Jon Rahm saca la magia y ya lidera el Open de España

Jon Rahm sacó su varita mágica este sábado en el Club de Campo Villa de Madrid para firmar una vuelta sin errores que le permite asaltar el liderato del Acciona Open de España a falta de tan solo una jornada. Junto a él, por tercer día consecutivo -también compartirán partido el domingo- se lució Min Woo Lee, segundo clasificado y el que parece que será el único que pueda evitar el tercer trofeo del jugador vasco en este torneo.

En el tercer día de competición, Rahm volvió a exhibir su gran pegada desde el tee, cogiendo calles con facilidad y llegando a green con opciones de birdie, aunque en los primeros nueve hoyos del recorrido apenas pudo celebrar dos. Le desesperó algo no conseguir embocar varios golpes que iban bien tirados. "Ha sido un buen día de golf, organizado. Una pena que en los nueve primeros hoyos no hayan entrado los buenos putts que he tirado", reconoció al terminar su vuelta.

La situación mejoró en los nueve siguientes, donde logró cuatro birdies, incluido uno en el hoyo 18, el más espectacular del campo y que este año ha adelantado la posición de salida para que los jugadores puedan llegar de un golpe al green. "Sabíamos que iban a mover el tee del 18. Me imagino que es obra de los organizadores para conseguir más espectáculo en el último hoyo. A mí no debería cambiarme la forma de jugar, pero la distancia es muy buena para poder llegar al green", apuntó el de Barrika.

Un Rahm que volvió a estar acompañado por miles de personas durante las casi cinco horas que duró su vuelta al campo. Los aplausos que le brindó el público en el 18, también le emocionaron. "Es increíble la ovación de la gente, sobre todo si pasa un domingo en el que sabes que has ganado, porque lo puedes disfrutar y es muy bonito", concluyó. Y al acabar de hablar con los medios, como ya acostumbra cada vez que viene a España, sesión de autógrafos con los más pequeños.

El que no estaba tan contento al finalizar su vuelta era Álvaro Quirós, y eso que firmó un notable -5 este sábado. "Me he acostumbrado, aunque no quiero, a no ir cómodo en el campo. Parece que en cada golpe me va la vida y esa es la realidad. Es imposible disfrutar cuando parece que cada golpe es el fin del mundo", comentó después de entregar su tarjeta.

Además, pese a su gran día y su buen torneo -marcha 13º- dejó dos afirmaciones preocupantes. "Llevo años estancado y no creo que tenga ninguna opción de ganar mañana", zanjó.