España se proclama campeona de la Liga Mundial femenina
La Selección vence en una ajustada final a Hungría tras una gran actuación de Martina Terré bajo palos en la tanda de penaltis (18-19).

Faltaba poner el broche de oro a un año para enmarcar y así se hizo. La Selección española se ha coronado como la mejor de la Liga Mundial tras vencer a Hungría en una ajustada final decidida en los penaltis (18-19). Por primera vez en su historia, España se proclama campeona de esta competición en la que tan solo había conseguido subir al podio una vez.
Cinco de cinco. O lo que es lo mismo, pleno de victorias. En definitiva, una Superfinal de la Liga Mundial absolutamente redonda. La Selección española se metió en la lucha por el oro tras superar a Nueva Zelanda (21-4), a Hungría (15-11), a Australia (12-5) y a Países Bajos (14-10). Y tampoco falló en la final.

Aunque se buscaba la lucha por lo más alto del podio ante EEUU -rival que hace seis años arrebató el oro a España y que, también, se hizo con la medalla dorada en los Juegos Olímpicos ante las españolas-, fue finalmente Hungría con quien volvió a medirse la Selección. Eso sí, esta vez tras un partido muy distinto al vivido en la fase de grupos.
Un inicio con remontada
Las jugadoras de Miki Oca comenzaron por detrás en el marcador. Pocze hizo el 1-0, al que Anni Espar y Bea respondieron con dos goles. La primera, tan solo un minuto y quince segundos después. La segunda, a los 45 segundos de que se pusiese el empate en el marcador (1-2). Hungría no iba a bajar los brazos, y Pocze, inspirada desde el inicio, volvió a igualar el resultado, mientras que su compañera Keszthelyi volvía a adelantar a Hungría. Eso sí, solo un minuto y medio después, tras una gran parada de Martina Terré, Paula Leiton hacía de las suyas y ponía el 3-3 con el que finalizaron los primeros ocho minutos.
Cuando todavía no se había cumplido medio minuto del segundo periodo, Irene González daba otra vez la vuelta al marcador (3-4), aunque la ventaja duró poco. Parkes y otra vez Pocze, en cuestión de apenas un minuto, instauraron el 5-4. No fue hasta los últimos compases antes del descanso cuando las de Oca lograron de nuevo la remontada (Bea hizo el 5-5 e Irene González, VAR de por medio, el 5-6). Pero, otra vez, la alegría fue efímera. Seis segundos después del tanto de la jugadora del CN Sabadell, Keszthelyi equilibraba la balanza. 6-6 y descanso.
Una ajustada segunda parte
Con la grada del Real Club Náutico de Santa Cruz de Tenerife totalmente volcada en aras de alentar a las españolas, se reanudó el encuentro y el gol no tardó en llegar. Otra vez Irene González ponía la ventaja (6-7). Pero, esta vez, algunos desaciertos en defensa fueron aprovechados por Szilagyi que, con un doblete, adelantaba, de nuevo, a las de Attila Biró (8-7). El partido seguía con un tú a tú hasta el punto de que el tercer periodo acabó con empate a 9, después de los tantos de Cristina Nogué, la húngara Keszthelyi y de Paula Leiton.
Quedaban ocho minutos por delante y todo por decidir cuando comenzó la polémica. La húngara Fargo acabó expulsada y, aunque en un principio, también se había decretado esta pena para Paula Leiton, finalmente fue readmitida tras el challenge de Oca. Eso sí, el partido estuvo detenido durante más de diez minutos.
Tras ello, Forca vio puerta y no fallón (9-10), rompiéndose así la sequía de goles de este periodo. Con Nona Pérez ya eliminada, de nuevo Judith Forca hizo diana (9-10), pero aún quedaban más de dos minutos. Y eso, en waterpolo, es mucho tiempo. Leimeter hizo el décimo para las húngaras. España aguantó con el 10-11, pero llegó el momento de la última posesión... Y fue para Hungría. A un segundo del final, tras una gran intervención de la portera, Marina Terré, Gurisatti hundió el balón en la red. 11- y final.

Terré se convierte en heroína
Llegaba el turno de los penaltis y ahí, precisamente, Terré asumía una gran responsabilidad bajo palos. Y no defraudó. Tres paradas de la guardameta a Szilagyi, Mate y Gurisatti, el último con intervención del VAR, dieron la victoria a España (18-19).
Oro para el combinado nacional y broche dorado a un año épico para el waterpolo. Campeonas de Europa y de la Liga Mundial.