins, Joan Mir y Pol Espargaró (la visita sorpresa emotiva del fin de semana), y con el invitado Luca Savadori (Aprilia) y los sustitutos Jonas Folger y Stefan Bradl, los dos pilotos probadores, más Iker Lecuona, con plaza en SBK. Se cayeron Jack Miller, Johann Zarco y Fabio Quartararo a la vez, Maverick Viñales, Enea Bastianini y Fabio Di Giannantonio, y se retiraron Miguel Oliveira y Lecuona; y, claro, no salió a pista Marc Márquez. Es decir, sólo 14 sumaron puntos, entre ellos tres sin plaza fija (Savadori, Bradl, Folger): una estadística sorprendente.