Dos soldados que combaten a Putin también luchan por el oro para Ucrania: "Nunca tengáis miedo de nadie, especialmente de terroristas y asesinos"
En el equipo ucraniano de voleibol sentado hay dos integrantes del ejército: un paramédico amputado tras la batalla y un oficial cuyos soldados combaten en "el infierno".
París.- Ucrania continúa asediada por el ejército ruso desde que el 24 de febrero de 2022 Vladimir Putin ordenara su invasión. Han pasado dos años y medio, la guerra sigue, no hubo tregua olímpica ni tampoco la hay paralímpica.
Los deportistas ucranianos saben que su participación en París 2024 es imprescindible para que el mundo no olvide a su país. Y, de una delegación ucraniana de 141 paralímpicos, hay un equipo que refleja la guerra como ningún otro: el de voleibol sentado.
Por un lado, una víctima directa de la guerra: Yevheni Korinets. Fisioterapeuta, se unió al ejército como paramédico cuando comenzó la invasión, y tras una batalla en la ciudad de Bakhmut, le amputaron la pierna izquierda el año pasado. El vóley, deporte que había practicado anteriormente, fue la salvación de este chico de 25 años.
"Los primeros dos o tres meses fueron particularmente duros (...). El deporte trae adrenalina similar a la acción militar, emociones similares. Para mí es rehabilitación, tanto física como moral", dijo en declaraciones a Reuters.
En su mismo equipo se encuentra Dmytro Melnyk, veterano en los Juegos (compitió en los de Río) y también en la guerra. Este oficial de 45 años es jefe de pelotón de la infantería ucraniana. A su cargo tiene 35 hombres que se encuentran en las trincheras de Chasiv Yar, combatiendo las fuerzas rusas. No sabe nada desde que partió a los Juegos. "Están en el infierno", explica a Euronews.
Su discapacidad proviene de una lesión en su pierna izquierda a los 18 años, que provocó que fuera más corta. Pese a ello, consiguió alistarse en el ejército. Si le preguntaban por su cojera, explicaba a "las botas le apretaban demasiado".
Para estos dos militares su familia está en el frente, pero también cuentan con su selección. "Mi segunda familia", apunta Melnyk. "Si uno de nosotros se cae, se puede arruinar todo el partido. Somos un equipo, una familia. Es lo mismo que en la primera línea", asegura Korinets.
Y esa familia ucraniana no entiende por qué ciudadanos rusos y bielorrusos pueden participar en los Juegos, aunque sea bajo la bandera neutra. "Hay atletas del país que nos atacaron y realmente no lo aceptamos. No nos gusta", comenta el paramédico, quien asegura que aun así reciben el calor del resto de selecciones y de los aficionados de París 2024. "Alemania también se solidariza con nosotros, al igual que los franceses. Incluso vi a algunos atletas de otro país mirando esos atletas neutrales con desdén."
Con su presencia en París 2024 el oficial quiere enviar un mensaje al mundo: "Nunca tengáis miedo de nadie, especialmente de los terroristas y asesinos. Cuanto más miedo tengamos, más gente morirá. Y por desgracia no sólo en Ucrania. Todo el mundo debería ser consciente de ello".
En París, Ucrania perdió sus dos primeros partidos de grupo contra Irán y Alemania. El martes se enfrentarán a Brasil en el último partido de la fase de grupos. Hasta este lunes, ha acumulado 27 medallas (tres de oro) y es tercera en el medallero. En Tokio 2020 fue sexta, pero aquello fue antes de sufrir la guerra de Putin.