El Nàstic de Tarragona demanda al árbitro de la final del playoff de ascenso ante el Málaga "al menos por negligencia"

Sigue trayendo cola el Nàstic-Málaga del pasado sábado. El partido de vuelta de la final del playoff de ascenso a Segunda tuvo de todo: una prórroga con muchísima tensión, una retirada a los vestuarios que fue instigada por parte del árbitro y un desenlace dramático con un gol del conjunto andaluz fuera de tiempo, en el minuto 124 de partido, que significó el ascenso para los visitantes y acabó con el sueño de los catalanes.

Este martes, en otro capítulo de un partido que ya parecía parte del pasado, el club grana ha decidido demandar al colegiado del encuentro, Eder Mallo Fernández, al sentirse gravemente perjudicado por su actuación.

Lo ha anunciado a través de un comunicado. "El Gimnàstic de Tarragona informa que acudirá a la justicia ordinaria por el arbitraje del sr. Eder Mallo Fernández", comenzaba la notificación oficial por parte del club de Tarragona. "La entidad ha recabado pruebas suficientes para demandar al colegiado, al menos, por negligencia. Asimismo, no se descarta, en función de las investigaciones en curso, iniciar la vía penal", proseguía el comunicado.

El club también ha anunciado en última instancia que "próximamente se informará con detalle de los pasos realizados por el Gimnàstic de Tarragona para defender los intereses y la honorabilidad de la entidad así como de todos sus accionistas, socios y aficionados".

Cabe señalar que Mallo Fernández redactó una precisa detallada arbitral, de la que no dan crédito en Tarragona, en la que explicaba que tanto él como sus ayudantes llegaron a "temer por nuestra integridad física al ver cómo abrían la puerta y nos increpaban. La seguridad presente nos indica que les es imposible retirar y controlar a esta gente puesto que según nos dicen, 'son varios directivos y propietarios del club'. Nos comunica la fuerza pública que debemos salir escoltados hacia los vehículos y en carretera hasta la llegada al hotel para garantizar nuestra integridad".

El arbitró también detalló los insultos que recibieron: "Cobardes, hijos de puta (con la amenaza de 'dar la cara hijos de puta, que os vais a enterar', hasta en 25 ocasiones") o "Sinvergüenzas", que es de los más leves que escucharon, según una acta arbitral que podría acarrear durísimas sanciones para el Nàstic de Tarragona.