Jon Rahm da un nuevo recital y puede conseguir otra lluvia de millones del LIV Golf de Arabia Saudí

Le ha costado trabajo y tiempo, pero Jon Rahm ya está aquí. El último mes del jugador de Barrika ha sido notable pese a que el último día de los JJOO perdió una medalla que ya acariciaba a ocho hoyos del final del recorrido. Porque salvando esa amargura, su juego ha vuelto a ser el habitual en él, donde actúa como un martillo pilón. Ayer se quedó a las puertas de su segundo triunfo en el LIV Golf.

El golfista vasco afrontaba la última ronda del torneo de Greenbier con una ligera ventaja sobre sus perseguidores. Un pequeño atasco a mitad de su vuelta hizo que Koepka le adelantase en la clasificación, pero Rahm reaccionó y forzó un desempate con el estadounidense que finalmente perdió. Sin embargo, el segundo puesto en la cita que acogió el campo de Virginia puede tener un premio mayor.

Rahm ha sido el jugador más regular de la temporada en el circuito saudí. Obviando el abandono que sufrió en Houston por una lesión en su pie, nunca se ha bajado del top 10 en ningún torneo, logrando tres terceros puestos, un segundo y una victoria en Reino Unido. Eso le ha servido para recortar puntos en la general a un Joaquín Niemann que empezó como un tiro pero que ha ido perdiendo fuelle con el paso de las semanas.

Y a falta de la última cita del calendario en Chicago, que llegará a mediados de septiembre en Chicago, el de Barrika ya es el líder y tiene asegurada de manera matemática la segunda plaza a final de temporada. Y esto es relevante, porque el LIV Golf reparte muchos millones a sus jugadores. Y a Rahm le espera dentro de un mes el cheque más jugoso de su carrera deportiva.

Si en la última cita del circuito saudí Rahm consigue la victoria parcial, que también conllevaría el triunfo general, el vasco se embolsaría de una tacada 22 millones de dólares. El LIV entrega cuatro millones al ganador de cada torneo y da 18 más al líder de la clasificación individual a final de año. El segundo, algo que ya tiene asegurado el doble ganador de un Major, percibe 10 millones.

Hasta la fecha, Rahm supera los 14 millones de dólares por su participación en las diferentes pruebas del circuito y es, junto al mencionado jugador chileno, el que más ha engordado su cuenta corriente. Su juego ha alcanzado su mejor nivel en el momento decisivo del año y el de Barrika está a un paso de poder cerrar su 2024 golfístico con alrededor de 36 ´kilos´más en su cuenta corriente.

Tras ello llegará el turno de la final por equipos, cuyo cheque es todavía mayor para los ganadores pero que no repercute en las ganancias individuales, sino que es la estructura de cada conjunto, que actúa a modo de empresa, la que lo gestiona para sus innumerables gastos a lo largo del año e incluso para realizar fichajes en la postemporada. Después, una breve gira por el DP World Tour para intentar mantener su tarjeta y poder ser de la partida en la próxima Ryder Cup. Pero antes, le esperan los millones en Chicago.