FC BARCELONA

La vida de Xavi seis meses después de su despido del Barça: alejado del foco y viendo mucho fútbol... incluso el de Catar

Se cumple medio año de la destitución del egarense.

Xavi Hernández en un partido de la temporada pasada. /AGENCIAS
Xavi Hernández en un partido de la temporada pasada. AGENCIAS
Alex Pintanel

Alex Pintanel

Lejos queda aquel viernes 24 de mayo. 48 horas antes del último partido de Liga ante el Sevilla y a 24 horas de la final de la Liga de Campeones femenina entre el Barça y el Olympique Lyonnais. La decisión que tomó Joan Laporta durante esa mañana eclipsó el resto. Todo pareció ser invisible, excepto lo que sucedió en uno de los despachos de la Ciutat Esportiva. Y fuera de las instalaciones azulgranas, una veintena de periodistas pendientes de la cumbre, aunque el desenlace final ya era un secreto a voces.

El presidente tomó la decisión días atrás, pero no se lo comunicó a Xavi hasta ese mismo viernes. Cuando acabó el entrenamiento, Laporta citó al entrenador, que acudió a la reunión junto a Óscar Hernández y Sergio Alegre, para explicarle la decisión irrevocable de destituirle del cargo a final de temporada alegando motivos de planificación deportiva. La reacción de Xavi, según fuentes de la reunión, fue ejemplar.

Este domingo se cumplieron seis meses de su destitución. El técnico se mantiene al margen, esa fue su idea desde el primer momento, y no ha variado ni un ápice su hoja de ruta. No quiere protagonismo ni eclipsar el gran rendimiento del equipo. El catalán entiende que no es el momento de pronunciarse. Ni quiere hablar ni concederá entrevistas a corto plazo. Se ha dejado ver en las despedidas de Andrés Iniesta o Sergi Roberto, pero alejado del foco mediático. También estuvo de viaje en México jugando un partido de leyendas y visitando a su colega Héctor Moreno o en Tenerife disfrutando con la familia. En diciembre viajará a Japón para jugar un partido entre los Barça Legends y el Real Madrid Leyendas.

Durante este tiempo también se ha visto las caras con Hansi Flick. Fue en casa de Xavi y por petición del alemán, que llevaba tiempo detrás del encuentro. La cordialidad fue total, y la fotografía publicada en Instagram ratifica las tantas veces en las que Xavi se describió como "muy culé". Xavi quiere que reine la paz, que no haya divisiones y que todos los esfuerzos se centren en el bien del Barça. El alemán lo elogió. "Me encanta la pasión de este club, veo mucho amor en este club. Lo agradezco mucho. Tuvimos una buena conversación. También con su familia".

La nueva vida de Xavi... con mucho fútbol

Xavi está disfrutando y conectado al Barça de Flick, pero desligado de todo lo que genere polémica. El extécnico azulgrana está pendiente de las evoluciones de su Barça y lo sigue por televisión. Hasta el momento no ha ido a ver ningún partido al Lluís Companys, y tampoco está previsto que lo haga, por aquello de mantenerse alejado del epicentro periodístico. "Xavi es un enfermo del fútbol", dijo en su día Laporta. El egarense, que por cierto sigue haciendo ejercicio y se mantiene en plena forma, aprovecha el tiempo libre para consumir fútbol de cualquier país y competición. Incluso en Asia, por su pasado como jugador primero y entrenador después del Al Sadd.

Los dos años y medio al frente del banquillo del FC Barcelona fueron duros mentalmente. El egarense cogió a un equipo muy al límite y a un club en una delicada situación económica. En su primera temporada logró el objetivo de clasificar al Barça para la Champions, y en la segunda consiguió el título de Liga y Supercopa de España, pasando por encima del Real Madrid en ambos casos. El curso pasado, tras un verano en el que tuvo muchas limitaciones para fichar, y en el que el fútbol del equipo fue irregular -no se ganaron títulos-, Laporta decidió prescindir de sus servicios.

Xavi: «Las razones no son importantes, soy un culé más ahora».

Ahora, el egarense aguarda tranquilo y "disfrutando de la vida" con su mujer y sus hijos a la espera de un nuevo reto, que con total seguridad no será esta temporada. "Me tomaré un año sabático", reconoció a final de curso. Y cumplirá su palabra. El desgaste en Can Barça fue máximo. Opciones e interés de clubes e incluso de alguna selección no le han faltado, pero el de Terrassa quiere descansar y pasar tiempo con su gente. La temporada 2025/2026, quizás, será otra historia.