La emoción de Alcaraz arrastra a Corretja en plena entrevista en París: "Es absurdo. No venía a cuento..."

Con las emociones todavía a flor de piel, después de perder en un doble 7-6 la final de los Juegos Olímpicos de París ante un emocionado y colosal Novak Djokovic, a Carlos Alcaraz le tocó atender a Álex Corretja a pie de pista. Aun con la camiseta roja, sudado por el esfuerzo y el calor, el tenista murciano recibió el cariño del público cuando el extenista y ahora comentarista empezó a entrevistarle. Habló Corretja del partido colosal, del nivel de Alcaraz pese a la derrota, del orgullo que todos han sentido por verlo a ese nivel en una final preciosa en la Philippe Chatrier. Pero la entrevista no pudo continuar.

"Bueno, muchas gracias, he tenido...", y se quedó cortado. Sollozó Alcaraz y se separó de Corretja, que entendió el momento y le dio su espacio. "Tómate tu tiempo, Carlitos". La grada aplaudió todavía más y Alcaraz se retiró unos pasos y le dio la espalda a la cámara. Se tapó la cara con la camiseta y aguantó 50 segundos. Se secó las lágrimas y regresó. Atrás habían quedado ocho días de competición al límite en los que quedó apeado de las medallas junto a Rafa Nadal en dobles y, en el cuadro individual, alcanzó la final, pero se topó contra un gigante Djokovic.

"Es una situación lógica, los nervios en pista, la tensión y la emoción que la deja florecer. Fue una exhibición tenística de juego", dijo Corretja, totalmente empático con Alcaraz, que regresó y habló. El extenista catalán hizo solo una pregunta. Y le dejó irse: "Recupérate, disfruta, eres un orgullo, lo que consigues no tiene nombre. Hay que dejarlo recuperar. Después de lo que ha dado, sería absurdo seguir. Cuando pierde se va a la sala de prensa y él ha venido aquí. No veía a cuento exigirle más".

No es nada nuevo en el comportamiento de Corretja y en su empatía, lógica como extenista profesional. Además, el barcelonés también ha sido medallista olímpico y conoce de primera mano las emociones que se arrastran durante los días olímpicos, en la Villa, por el ambiente y por la expectación que genera a todo un país. "Siento que he fallado a todos los españoles", dijo Alcaraz

Las palabras del tenista murciano se vieron refrendadas por las de su entrenador, Juan Carlos Ferrero, que habló para evaluar el torneo olímpico de su pupilo, pero sobre todo para hacer ver al Alcaraz más humano a través de sus lágrimas: "El deporte es así, hay derrotas dolorosas, pero esas son las que hacen crecer más a los jugadores. Novak ha jugado increíble, cometiendo pocos errores, elevando su nivel en momentos importantes. Creo que Carlos Alcaraz no ha sabido gestionar tan bien las emociones como en las finales de Grand Slam, pero de todo se aprende", comentó en los micrófonos de Cope.

"Al acabar el partido le dije a Alcaraz que muchas gracias por dejarme ganar este oro, que seguro que era mi última oportunidad. Él es muy joven, es una persona linda y buena, tenemos una relación positiva y tendrá muchas más oportunidades", añadió Djokovic en Teledeporte.