Carolina Marín provocó una 'revolución' en China con su explosión en el bádminton: "Empezamos a entrenar contra hombres"
He Bingjiao desvela en Relevo cómo cambiaron los entrenamientos, el modelo y los análisis para lograr ganar a la estrella española.
He Bingjiao es una de las grandes referentes del bádminton chino en la última década y decir esto no es decir cualquier cosa. En el gigante asiático, según los estudios de su gobierno, el deporte de la raqueta y el volante lo practican en torno a 250 millones de personas. Por ello, es normal que con una base tan imponente lleven años dominando con puño de hierro lo más alto de este deporte a nivel mundial junto a otras potencias vecinas como Corea del Sur, India o Japón, en los que el número de jugadores amateurs o profesionales se cuenta por millones. Pero en medio de este dominio abrumador, apareció hace una década un milagro español llamado Carolina Marín.
La onubense se ha convertido en un reto inédito para los países que han llenado el palmarés olímpico y mundial durante todos los tiempos de este deporte. Su juego, intenso, potente y rápido, sorprendió a quienes creían tener la verdad absoluta de la mejor forma de ganar en el bádminton. Lo que no sabíamos oficialmente hasta ahora, al borde de su retirada tras sufrir tres lesiones graves en las rodillas, era todo lo que provocó la irrupción de la 'loba' Marín, a base de una voraz expresión dentro y fuera de la pista, en una todopoderosa china.
En conversación en exclusiva con Relevo, aprovechando su viaje a España para reencontrarse con Carolina Marín y recibir el premio Relevo X Change, la propia He Bingjiao ha querido desvelar qué ocurrió en aquellos primeros escarceos de una andaluza con cara de niña al irrumpir al otro lado del mundo y romper los esquemas.
Viendo el carácter ganador de Carolina siempre me he preguntado cómo es enfrentarse a ella.
Competir contra Carolina Marín es una experiencia increíble, porque su estilo de juego es muy rápido y es muy intenso, y vives sensaciones que no es habitual sentir en una pista. Por ejemplo, ha habido veces que yo ya estaba con punto de partido, solo me faltaba uno más para ganar e iba con cuatro o cinco puntos de ventaja... ¿cómo he podido perder? Vuelvo a casa y me pregunto: ¿qué he hecho mal? ¿cómo me ha podido pasar esto? Es que no me lo creo. Carolina no abandona nunca, está a tope hasta el último segundo. A la vez, jugar con ella siempre es un disfrute porque notas su espíritu competitivo. Pero, a la vez, que eso su carácter se me ha vuelto en contra. He aprendido mucho de ella.
"Mi entrenador siempre me ha dicho que debería gritar como Carolina Marín"
Jugadora china de bádminton y subcampeona olímpica en París 2024Carolina ha recibido muchas críticas durante su carrera por los gritos durante el juego. Tú que has estado al otro lado de la red, ¿qué opinas?
Yo no pienso que gritar sea algo malo. Es más, aprecio bastante que lo haga porque es una forma de mostrar su espíritu competitivo. De hecho, mi entrenador siempre me ha dicho que debería hacer como Carolina Marín y expresar más sus emociones en la pista para que el oponente vea mi status. Siempre he pensado que debería haberlo hecho más. Además, gritar por ganar un punto es bueno porque significa que lo has ganado. Yo aprecio esa intensidad, sus emociones y sus ganas de ganar, porque en nuestra cultura china somos más reservados y nos lo guardamos más adentro. Verla a ella debe ser un aprendizaje.
¿Cómo se recibió en China y en el resto de países asiáticos la llegada de que una española fuera capaz de llegar a lo más alto y pudiera ganar a las grandes potencias del bádminton?
Su llegada a la élite fue tan explosiva como su forma de jugar. Dentro del equipo chino nos impresionó mucho tanto su rapidez como su potencia e intensidad, nos alucinó su estilo de juego en general. Cuando apareció, empezó a ganar y cómo ganaba, nos dimos cuenta que iba a ser una rival demasiado potente y, a nivel interno, los técnicos se pusieron a investigar y hacer estudios para descubrir cuál sería la forma de poder vencerla.
