Dura respuesta del Málaga al Nàstic deslizando una cortina de humo: "Han pasado una línea roja"
Kike Pérez, director general del equipo costasoleño, responde a los informes del partido del ascenso de la pasada temporada.
No han sentado bien en el Málaga las acusaciones del Nàstic de Tarragona por el partido del ascenso del pasado mes de junio. Tras analizar exhaustivamente el informe y la querella contra Eder Mallo, Kike Pérez, director general del club costasoleño, ha respondido con dureza. "Es una manera de ensuciar una hazaña que hizo el club", ha señalado el dirigente malaguista, que ha añadido que nadie se ha puesto en contacto con ellos tras la denuncia.
"Estamos muy sorprendidos, nos parece algo totalmente increíble. Hay que respetar que cada uno acude a la justicia para velar por sus derechos. Realmente nosotros como club entendemos que es una manera de ensuciar una hazaña histórica", ha iniciado Kike Pérez, que luego ha recordado cómo sucedieron los hechos: "Como bien sabéis, en el minuto 108 perdíamos 2-0 y fueron dos goles totalmente épicos, tanto el de Dioni como el de Antonio, y la verdad es que estamos muy sorprendidos y muy tristes. Y creemos que es una manera de ensuciar una hazaña que hizo el club, el equipo, que creyó hasta el final y consiguió el ascenso en la última jugada del último partido de una temporada entera".
La querella y todo lo expuesto desde Tarragona ha cogido por sorpresa al Málaga. "A nosotros nadie nos ha dicho nada. Yo lo que he leído sobre el asunto, simplemente decir que nosotros, la directiva del Málaga, que también hay que decir que ahora mismo no hay directiva en el Málaga, está José María, que es el administrador, y yo como director general, estuvimos con el equipo, cenando con el equipo. Nosotros estuvimos concentrados con el equipo hasta el momento del partido, fuera de Tarragona, en el hotel estuvimos todo el mundo", ha indicado el director general, que ha negado la presencia en esa cena con políticos: "Nadie del Málaga estuvo ahí, nadie del Málaga porque estuvimos, como bien te digo, estuvimos concentrados con el equipo desde que llegamos hasta que fuimos para el partido".
"Dudo mucho que las autoridades, que la mayoría de ellas vinieron el mismo día al partido, y las demás autoridades que viajaron con familia, dudo mucho que diga nadie lo que pude escuchar. Es triste, es increíble, y creo que es una manera de, es una línea roja que han pasado en el fútbol", ha añadido Kike Pérez, que entiende la frustración del club catalán, pero que no comparte las formas que ha emprendido: "Que seis meses después se estén enredando con esto, justo en una semana en la que parece que no les va muy bien, con algunas derrotas consecutivas, con una eliminación copera... A mí me pone muy triste, de verdad, me pone muy triste que al final yo llevo 24 años jugando, viendo partidos de mis equipos y me ha tocado estar dos veces en el sitio que le ha tocado al Nàstic. Yo sé que en el último partido de una temporada no conseguir el objetivo es muy duro, pero bueno, es que en la vida y en el fútbol más, tienes estas cosas, unas veces ganas, otras veces pierdes. Como gestor de fútbol y como director general del Málaga me pone triste, me pone muy triste el que quieran ensuciar lo que todos vivimos, que estuvisteis todos ahí, esa noche mágica que pasó en unos minutos, en los últimos 12 minutos, de ser trágica a ser mágica".
Sin noticias de la RFEF
Tampoco el Málaga ha tenido, de momento, una llamada desde la Federación Española para informarle de este asunto. "Las acusaciones son gravísimas, pero la verdad que nadie se ha puesto tampoco en contacto con nosotros desde la Federación. Imagino que ellos tomarán cartas en el asunto, sus servicios jurídicos, porque efectivamente son acusaciones gravísimas", ha apuntado Kike Pérez, que también ha dejado claro que el Málaga ejercerá su defensa si llega el momento: "No tenemos ninguna comunicación más que cuatro frases, si hubiera en algún momento efectivamente una acusación formal, pues nos defenderemos, porque es un atentado muy grave al honor del club y de las autoridades de Málaga".