Ter Stegen se acuerda de Xavi y Sergi Roberto en el primer día de Flick: "Serán recordados como dos leyendas"

El Barça ha presentado su equipo ante la afición en la previa del ya habitual torneo Joan Gamper. El equipo de Flick se enfrentará ante el Mónaco en el último amistoso de pretemporada y en la antesala hubo tiempo para escuchar al capitán Ter Stegen, a Flick y a los únicos fichajes, hasta el momento, Pau Víctor y Dani Olmo.

El portero tuvo un guiño para Xavi y otro para Sergi Roberto, que anunció ayer que deja el Barça. "Queremos dar las gracias a Xavi y a todo su staff por el esfuerzo y el sacrificio que han hecho. También queremos felicitar a Sergi Roberto por lo que ha conseguido con el club de su vida. Seguro que serán recordados siempre en nuestra casa como dos leyendas", comentó el portero. También tuvo palabras para Flick, a quien dio la bienvenida y afirmó que comienzan las nueva temporada "con mucha ilusión".

Hansi Flick fue muy breve en su discurso, que comenzó en catalán y acabó en inglés. El entrenador afirmó que está "muy contento de estar aquí. Todo el equipo y staff está trabajando duro para conseguir los objetivos. Con su apoyo seremos más fuertes. Visca el Barça".

Dos de los más aclamados por la afición han sido los nuevos fichajes, Pau Víctor y Dani Olmo. "Es un honor formar parte de este club, vestir esta camiseta y decir que soy jugador del Barça. Es un sueño desde pequeñito. Me dejaré todo cada día para poder darles muchas alegrías y estar a la altura de este gran club", comentó el delantero que viene de ser la estrella de la pretemporada.

Olmo demostró toda su alegría por volver a la que fue su casa: "Estoy muy contento de volver a casa, es un sueño hecho realidad. Tengo muchas ganas de llevar esta camiseta y este escudo otra vez. He venido a ganar. Tenemos un gran equipo, una gran afición y un gran club, iremos a por todo esta temporada".

Ter Stegen fue quien más aplausos recibió pero no sólo por su presencia, sino por la mención a Xavi y Sergi Roberto. Ambos fueron ovacionados por los aficionados en Montjüic, que no se pudieron despedir sobre el césped de ninguna de las dos leyendas del club.