JUEGOS PARALÍMPICOS

Mykhailo Serbin, el campeón ciego que no abandonó Ucrania en la guerra de Putin: "Estar en casa siempre es lo mejor"

El nadador, con discapacidad visual, ha preparado los Juegos de París 2024 entre las bombas y la incertidumbre que se vive en Járkov por la invasión rusa.

El nadador ucraniano Mykhailo Serbin. /GETTY
El nadador ucraniano Mykhailo Serbin. GETTY
Andrea Robles

Andrea Robles

París.- La delegación ucraniana fue sexta en el medallero de los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020 (celebrados en 2021 por la pandemia) y cinco años antes, en Río 2016, fue tercera con 117 medallas, 41 de ellas de oro. Ahora se enfrenta a unos Juegos cuyos deportistas han tenido que preparar involucrados en un conflicto bélico que nunca pidieron. 

Algunos huyeron de los bombardeos, pero no por eso dejaron de sentir angustia por los que se quedaban. Además, tuvieron que adaptarse a una nueva vida, lejos de casa y de los seres queridos, en lugares con distintas tradiciones o idiomas. Otros, decidieron quedarse, con todo lo que ello conlleva. Es el caso del nadador con discapacidad visual Mykhailo Serbin. 

Serbin es el vigente campeón paralímpico y mundial de 100 metros espalda S11. Con 18 años tomó la decisión más importante de su vida, la que quizá condicione su rendimiento en París 2024: quedase en Járkov. Resistir. Entrenar.

"Mi entrenador y yo éramos de la misma opinión: 'Nos quedamos, trabajamos, ganamos, pase lo que pase'", declaraba a la agencia AFP. Apoyado por su familia, continuó entrenando en una ciudad que ha conocido la peor cara del presidente ruso Vladimir Putin. "No me arrepiento de haberme quedado en Ucrania, estar en casa siempre es lo mejor", aseguraba.

Sin embargo, el día a día ha cambiado mucho desde aquel 24 de febrero. Serbin y su entrenador conviven con una guerra que ya dura demasiado, lo cual ha significado en muchas ocasiones tener que ponerse a salvo.

"Un día llegamos a un entrenamiento y la ciudad había sido atacada, tuvimos que bajar al refugio y esperar al final del bombardeo", contaba.

Entre las bombas y la incertidumbre, Serbin ha preparado su defensa del título de campeón paralímpico que logró en Tokio. Allí también logró la plata en los 200m libres. Pronto veremos si su decisión de quedarse en Jarkov ha sido una buena osadía deportiva. Pase lo que pase, para los ucranianos es un héroe y su presencia en París 2024 recuerda que los Juegos Paralímpicos no son capaces de detener las peores guerras.