El quién es quién en Moto2 2023: el año del 'tiburón' Acosta

Moto2 es una categoría que ayuda a madurar. Del desbarajuste o de la impredecibilidad que supone Moto3, los pilotos pasan a competir con unas motos más exigentes, que les fuerzan más a buscar marcar las diferencias durante los entrenamientos. Pero también obliga a lograr una buena posición en las parrillas de salida, en el que es el paso previo a MotoGP, una cilindrada en la que los jefes de equipo siempre tienen puesto un ojo en las perlas que allí conviven en la búsqueda de la nueva estrella joven.

Y este año la clase intermedia reúne a un buen puñado de pilotos jóvenes que ya brillaron el año pasado, con algunos nombres que han ido entrando en las quinielas de MotoGP. En Moto2 reina Kalex, dominadora absoluta en el número de motos (sólo cuatro de las 30 no lo son, dos SpeedUp y dos Forward, ex MV Agusta). 30 pilotos de 11 nacionalidades, con mayoría española: serán 12 nuestros representantes, con cuatro italianos, tres británicos, dos estadounidenses, dos japoneses, dos neerlandeses, un alemán, un belga, un checo, un sudafricano y un tailandés. De ellos siete ya saben lo que es ganar una carrera. ¿Y en qué nombres tenemos que fijarnos en este 2023 en Moto2?

Los favoritos. No es fácil dar ese calificativo, aunque hay dos nombres que suenan con más fuerza sobre los demás. Uno es el de Ai Ogura, subcampeón el pasado curso, y la gran joya de Honda, que pensó en subirle ya para 2023 a MotoGP en el sitio de Takaaki Nakagami. Algo que el mismo Ogura descartó. Decisión de un piloto que demostró un altísimo nivel tanto en su año de debut como en la última temporada. Su hándicap viene del lado físico, porque el japonés se lesionó entrenando durante este invierno y ha sido baja en los entrenamientos de pretemporada y no se sabe cuándo estará en plena forma.

Y por encima de todos, Pedro Acosta. El murciano, brillante campeón de Moto3 en 2021 en su año de debut en el Mundial, aprendió en su estreno en la categoría a base de fallos y golpes, aunque dejando su sello. De hecho, ganó la última carrera del año pasado y ha sido el dominador de lo poco que ha dejado ver la pretemporada. Él también tiene en sus manos el salto a la clase reina, sobre el papel con un contrato ya firmado con KTM.

Los tapados. Uno de los pocos que no lleva Kalex, Alonso López (SpeedUp). Irrumpió a mitad de 2022 desde el sofá de su casa sustituyendo a Romano Fenati (por bajo rendimiento del italiano) y fue demoledor, con una exhibición increíble en la carrera de Australia. También tienen que estar en la pelea por ganar Arón Canet, de la mano de Sito Pons, y con la rémora de no haber sido aún capaz de ganar una carrera. Y los italianos Celestino Vietti, que parecía lanzado a por el título en el arranque de la última campaña y que luego se desinfló de manera inexplicable, y Tony Arbolino.

Para cerrar este grupo otro español, Albert Arenas, campeón de Moto3 en 2020 y que ahora compite como compañero de Acosta en el equipo ganador de los dos últimos mundiales, Ajo Motorsport de KTM. Por cierto, y en modo MotoGP, tanto López como Arbolino son otros dos que ya han estado en listas como potenciales pilotos de la clase reina.

Y un ojo puesto en… Hay otros pilotos que podrían apuntarse a las peleas por los podios y las victorias. Uno, Darryn Binder, por el crédito que le da haber competido en MotoGP en 2022, aunque el interrogante estará en cómo se adaptará a Moto2. Lo mismo se podría decir de Izan Guevara, un piloto que tiene enamorado a su jefe, Jorge Martínez Aspar, y que llega como campeón de Moto3. Aunque, por lo visto en la pretemporada, al mallorquín le está costando más de lo esperado tomarle el pulso a su nueva moto; pero por la calidad demostrada, podría aparecer en cualquier momento.

Y un español más, Fermín Aldeguer, compañero de López, que sorprendió mucho en el inicio del último curso, aunque bajó su rendimiento en la segunda parte del año. Estos tres más un habitual de la pelea por el podio, el británico Jake Dixon (también compite para Aspar), y el tailandés Somkiat Chantra (compañero de Ogura) que ya ha dejado destellos, aunque es otro de esos pilotos dados a sufrir altibajos y a cometer errores en carrera. Un surtido amplio de pilotos en una categoría con muchas posibilidades de éxito para los españoles.