Lorenzo Brown pide otra oportunidad tras el borrón de los Juegos: "Quiero volver"
El base no ha cuajado su mejor torneo con la Selección pero descarta que este sea su último torneo con España.
Su nombre fue uno de los más repetidos -junto al de Ricky Rubio- el pasado verano en el Mundial de Indonesia. España caía eliminada en la segunda fase tras caer ante Canadá (sí, otra vez el combinado norteamericano dirigido por Jordi Fernández) y los análisis hablaban de la falta de un generador de juego que nutriera de balones a jugadores como Willy Hernangómez para aprovechar el pick&roll.
Un año después, y tras cerrar su fichaje con el Panathinaikos (no con el Real Madrid como se rumoreaba para su sorpresa) Lorenzo Brown volvía a ponerse el uniforme de la Selección. Lo hacía en Valencia para sacar el billete a los Juegos de París. La misión no era sencilla. Brown tenía que volver a coger los antiguos automatismos con sus compañeros. Pero no tardó en hacerlo, siendo uno de los más destacados del torneo.
Manejando el tempo de los partidos, anotando cuando se necesitaba (como ante Finlandia y Bahamas) y dirigiendo, Brown daba un suelo a la Selección que no había. Sin embargo, los días de parón entre el Preolímpico y los Juegos no parecen haberle sentado bien y el base es uno de los grandes señalados tras la eliminación de España ante el equipo norteamericano.
No ha sido el torneo del jugador nacionalizado y así lo reflejan los números que ha tenido en los tres partidos disputados en Lille: 6 puntos de media, 2 rebotes, 7 asistencias (su aspecto más destacable) y 5,3 pérdidas por partido. Sus números de cara al aro rival tampoco han sido buenos: 6 de 14 en tiros de dos y uno de nueve desde el triple para terminar los Juegos con 4,3 de valoración y un -32 en el total del +-, la estadística que refleja el marcador con el jugador en pista. Es decir, con Lorenzo en cancha España ha perdido por 32 puntos.
El base del Panathinaikos parecía dar una nueva dimensión a España, pero ha sufrido ante bases más físicos como a los que se ha enfrentado la Selección. Especialmente visible fue ante Canadá. Jordi Fernández había tomado buena nota de las defensas de Australia y Grecia y ordenó a Lu Dort el marcaje de Brown. 'Bisonte' no le dejó ni respirar. Le defendió a escasos centímetros, sin dejarle ni tiempo ni espacio para pensar. Y ahí el base cortocircuitó, como demostró con cinco pérdidas de balón.
Los números y las sensaciones han dejado a Lorenzo Brown con cuentas pendientes con la camiseta de la Selección. La misma que le encumbró hace dos años en Berlín y con la que ahora ha dejado un borrón. Por eso quiere reválida y no se le pasa por la cabeza dejar el equipo español, como reconoció tras la derrota en el último partido de la fase de grupos de los Juegos.
"De ninguna manera, de ninguna manera, hombre. Quiero volver a los Juegos Olímpicos y darle otra oportunidad", apuntaba el base nacionalizado en declaraciones a BasketNews. Toda una declaración de intenciones de un jugador que no le pierde la cara ni a la crítica, que sabe que vendrá y asume, ni a una nueva oportunidad para volver a ser Lorenzo de Albacete.