MUNDIAL SUB-17 | COREA DEL NORTE - ESPAÑA

Un jugador desaparecido durante años y las normas que complican el futuro de las joyas de Corea del Norte

El precedente de Han Kwang-Song y las limitaciones del país truncan la proyección de las norcoreanas, rivales de España en la final del Mundial Sub-17.

Jugadoras de Corea del Norte celebran el gol anotado en semifinales ante Estados Unidos para estar en la final del Mundial Sub-17. /FIFA
Jugadoras de Corea del Norte celebran el gol anotado en semifinales ante Estados Unidos para estar en la final del Mundial Sub-17. FIFA
Mayca Jiménez

Mayca Jiménez

Corea del Norte suma y sigue. Tras ganar el Mundial Sub-20, la selección asiática amenaza a España en la pelea por el dominio de este mismo torneo en categoría Sub-17. Un éxito que no es casualidad. Pues el país, hermético, silenciado y con una política militar, cuenta desde hace poco más de una década con un plan estatal que pone su foco en el fútbol femenino. La estrategia tiene como objetivo mejorar la imagen internacional de Corea del Norte, condenada y señalada por diferentes organismos mundiales por no respetar derechos fundamentales a nivel social. Aunque sus grandes resultados deportivos se topan con un muro en el extranjero debido a sus propias normas y a las limitaciones internacionales para impedir su crecimiento como potencia nuclear.

Sus joyas dicen mucho en el campo y poco o nada fuera de él. Cohibidas en sus declaraciones y con restricciones que hacen que sea casi imposible salir de su país para desarrollar su fútbol en el extranjero. Ese "casi" está respaldado por el ejemplo de varios norcoreanos que recibieron permiso para formarse en escuelas de fútbol de otros países, como la academia de fútbol Marcet en Barcelona, por donde también pasaron jugadores como Óliver Torres o Berta Pujadas.

"Todo empezó cuando los norcoreanos hicieron una gira por toda Europa para buscar la mejor escuela para sus jóvenes futbolistas... Al final eligieron nuestra escuela, porque no querían grandes marcas, sino aprender realmente a dominar el fútbol", recordó José Ignacio Marcet, presidente de la fundación, en declaraciones recogidas en la página web de la academia hace unos años.

El éxito frustrado de la primera estrella mundial de Corea del Norte

Era 2013 y, tras viajar a Pyongyang y seleccionar a 18 chicos, la expedición llegó a Barcelona con un nombre destacado: Han Kwang-Song. La perla norcoreana impresionó al mundo con su talento y protagonizó años más tarde una 'desaparición' durante tres años que marcaba un aviso para todos los que, como él, quisieran desempeñar su carrera en otro país.

"Gestionaban muy mal el error. Ellos entendían que lo normal era ganar. Por eso, tuvimos que explicarles que el error es fundamental en el proceso de aprendizaje y es un elemento clave para llegar al éxito", explicó Marcet, que pronto vio en Han Kwang-Song grandes cualidades para triunfar en el fútbol. Tanto él como sus compañeros consiguieron poco después de su etapa formativa en Barcelona ganar el Campeonato Asiático Sub-16. Un escaparate de lujo para Han, que dio el salto en 2017 a Italia -fichó por el Cagliari- y se convirtió en el primer norcoreano en marcar un gol en Europa. Pasó por el Perugia y la Juventus durante su estadía en el país italiano, pero su proyección se vio interrumpida por las sanciones a Corea del Norte tras realizar su sexta prueba nuclear en 2017.

Dichas penalizaciones, impuestas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU), obligaban a repatriar a todos los ciudadanos norcoreanos que trabajaban en sus respectivas jurisdicciones, en medio de sospechas de transferencias de dinero extranjero para apoyar los programas nucleares y de armas de Kim Jong Un.

La aplicación de dicha imposición establecía como fecha límite el 2019 para repatriar a los norcoreanos, justo en ese año llegaría su fichaje por el Al Duhail de Catar. En ese país se registró su último partido, a fecha de 31 de octubre de 2020. Justo en mitad de la pandemia del COVID-19. Debido al cierre de fronteras en su país, no pudo volver a casa y la ONU estableció que debía abandonar el país de oriente medio en 2021.

