⚽ DANA EN VALENCIA

El viaje de Vicente Moreno a Valencia para reencontrarse con sus hijos tras cuatro días de "angustia" y bajar al barro

El técnico de Osasuna salió después del 1-0 al Valladolid tras tocarle de lleno la DANA: el martes ya vio como uno de sus coches se lo llevaba la corriente.

Vicente Moreno, en el partido contra la Real Sociedad./EFE
Vicente Moreno, en el partido contra la Real Sociedad. EFE
Alberto Martínez

Alberto Martínez

La imagen de la jornada que no se tenía que haber jugado en LaLiga por la desgracia de Valencia es la de un Vicente Moreno compungido en la sala de prensa de El Sadar. No pudo contenerse el de Massanassa, que condensó la angustia que ha vivido desde el martes por la noche, cuando en los grupos de whatsapp de sus amigos le pasaron imágenes de su pueblo inundado, con coches flotando, entre ellos uno suyo, con esas calles que tantas veces recorrió de niño y de adulto completamente irreconocibles por el agua furiosa que destrozó todo lo que se le puso a su paso. Por las calles que ahora recorren también sus dos hijos, que residen allí.

Pendín, tras el partido, dedicándole la victoria a Vicente Moreno.

"Apenas ha dormido", dijo Dani Pendín, su amigo, compañero de mil batallas en Xerez y asistente, por este orden, después de la victoria ante el Valladolid (1-0) que coloca momentáneamente a Osasuna en Champions. Eso es lo de menos ahora, porque Vicente Moreno y su mujer cogieron el coche una vez terminó el encuentro y se marcharon a Valencia a estar allí con los suyos, con su familia y con sus vecinos, a ayudar en lo que haga falta. Atrás, cuatro días frenéticos desde esa noche del martes.

Hasta las 13:00 horas del miércoles no consiguió contactar con sus familiares. "Sabía que estaban a salvo pero no pudo hablar con ellos", dijo el entrenador, que empezó a entender, como todos los vecinos, la magnitud de lo que se venía. El técnico de Osasuna tiene en Massanassa también a su padre y a sus suegros, a muchos amigos y excompañeros, incluso el campo de fútbol que ahora está destrozado lleva su nombre. En los grupos de whatsapp que tiene el entrenador había momentos en los que la gente no participaba. Y en apenas un día se pasó de 60 muertos a más de 200.

Vicente Moreno estuvo al pie del cañón en los entrenamientos. Intentó focalizarse pese a todo lo que pasaba a 500 kilómetros. "Cada día había novedades, no era una desgracia en la que ya se conoce lo que ha pasado, aquí las noticias varían y el drama aumenta", explica una de las personas que siguen el día a día de Osasuna.

A mitad de semana, el técnico valoró lo de ir a Valencia pero no era tan fácil con el sentido de responsabilidad que le liga a Osasuna y con el estado de la zona catastrófica. Hay partes que estarían cortadas, no se recomendaba ir, además era una semana con partido de Copa y con partido de Liga el sábado, por lo que decidió aguantar e ir una vez pasara todo. Hizo de tripas corazón.

Aunque el técnico debía estar en la grada ante el Valladolid, y el equipo lo dirigió el analista y asistente Ramon Alturo, Vicente Moreno nunca olvidará el momento en el vestuario, la camiseta que estaba preparada para solidarizarse con Valencia y ese minuto de silencio sepulcral y sentido, que para muchos fue "impresionante" y de los más respetados en El Sadar. El club se ha volcado con una recolecta, incluso se ha puesto en contacto con el alcalde, arropando a su entrenador de corazón. Moreno ya está en Valencia, se han podido ver imágenes suyas sacando lodo de un garaje.

La vida le cambió a Vicente Moreno muy rápido. El lunes miraba orgulloso la Gala del Balón de Oro porque Rodri, formado en el Villarreal, fue uno de los jugadores que el técnico seleccionó para las categorías inferiores valencianas cuando era el responsable, y ahora ha conseguido llegar al máximo reconocimiento internacional. A Vicente Moreno, que jugó en el Levante y en el filial del Valencia, que ha hecho vida en Massanassa y que lleva la bandera de su comunidad allí por dónde entrena, un escalofrío le recorrió el cuerpo apenas 24 horas después. Sus lágrimas son las del fútbol español. Con su tristeza se solidarizó Take Kubo, expupilo de Vicente Moreno en Mallorca en la temporada 2019-20: "Me preocupo mucho por él. Lo tuve y era un entrenador muy bueno y me lo dio todo para estar en Primera División. Su pueblo sufre. Le vi en la rueda de prensa y sufrí mucho".