MERCADO DE FICHAJES

El agente de Juma Bah explota por el trato del Valladolid: "Mienten y difaman"

Patrick Mörk, representante del futbolista, ha explicado cómo se dio la salida al City Football Group y la cesión al Lens.

Juma Bah, nuevo futbolista del Lens./EFE
Juma Bah, nuevo futbolista del Lens. EFE
Álvaro de Grado

Álvaro de Grado

La venta de Juma Bah al City Football Group ha estado envuelta en polémicas. El central jugará cedido en el Lens hasta final de temporada, cuando ya formará parte del City Football Group -que pagó la cláusula de seis millones- y se decidirán sus siguientes pasos. En el Valladolid, las reacciones sobre su marcha no se han hecho esperar. Que si lo intentaron renovar, que si intentaron mejorar su sueldo (cobraba 2.500€)...

Después de todos los comentarios, el último en sumarse ha sido Patrick Mörk, aunque en su caso ha sido para defender al futbolista. Mörk es el agente de Juma Bah y ha atacado a los dirigentes del Valladolid: "Jamás me he visto en una situación tan absurda, irreal y sinsentido como la que estoy viviendo", ha dicho.

"No hay nada éticamente reprochable en abonar el precio establecido en un contrato y aceptado por las partes contratantes. Lo que sí es reprochable, ética e incluso jurídicamente, es que los dirigentes del Real Valladolid mientan y difamen para esconder sus previas decisiones", ha atacado. "Tampoco es cierto que hayamos negado una renovación del contrato con una mejora de las condiciones salariales".

Y sentencia: "Quiero manifestar que he actuado con total profesionalidad, siempre conforme a la estricta legalidad y a los máximos estándares éticos, y que es el Real Valladolid el que, primero, no está cumpliendo con sus compromisos contractuales y, segundo, me está calumniando e injuriando de forma indecente".

El comunicado completo:

En mis casi de 40 años como agente de futbolistas he llevado a cabo infinidad de acuerdos y traspasos con equipos de fútbol de todo el mundo y jamás me he visto en una situación tan absurda, irreal y sinsentido como la que estoy viviendo ahora. Lamentablemente, las manifestaciones realizadas por la Directiva del Real Valladolid me llevan a escribir estas líneas.

Quiero empezar recordando que para que Juma Bah recalara en Valladolid, tuve que abonar los costes de viaje y alojamiento de los ojeadores del Real Valladolid invirtiendo mi dinero. Asumí los gastos porque sabía que era una inversión segura y beneficiosa para todos.

Además, cuando el Club decide fichar a Juma Bah, se consigue un contrato de cesión con opción de compra, evitando con ello todo riesgo económico, y se negocia un contrato de trabajo con el futbolista a través de mi persona. Para ese contrato, consciente de que contrataba a entonces un chico joven y desconocido pero que destacaba por su enorme potencial, el Real Valladolid exigió unas condiciones que se aceptaron prácticamente sin oposición ni negociación. Parte de estas condiciones fue una cláusula de rescisión donde el Club estipulaba el precio del futbolista para una terminación automática del contrato.

Ya con Juma Bah contratado, el Real Valladolid me encargó la venta de los derechos federativos del jugador para así obtener un rendimiento económico e hizo especial referencia a la cláusula de rescisión como una posibilidad para llevar a cabo el traspaso. En cumplimiento de esta encomienda, presenté varias ofertas desde antes de la apertura de este mercado de fichajes. Algunos clubes ofertaron incluso más del precio fijado por la cláusula de rescisión, pero el Real Valladolid no aceptó ninguna oferta.

Uno de estos clubes ha mostrado un interés especial por Juma Bah y, tras intentar una negociación amistosa, ha decidido, de forma voluntaria, consciente y analizando la situación en su conjunto, abonar el precio de la cláusula de rescisión para liberar al jugador de su contrato con el Real Valladolid y proceder a su contratación. Procedimiento que, lejos de las calumnias que se vienen diciendo, está amparado en la legalidad. Es más, me atrevería a decir que no hay nada éticamente reprochable en abonar el precio establecido en un contrato y aceptado por las partes contratantes. Lo que sí es reprochable, ética e incluso jurídicamente, es que los dirigentes del Real Valladolid mientan y difamen para esconder sus previas decisiones.

Ante el reciente comportamiento de la Directiva del Real Valladolid, quiero aclarar que, ni Juma Bah ni su agente que soy yo, Patrick Mörk, hemos rechazado el cambio de ficha del equipo juvenil al equipo filial o al primer equipo. Eso es absoluta y rotundamente falso. Es más, el Real Valladolid jamás se ha puesto en contacto con nosotros para realizar ese cambio de licencia.

Tampoco es cierto que hayamos negado una renovación del contrato con una mejora de las condiciones salariales. El Real Valladolid nos envió una propuesta donde se mejoraban las condiciones económicas del jugador (aun así bajas comparadas con el resto de la plantilla y su rendimiento) haciéndolo coincidir con el ejercicio de la opción de compra. Sin embargo, y habiendo dado el visto bueno a esta mejora, nunca se comunicó nada más al respecto.

Por lo tanto, y con esto acabo, quiero manifestar que he actuado con total profesionalidad, siempre conforme a la estricta legalidad y a los máximos estándares éticos, y que es el Real Valladolid el que, primero, no está cumpliendo con sus compromisos contractuales y, segundo, me está calumniando e injuriando de forma indecente. Ante estas actuaciones, me plantearé llegado el caso el ejercicio de todas las acciones judiciales que resulten necesarias y oportunas al juicio de mis abogados.

Patrick Mörk