¿Cómo fue ese análisis?
Analizamos su juego. Yo, como jugadora zurda y que también tengo un estilo de juego ofensivo, empecé a ver muchos vídeos de sus partidos de manera secreta para analizar cómo son tus jugadas y aprendí un montón sobre Carolina.
"Invitamos a jugadores masculinos a nuestros entrenamientos para replicar la velocidad y la potencia de Carolina"
¿Qué cambió en el equipo chino para poder enfrentarse a Carolina?
Empezamos a cambiar la preparación de dos formas. Por un lado, invitamos a jugadores masculinos zurdos a que viniera a entrenar contra nosotras y poder enfrentarnos a ellos. El objetivo era lograr replicar la velocidad y la potencia que tiene Carolina cuando te enfrentas a ellas. Esas cualidades no se suele encontrar en mujeres, tampoco en China. Entonces, tuvimos que buscar a hombres. Y por otra parte, empezamos a trabajar más nuestra faceta defensiva. 'Caro' tiene un ataque tan intenso y tan persistente que teníamos que lograr mejorar para poder resistir a sus ataques.
Cuando veis a una española, de un país con solo unos pocos federados, que es capaz de ganar a las asiáticas... ¿qué opinas?
Cuando apareció Carolina Marín, recordamos verla por primera vez en la fase de grupos de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, quedó eliminada y ya está. Y cuatro años después, era la campeona. En China nos quedamos muy, muy sorprendidos de que en España pudiera haber salido una jugadora como Carolina, que en cuatro años tuvo un avance tan impresionante como para llegar a ser la mejor del mundo.
Muchas jugadoras han expresado que enfrentarse a Carolina y su feroz ataque da miedo. ¿Es cierto?
Nunca sentimos un atisbo de miedo (risas). Desde su aparición, nuestro principal sentimiento y objetivo era querer y poder ganarla. Entonces decidimos que tenerle miedo no nos iba a llevar a ningún lado y teníamos que centrarnos en buscar las formas de ganarle.
Carolina Marín es la primera jugadora que ha vuelto a la élite tras una lesión grave de rodilla. Es más, lo ha logrado dos veces. ¿Le disteis ya por imposible y de repente, volvía a estar en la élite?
A mí no me sorprendió que lograra volver. Tiene un equipo increible de fisioterapeutas y preparadores físicos. Y además, sé de primera mano su mentalidad de competir. Tenía claro que si alguien tenía que volver, iba a ser ella. Además, mi preparador físico también es español y entiende cuál fue ese proceso de recuperación por parte de todo el equipo.
En una entrevista en Relevo, Carolina señalaba que en China, cuando una jugadora sufre una lesión grave, hay otras cinco jugadoras del mismo nivel esperando su turno.
En China, cuando empiezas a jugar al bádminton ya estás rodeada de cientos de niños que juegan como tú y te sientes ilusionada por estar en la lucha con millones de niños a la vez que quieren cumplir tu sueño. Incluso, después cuando entras en el equipo nacional también son decenas de jugadoras. Sabes que tienes que entrenar mucho para entrar en la lucha para representar al país. Sí, si hay una lesión, siempre hay una persona que toma al relevo jugando al mismo nivel.
En una entrevista en Relevo, Carolina Marín desveló que quiere crear una academia de bádminton en España para hacer continuar su método.
Me gustaría mucho venir a España para estar con ella en su academia, me encantaría. Lo único que tanto Carolina como yo somos zurdas, así que todos los jugadores de la academia tendrían que ser zurdos.
[Durante el reencuentro con Carolina Marín unas horas después de esta entrevista, He Bingjiao recordó esta cuestión y se ofreció a la onubense para poder venir a España a entrenar a los jóvenes de su academia.]
En España, estamos preocupados porque tras la retirada de Carolina Marín ya no tendremos una jugadora de su nivel. Os libraréis de España...
Yo cuando empecé a jugar al bádminton admiraba a mis ídolos, que era los que en ese momento jugaban en el equipo nacional. Por esto, Carolina no debe preocuparse de no tener un relevo inmediato porque los niños que han estado viéndola jugar se van a inspirar en ella y saldrá una jugadora que siga su legado.
