Carolina Marín recibe todas las respuestas sobre el gesto que le cambió la vida: "Dudaba si sacar el pin porque había ganado la plata y ella merecía el oro"

"¿En qué momento lo piensas? ¿Por qué lo hizo? ¿Dónde consigue el pin, porque yo en ningún momento le di ese pin de España? ¿Ya lo tenía antes del día de la final o lo quiso conseguir para subirlo al podio? Y, sobre todo, ¿qué impacto tuvo con su cultura?" La cabeza de Carolina Marín rebosa de preguntas sin respuesta sobre el gesto que le cambió la vida y que, como ella misma confiesa, "nunca nadie había hecho algo así por mí". Se refiere al momento en el que He Bingjiao, su rival en la fatídica semifinal olímpica de 6 de agosto en la que tuvo que salir destrozada por dentro y por fuera, decide homenajearla en el podio mostrando un pin del equipo olímpico español. Ahora, gracias al viaje de la jugadora china a España para recibir uno de los premios Relevo X Change por su actitud llena de valores, ha sido la propia protagonista quien ha podido darle todas las respuestas.

Lo que poca gente o nadie sabe hasta ahora es que el momento estuvo a punto de no suceder por el resultado de la final, donde He cayó ante la favorita, la coreana An. "En ese momento, al subir al podio, dudaba mucho de si llevar el pin o no. Y no es porque no quisiera llevar el pin, es porque decía 'he ganado la medalla de plata y ella se merece este gesto junto a una medalla de oro'. Pero, al final, decidí llevarlo igual porque como tú ya tenías un oro, no te importaría que ahora fuera con una plata". Carolina, emocionada y que no tarda en darle un abrazo tras escuchar esta frase, le explica que lo más especial fue que, en un momento como ese, en su primera medalla olímpica, estuviera pensando en ella: "No se trata de que fuera con una medalla de plata o con un oro. Se trata de estar pensando en tu rival en ese momento. Yo quería e iba a París a ganar el oro y no me lo pude traer, pero el gesto que me hiciste ha sido mi mejor medalla".

Pero, ¿de dónde salió el pin? Mucha gente pudo llegar a pensar que fue un movimiento preparado, con un pin facilitado por la delegación china o incluso la española. Pero nada más lejos de la realidad. "Tenía el pin desde los días previos de la semifinal y durante la gran parte del torneo; me acompañaba siempre porque me gustaba pensar que podía competir junto a Carolina Marín de España", confiesa He, quien ha decidido retirarse del equipo chino después de la cita olímpica.

He es una joven callada, humilde e, incluso, puede decirse que vergonzosa. Por ello, seguramente, el pin que mostró en la ceremonia de premiación fuera de otro deportista español y no de la propia Carolina, como le hubiera gustado. "En la Villa Olímpica todo el mundo quería el pin de China, pero no lo pude cambiar contigo. Pensaba: ¿Acaso no le gusta mi pin? Yo solo quería cambiármelo contigo", cuenta ahora delante de una onubense que no para de sonreír en una conversación que necesitaba para cerrar este episodio.

El reencuentro entre la española y la china en las instalaciones de Relevo es una sucesión de momentos emocionantes para 'Caro', que escucha con atención la admiración que una de las grandes rivales de su carrera le tiene. "Cuando te lesionaste y tras la final, cuando tenía que subir al podio, estuve pensando en cómo poder enviarte un mensaje. Sabiendo que no tenías el móvil encendido, me pareció la mejor forma de hacerte llegar este mensaje. De querer compartir personalmente la alegría y el honor de estar en el podio, y de estar contigo compitiendo juntas. Ese honor de hacerlo juntas".

"Sabía que iba a recibir las fotos y toda la exposición mediática, por lo que sabía que así tú ibas a poder ver lo que te quería expresar. Como no pude comunicarme contigo, ni en los vestuarios ni de forma personal, podía hacerlo de esta forma", desvela He completando el puzzle de un recuerdo inolvidable para Carolina.

Aunque ahora parecen ya inseparables con el paso de los minutos de este reencuentro, He y Carolina habían tenido una relación de respeto, habitual dentro del circuito entre las mejores del mundo. Ahora, la propia asiática cuenta a la que fuera su rival que tantas veces la amargó los partidos al otro lado de la red que, al menos para ella, todo empezó mucho antes. "Yo me siento superconectada emocionalmente contigo, y no desde ahora. Recuerdo cuando te gané en el Open de Francia de 2022, tu familia se me acercó para darme abrazos y felicitarme. Me sentí también tan querida por tu familia, cuando yo iba con el miedo de que no me quisieran por haber ganado a su hija, que desde entonces siento más que empatía contigo"

Uno de los bulos que recorrió las redes en los días posteriores a este gesto que dio la vuelta al mundo fue que el régimen chino había castigado a He por hacerlo. Es por eso que Carolina se pregunta cómo había afectado en su cultura y en su país que tomara esta decisión personal. Evidentemente, no fue real y el gobierno chino ve en He una fuente de valores para sus jugadores más jóvenes, a los que ahora se dedicará a entrenar, y por ello toda la cúpula de la Embajada del país la acompañó durante la gala.