MERCADO DE FICHAJES

El Barça empuja a Ansu Fati fuera con Rashford en el punto de mira, pero sigue siendo una patata caliente

El club cambia su idea de verano y busca una salida al 10.

Ansu Fati y Rashford./afp/reuters
Ansu Fati y Rashford. afp/reuters
Hugo Cerezo
Matteo Moretto

Hugo Cerezo y Matteo Moretto

Ansu Fati sigue siendo una patata caliente en Can Barça. El internacional español, que se ha vuelto a quedar fuera de la convocatoria de Flick para el partido contra el Betis, tercera consecutiva tras el Clásico, no tiene sitio en el actual FC Barcelona y el club le está empujando a salir con un doble motivo: para que encuentre los minutos y el rodaje que no va a disfrutar de azulgrana.. y para abrir hueco a Marcus Rashford. Sin embargo, el movimiento de Fati es altamente complicado por el coste salarial del 10, uno de los más elevados de la plantilla, más allá de que hasta ahora el canterano ha priorizado quedarse.

En el caso de Rashford, en Relevo ya informamos de que es una de las posibilidades para que el Barça se refuerce en enero, toda vez que el inglés ha forzado su salida del United para este mismo mercado. Ya ha habido contactos y esta semana puede ser clave para que el asunto avance. La llegada de Marcus apartaría aún más a Ansu, de ahí que el club azulgrana esté empujando para encontrarle equipo de acogida.

Para entender la situación actual de Ansu hay que remontarse al verano, cuando Deco y Flick aprobaron que se quedara tras su desafortunada cesión al Brighton. Se quería un reset completo, olvidando episodios pasados respecto a la gestión de su recuperación. Un reinicio que se torció casi nada más empezar, porque el delantero cayó lesionado en agosto.

Pasada media temporada, Ansu apenas ha participado y a tenor de lo dicho por Flick en la víspera del duelo contra el Betis la explicación está no solo en lo que se ve en el césped, que ha sido poco. "Soy sincero y he hablado con él. Es lo que él quiera. Le dije al llegar que estaba listo para mostrar un gran rendimiento. Se lesionó, pero tras la lesión no nos mostró su cien por cien. Y es una pena, para él y para nosotros. No lo dio todo. Tiene que trabajar como todos y dar lo mejor. Es lo que queremos". Las palabras del alemán dejan entrever que su actitud no es la que esperaba el staff.

Así las cosas, Ansu está entre la espada y la pared. De quedarse, se expone a una temporada en blanco. Hasta ahora ha jugado 186 minutos, con un solo partido de titular (Sevilla en Liga). Ni en Copa contra el Barbastro jugó de inicio. Si sumamos esto a sus números de la temporada pasada (poco más de mil minutos en el Brighton), nos asomamos a una trayectoria francamente preocupante, tratándose de un futbolista de apenas 22 años y que debería jugar cada vez más.

Los obstáculos para la operación tienen que ver con su alto salario, inasumible para ningún club que pudiera acogerle en España, además de que por ahora no ha querido oír hablar de una salida. Aunque eso puede cambiar. La lógica invita a que se produzca una reunión de Ansu con Flick y/o Deco para dejarse claras las posturas. Si el jugador se convence de que es mejor cambiar de aires, se verá si el Barça asume parte de la ficha. Más allá de que el 10 deberá explorar con detalle su hipotético destino, porque estamos en enero, no goza de ritmo de competición y para adaptarse donde vaya debe contar con una titularidad fija. De lo contrario, su ya de por sí devaluada valoración se verá más mermada. Lógicamente también puede encontrar su sitio y volver a ser el jugador determinante que fue. El Girona le acogería encantado. 

Jorge Mendes, agente de Ansu, ya le encontró acomodo en la Premier hace año y medio, pero allí la cosa no fue como se esperaba. Ahora quizás Laporta tenga que pedir a su amigo Jorge que le saque del club para así facilitar ese movimiento por Rashford, un fichaje de postín para un Barça que ahora mismo cuenta en ataque con Lewandowski, Raphinha, Lamine, Ferran, los reinscritos cautelarmente Olmo y Pau Víctor y el citado Ansu.