PRIMERA RFEF

La Primera Federación se juega su final en una votación sobre el control económico

Los 40 clubes de la categoría deben aprobar el modelo federativo. Aunque, esta vez, no necesitará unanimidad para salir adelante y sí mayoría simple.

La Primera Federación, ante sus horas más decisivas./RFEF
La Primera Federación, ante sus horas más decisivas. RFEF
Jonás Pérez

Jonás Pérez

La Primera Federación ya no está tan cerca de desaparecer. Este martes, la RFEF remitió una carta a los 40 clubes de la categoría, en la que informaba de una nueva votación sobre el modelo de la tercera división del fútbol español. Este escrito, adelantado por Marca y al que también ha tenido acceso Relevo, olvida la necesidad de unanimidad sobre el control económico de la anterior votación y condiciona el futuro a una mayoría simple. Es decir, si más del 50% de los clubes aprueba dicho control económico pretendido por el organismo presidido por Luis Rubiales, todo seguirá tal y como hasta ahora.

Esta decisión llega tras el órdago vertido la pasada semana. Tal y como informó este medio, la Federación, cansada de la continua problemática en torno a la tercera categoría, ya estudiaba nuevos modelos competitivos y la posibilidad de regresar a un formato similar al de la Segunda División B. Los clubes respondieron negativamente a este aviso. Pero desde Las Rozas se ha valorado de nuevo el futuro de la competición y, por ello, han optado por una nueva votación que no fragmente el fútbol no profesional.

Hasta ahora, la primera instancia marcaba que todos los clubes tenían que estar a favor de un modelo económico que ellos consideraban que no estaba especialmente detallado. Ante esta tesitura, 16 se negaron a votar y enviaron una carta a la Federación (junto a otros dos que sí habían ejercido su derecho a voto) pidiendo una mayor explicación. Además, en la comunicación directa sobre la RFEF también mostraban su inconformidad sobre varios aspectos del modelo B como la cesión de los activos publicitarios o la negación a los clubes de formar parte de las negociaciones colectivas.

La mediación de la Federación

El organismo federativo también informa en el documento enviado a los 40 clubes que conforman la Primera Federación que la gran mayoría de clubes votaron la opción B. Es decir, la que tenía que salir por unanimidad y que imponía un control económico. Hubo dos, eso sí, que apostaron por la opción A. Hasta ahora, la B necesitaba esos 40 votos a favor. Pero desde la RFEF, más tras la carta de 18 clubes negándose a participar, han cambiado de parecer y van a solicitar una mayoría simple.

Algunos de los detalles necesarios para la imposición del nuevo modelo de control económico. RELEVO
Algunos de los detalles necesarios para la imposición del nuevo modelo de control económico. RELEVO

Los clubes tienen ahora 48 horas para votar a favor o en contra. La RFEF también les ha convocado a una reunión telemática para resolver todo tipo de duda e imponer un veredicto sobre el nuevo modelo de la categoría. Entonces, ¿ya no muere Primera Federación? Todo apunta a que no, pero la misma Federación recoge en el envío firmado por el Secretario General Andreu Camps esa posibilidad.

"En caso de ser negativo, se reunirán los órganos competentes de acuerdo con los Estatutos de la RFEF para adoptar las decisiones oportunas en cuanto a la viabilidad y estructuración del conjunto de las competiciones oficiales no profesionales de la RFEF", expone. Aunque, eso sí, resuelve un motivo de preocupación de los clubes: "Debiendo respetar siempre y en todo momento los derechos deportivos que deriven de las normas de competición actualmente vigentes". Es decir, si se aprueba el modelo B, tal y como apunta tras los resultados de la primera votación, Primera Federación seguirá adelante. En caso contrario, el regreso a un formato similar al de Segunda B es una realidad.

El control económico

La Federación ha detallado en la carta enviada a los presidentes en qué consiste ese modelo de control económico que ha llegado a poner en jaque a la categoría. Para competir en Primera Federación, los clubes deben haber obtenido una licencia, para la que tendrán que presentar los datos económicos de las dos temporadas anteriores auditadas. Asimismo, se pondrán en marcha mecanismos de control que aseguren el pago de los salarios y garanticen el freno al incremento de deuda, que tendrá una cantidad máxima en función de los ingresos. Por últimos, las entidades deben acreditar la no existencia de déficit presupuestario en las dos campañas anteriores o, al menos, que este sea cubierto por unos avales de los inversores que serán exigidos por el organismo federativo. Y, por supuesto, la idea principal de introducir un modelo de límite salarial, aunque, en esta ocasión, no matiza si se ejecutará el de UEFA que, en resumen, marca un 70% máximo de ingresos en gastos de plantilla.