A partir de ese momento, nadie pudo localizarle durante varios años. Hasta su reaparición como internacional con Corea del Norte el 16 de noviembre de 2023. Entre una y otra fecha, y tal y como se ha sabido después, Han residió en la embajada de Corea del Norte en Italia durante el periodo más hermético de la pandemia. Después, viajó a China y tuvo que esperar hasta que su país natal aceptó su repatriación.

Choe Il Son, 17 años y un doble Mundial

Su ejemplo evidencia las barreras que evitan un mayor éxito internacional de las jóvenes promesas del fútbol norcoreano. Ahora, el país cuenta con varias futbolistas que acaparan las miradas a nivel mundial como Choe Il Son, Balón y Bota de Oro en el Mundial Sub-20. La joven atacante, que acumula dos goles, destaca por su desborde y gran visión de juego.

Además de ella, aparecen otros nombres propios como Choe Rim-jong (cuatro goles, dos asistencias) o las centrocampistas So Ryu-gyong y Ro Un-hyang. Esta última anotó un auténtico golazo de volea en la semifinal de Estados Unidos. Su tanto fue decisivo para estar en la final, a la que miran con ganas. "Espero mostrar un desempeño aún mejor (que en la victoria sobre Estados Unidos) en la final", aseguró So Ryu-gyong, en declaraciones a FIFA.

Tanto ellas como sus compañeras recogen el premio de una apuesta significativa a nivel estatal. Desde las escuelas, donde los niños y niñas cuentan con formación específica en este deporte, hasta los centros de formación, en los que las jugadoras más destacadas son admiradas popularmente y cuenta con un trato distinto. O, lo que es lo mismo, cuenta con "comida suficiente", tal y como señalan varios medios. Unos 'privilegios' en los que sigue sin incluirse la posibilidad de que puedan desarrollar -al menos por el momento- una carrera en el extranjero.

A través de varios testimonios recogidos en reportajes como el llevado a cabo en Bleacher Report hace unos años, las jugadoras son muy "populares". Un mérito social respaldado por la gran afición al fútbol de Kim Jong Un, que ascendió al trono de la dinastía comunista tras la muerte de su padre, Kim Jong-il. El mandamás plasmó esta pasión en sus estrictas normas sociales. Aunque su padre ya había dado los primeros pasos en este sentido.

«No importaba si les gustaba el fútbol o no»

"Las aulas de secundaria se reorganizan de repente en equipos de fútbol para entrenar. Un desertor me dijo: 'No importaba si les gustaba el fútbol o no. A Kim Jong Un le gustaba el fútbol'", apuntaron en Bleacher Report. Todo se reorganizó en torno a la Escuela Internacional de Fútbol de Pyongyang, con el fútbol femenino siendo uno de los deportes más seguidos y admirados por todo el país.

No es para menos. Además de los títulos en categorías inferiores, su novena posición en el ranking FIFA dista de la que ahora mismo ostenta la selección masculina: en el puesto número 110 de la misma clasificación. Un auge que contrasta con la reciente -en 2023- prohibición en el país de que las mujeres puedan pantalones cortos.

A pesar de todo esto y de la gran desigualdad para las mujeres en este país, los resultados de sus políticas destinadas a desarrollar el fútbol femenino pronto llegaron. Corea del Norte se coronó campeón de Asia en 2001, 2003 y 2008. Fue el comienzo de un periplo en el que, pese a sus limitaciones (todas las jugadoras militan en su país), siguen caminando con paso firme en categorías inferiores: llevan tres Mundiales Sub-20 (2006, 2016 y 2024) y dos Sub-17 (2008 y 2016). Este domingo pelearán por su tercer cetro mundial ante España para pelear por lo imposible -nadie ha logrado tres títulos en esta categoría- y reconfirmar su condición de potencia en el fútbol femenino mundial. A pesar de todo...