Pero no es lo mismo que salga una jugadora de élite en China que en España... por el entorno.
Bueno, tengo entendido que Carolina Marín empezó en el bádminton porque había un club en el barrio donde vivía. Yo, de la misma manera, el centro donde se juega al bádminton en la ciudad donde nací estaba al lado de la oficina de trabajo de mis padres. Entonces, me llevaban allí a jugar un rato de manera amateur hasta que mis padres salían y me recogían para volver a casa. Nuestras historias son parecidas.
"Uno de los momentos más emotivos fue cuando cuatro aficionados españoles me aprobaron el gesto desde la grada"
Viendo tu admiración y cariño al hablar de Carolina se entiende a la perfección tu gesto en el podio olímpico. ¿Te enteraste todo lo que se montó en España por tu gesto? Te ganaste el cariño de todo el país...
No pensé que llegara a este nivel y nunca pensé en la repercusión que podía tener el gesto. Yo solo quería llevar a Carolina Marín al podio conmigo porque merecía estar ahí. Quería mostrarle mis respetos y todo mi apoyo tras lo que había ocurrido en la semifinal. No llevé el pin de España como algo premeditado, ni siquiera me imaginaba que iba a poder recibir un premio por hacerlo como un símbolo de valores.
Durante ese día, seguramente podemos decir que llegaste a ser tan conocida y reconocida en España como en China. O más.
Estoy muy sorprendida por el amor y el cariño que recibí desde España. Me di cuenta que las personas en España son tan amigables que me encanta. Uno de los momentos más emotivos que tuve en la ceremonia de medallas fue al bajar del podio y ver a cuatro aficionados españoles, vestidos de un color rojo muy bonito, que empezaron a darme el visto bueno con el dedo. Me sentí muy apreciada y honrada, y también muy conmovida por cómo los españoles y también personas de otros países habían acogido esa acción. Me sentí muy querida.
¿Cómo recuerdas la lesión de Carolina?
Todo ese día estuve muy nerviosa, también durante la competición. Noté que Carolina estaba jugando a un nivel muy alto, el más alto de todos nuestros enfrentamientos. Yo recuerdo que Caro me lanzó un ataque y yo iba devolverle un golpe defensivo en diagonal. Cuando me di la vuelta y no la vi, me di cuenta que algo no iba bien. Me puse nerviosa y empecé a llamar a los médicos. Cuando ocurrió la lesión, me sentí muy triste porque, como deportista, podía sentir su frustración. Ahí ya daba igual el resultado y ella demostró ser la verdadera campeona cuando decidió no salir en silla de ruedas y hacerlo a su propio pie. Para hacer eso, también se necesita tener una gran fuerza y la admiro.
Estuve en la zona mixta después de la lesión y te vi como rompiste a llorar. Carolina no lo pudo ver y creo que está bien que conozca a través de esta entrevista lo mal que lo pasaste esos minutos.
Yo no quería llorar, pero después de estar respondiendo preguntas y estar recordando ese momento. Me sentí muy atacada emocionalmente porque, como deportista, uno de tus mayores miedos es tener que retirarte por una lesión grave. En ese momento, pude empatizar mucho para Carolina porque es lo que menos quieres en tu rival. Es que, además de su entrenador, yo fui la persona que estaba más cerca de lo que ocurrió. Lloré porque sentía que tenía lo ocurrido muy dentro de mí.
Carolina ha anunciado que le gustaría volver a jugar para retirarse en un Europeo que podría jugarse en su ciudad natal, en Huelva en 2026. Pero tú, después de la plata olímpica, ya has decidido poner fin a tu carrera deportiva y anunciar tu retirada. ¿Qué harás ahora?
Ahora me he retirado de mi carrera competitiva, pero no me voy a alejar del bádminton. Como Carolina, quiero seguir entrenando a niños, ayudando en sus aspiraciones y motivaciones. Entrenaré a los jóvenes para que continúen saliendo talentos de este deporte en China.