El Paiporta, el equipo de la zona cero: "Ya no nos apetece jugar a fútbol este año, no tenemos ni botas"
El modesto club detalla a Relevo sus días conviviendo con unas instalaciones que han quedado "inservibles".
En su modesto vestuario, tenían imágenes de parecidos razonables de sus jugadores al lado de las fotos de los propios futbolistas. Era una broma cómplice entre ellos. También estaban sus botas y su indumentaria. A unos pocos metros, en el exterior, se encontraba el humilde verde de El Palleter, el campo del Paiporta C. F. "Me da mucha pena ver cómo ha quedado todo". Una semana después de la DANA, sigue inundado y "completamente inservible", cuenta su entrenador, muy afectado, a Relevo. VALENCIA CF VALENCIA CF Valencia Club de Fútbol Valencia cf VALENCIA CF VALENCIA CF Valencia Club de Fútbol Valencia cf
"Este campo es imposible de salvar, ya no vale", explica Alvaro Ortí sobre una de las instalaciones deportivas que más ha sufrido la crueldad del temporal en toda la Comunitat al estar en la zona cero. Ya no les queda nada. Ni objetos materiales ni sueños ni ganas de volver a competir: "Este año ya no nos apetece jugar a fútbol, supongo que más adelante nos volverá a picar el gusanillo pero no veo solución a corto plazo. Por no tener no tenemos ni botas, se quedaron el lunes en el vestuario". Solo viven de sus recuerdos.
Y el día después, el trágico martes de la DANA en Valencia, una parte de sus vidas se fue con ellos. El club de sus amores tiene ahora su campo devastado por el agua, sus vestuarios hasta arriba de barro, los muros y árboles de los alrededores caídos y solo pueden celebrar, entre comillas, que no cuentan con víctimas mortales. "Estamos todos sanos pero la primera imagen fue muy dura, se te cae todo encima, hay varios jugadores que no han ido todavía a verlo porque psicológicamente es muy duro y ya tienen bastante con lo suyo en sus casas".
No obstante, durante los primeros días, hubo momentos de mucha incertidumbre: "Como no había ni cobertura ni luz, no supimos nada de un futbolista que vivía en Alfafar hasta el viernes, no nos queríamos alarmar pero iban pasando los días...". Por suerte, sano y salvo. Varios jugadores del club, por razones obvias, no han querido realizar entrevistas. Más que comprensible.
"Están muy jodidos, la gente aquí ha perdido amigos, coches, casas, hay compañeros sin luz en casa que te piden carne para comer", revela el entrenador. Ortí saca fuerzas de donde no hay: "Lo llevo como puedo pero es muy duro ver a todos tan jodidos". El único rayo de esperanza es la multitud de voluntarios que se han desplazado a la zona cero: "Esto está lleno de gente echando una mano, es una labor encomiable que nos hará más fuertes".
Los gestos solidarios no han cesado en plena catástrofe. "Un equipo de Castellón nos ofreció jugar un amistoso para recaudar fondos pero los jugadores no están con la cabeza para jugar, no tenemos ni idea de cuándo vamos a poder volver", expresa el técnico. A los destrozos en sus instalaciones se suma la dificultad de los desplazamientos para competir: "Se nos complica mucho porque hay mucha gente que ha perdido sus coches aunque hay clubes que nos han cedido sus campos para jugar".
"Sabemos que esta semana no competiremos pero hay mucha incertidumbre, la Federación valenciana nos dijo que nos tomáramos el tiempo que necesitáramos, nos han transmitido tranquilidad", relata Ortí. El deporte, en esta situación, queda en un segundo plano: "La prioridad es ayudar a los vecinos, a los amigos... ya llegará el momento de hablar de fútbol". Solo queda estar unidos.