Las tensiones de Mestalla
El Valencia recibe a Osasuna en la previa de Fallas con tensiones hacia el arbitraje, inmersos en el descenso y con dudas en el recibimiento al equipo.

Mestalla y el Valencia Club de Fútbol viven en un momento de tensión constante. La crisis deportiva y social del equipo, el riesgo real de descenso y las desavenencias en la gestión, llevan a que el ambiente por la capital del Turia esté lejos de ser óptimo. Hoy ante Osasuna esa tensión se verá incrementada por los diferentes conflictos o circunstancias que atenúan un momento en el que el equipo che no puede fallar.
Tensión, como es lógico, por la situación deportiva. El conjunto che es penúltimo en la tabla, pero por primera vez en tres semanas hay un hecho que puede extramotivar a los de El Pipo Baraja: dependen de sí mismos. Si el Valencia gana a Osasuna terminará la jornada fuera del descenso debido a los duelos entre rivales directos por la permanencia que lleva a que sí o sí, no todos los equipos de la zona baja vayan a sumar.
La tensión también estará en el terreno de juego pero no será solo por los jugadores, sino por el arbitraje. El colectivo arbitral está bajo sospecha en Mestalla desde que a Gayà le cayeran los cuatro partidos en un castigo que no tuvo ni precedentes ni sucesores pese a que otros protagonistas como Ancelotti realizaron declaraciones similares. El penalti no pitado, o no revisado por el VAR, ante el FC Barcelona solo ha hecho que avivar esas tensiones hasta el punto de que la Agrupació de Peñas del club ha propuesto una sonora pitada y pañolada al árbitro en el minuto uno de partido.
El duelo estará mediado por Javier Iglesias Villanueva, árbitro novato en LaLiga esta campaña y que solo ha pitado a Valencia y Osasuna una vez respectivamente. El comité ha elegido a este colegiado porque lo considera uno de los mejores en la presente campaña y asumen que será un partido de alta tensión. Para el VAR a Guillermo Cuadra Fernández.
Y la última tensión de cara a la cita es la que hay fuera de Mestalla, concretamente la que implica al recibimiento del equipo che en el estadio. En los últimos dos encuentros el autobús che entró por la parte de atrás del estadio debido a que, según fuentes policiales, "había concentraciones convocadas antes de la llegada del autobús y no se podía garantizar la seguridad de todos con la llegada de un vehículo de tal tamaño". La duda estaba pendiente de cara a la cita de hoy porque la asociación Libertad VCF ha vuelto a convocar protestas contra Lim antes del partido como lleva haciendo varias semanas.
Sin embargo, no hay ningún inconveniente, según explican fuentes policiales a Relevo, en esta situación ya que Libertad VCF ha organizado sus protestas una vez el autobús entre a Mestalla (a las 20:00 horas) y además "siempre solicitan las concentraciones en tiempo y forma ante delegación de gobierno", comentan dichas fuentes. Si en las últimas dos semanas no entró el vehículo che por su entrada habitual no fue por la convocatoria del colectivo mencionado, que siempre las realizaba después de la llegada, sino por otras convocatorias que se realizaban también. De cara a esta noche, Delegación de Gobierno solo tiene constancia de la concentración solicitada por Libertad VCF, de modo que el autobús entrará sin problemas por donde siempre.