ESQUÍ

El insólito regreso de la leyenda Lindsey Vonn: descenso a 116 km/h y a solo un segundo de la victoria tras seis años retirada

La estadounidense, considerada por muchos como la mejor esquiadora de todos los tiempos, finaliza cuarta en el supergigante de St. Anton.

Lindsey Vonn, en el supergigante de St. Antonla. /REUTERS
Lindsey Vonn, en el supergigante de St. Antonla. REUTERS
Daniel Arribas

Daniel Arribas

En febrero de 2019, mucho antes de que aparecieran en nuestras vidas el coronavirus y otras tantas realidades que condicionaron el mundo tal y como lo conocemos, Lindsey Vonn anunció su retirada de la élite del esquí alpino tras colgarse una medalla de bronce en la categoría de descenso del Campeonato del Mundo de Are (Suecia).

La estadounidense, oro olímpico en Vancouver 2010, cuatro veces campeona del mundo y considerada por muchos como la mejor esquiadora de todos los tiempos —aunque en 2023 fuera superada en cifra de victorias (82) por la también norteamericana Mikaela Shiffrin—, fue galardonada poco después de anunciar su adiós con el premio Princesa de Asturias de los Deportes.

Ahora, cinco años y once meses después de su retirada, y con una prótesis parcial en su rodilla derecha, Vonn ha vuelto a competir en la élite a sus 40 años. Decimocuarta el pasado 21 de diciembre en el Supergigante de St. Moritz, la de Minnesota ha sido cuarta este domingo en el Supergigante de St. Anton.

Vonn ha completado, en cualquier caso, un descenso magnífico. Alcanzando por momentos los 116 kilómetros por hora, la esquiadora estadounidense se ha quedado a tan solo un segundo y 24 centésimas del triunfo, conquistado por la estadounidense Lauren Macuga (1:17.51), por delante de la austriaca Stephanie Venier (+0.68) y la italiana Federica Brignone (+0.92).

Nada más cruzar la línea de meta, Vonn ha alzado la vista para chequear su tiempo. Ha sido ahí cuando la tetracampeona del mundo se ha percatado de que había finalizado entre las mejores, rozando incluso la victoria, lo que le ha llevado a abrir la boca, negar con la cabeza y en un gesto de indudable sorpresa, llevarse las manos a la cabeza y alzar los brazos como si hubiera vencido la prueba.

"Me ha sorprendido, sí, pero es que... ¡Ha sido muy divertido!", ha asegurado Vonn en los micrófonos de Eurosport tras la conclusión. "He ejecutado algunas secciones difíciles muy bien, pero he de decir que cometido un par de errores. Sé que puedo ser más rápida, pero poniéndolo todo en conjunto, creo que esto es un gran comienzo".