El intento de guerra fría del Barça en el que Gündogan no quiere entrar
El club no vería con malos ojos una salida del internacional alemán, pero el centrocampista no plantea irse este verano.
El Barcelona lleva semanas analizando la situación de cada futbolista para intentar cuadrar cifras y cerrar una plantilla lo más competitiva posible. Después de ir durante mucho tiempo detrás de Nico Williams, el Barça logró cerrar la incorporación de Dani Olmo. Además, logró normalizar su situación económica en términos de fair play. Pero a pocos días de empezar LaLiga, todavía tiene deberes pendientes a la hora de inscribir.
Uno de los nombres que el club no tiene con la etiqueta de intransferible es Ilkay Gündogan. Desde Can Barça se han resistido a confirmar al 100% que van a contar con el internacional alemán esta nueva temporada, pero saben que es prácticamente imposible que el ex del Manchester City se marche. A pesar de los mensajes que han ido deslizando, Gündogan no tiene ninguna intención de cambiar de ciudad.
El tanteo del club ya tuvo respuesta de Gündogan. Después de la gira, Ilkay aprovechó para desconectar unos días en Turquía. A su llegada, al ser preguntado sobre su futuro, dijo que algún día jugaría en la Superliga. "Pero no este verano", enfatizó. Tiró del mismo hilo su representante. "Es cierto que algunos clubes han mostrado interés en ficharle, pero la postura de Ilkay es clara: se va a quedar en el Barcelona", explicó.
Suplente en la última prueba antes del debut
El papel de Gündogan durante esta pretemporada ha sido algo más secundario de lo que podría haber esperado. Jugó el último cuarto de hora del Clásico de Nueva Jersey y los 45 iniciales, como mediapunta, contra el Milan. En el Gamper, en la última prueba antes del debut en Mestalla, Hansi Flick apostó por el centro del campo más repetido: Marc Bernal, Marc Casadó y Pablo Torre.
El de Santander fue titular contra el Mónaco y Gündogan entró al descanso para jugar nuevamente por detrás del delantero. Flick también lo ha probado en los amistosos como mediocentro. El alemán, que cumplirá 34 años en octubre, tuvo que retirarse a los 20 minutos tras recibir un golpe en el rostro. Tan comprensible es que el Barça quiera darle protagonismo a Pablo Torre para seducir al mercado, como extraño que Flick no lo probara de inicio en la última prueba antes del debut.
Con Xavi fue indiscutible: acabó la temporada como el futbolista con más minutos disputados (4179, según Opta), por delante de Koundé y Lewandowski, que completaron el podio. En clave Flick, Ilkay se ha presentado como una alternativa al doble pivote, donde ha probado a los Marcs y a Christensen, sin gran resultado con el danés. El momento de su carrera le obliga a acortar esfuerzos y como pivote está obligado a tener más recorrido. Además, la dupla que forma con Lewandowski obliga a repensar si el plan defensivo de Flick, con una presión muy alta, es viable con las dos piezas.
Más allá de las derivadas futbolísticas que Hansi tendrá que contemplar, Gündogan no se plantea cambiar de ciudad. Le costó algunas semanas encontrar una casa que se adecuara a sus gustos y pronto, en el Clásico, evidenció que venía de un ecosistema de plena exigencia. El club ha tanteado vía terceros si Gündogan estaría dispuesto a salir, pero interna y externamente ha dejado claro que no. El Barça, con el fin de mercado acercándose, deberá mirar otras vías para rebajar la masa salarial.