BARCELONA 1 - ATLÉTICO 2

El Simeone más juguetón gana en Barcelona por primera vez y se divierte con la prensa

Tras la victoria ante el conjunto catalán se vio al Cholo más relajado.

Simeone celebra el gol de Sorloth. /GETTY
Simeone celebra el gol de Sorloth. GETTY
Marcos Durán

Marcos Durán

Primero con Carlos Martínez y Bernd Schuster y después en la sala de prensa del Estadio Olímpico de Montjuic. Diego Pablo Simeone, siempre con prisas con los periodistas tras los partidos y encontrando la manera de hacer las respuestas no demasiado extensas, tras ganar al Barça estuvo más relajado.

El Cholo, tanto en Movistar LaLiga como ante los demás medios le envió recuerdos a su padre, fallecido hace dos años. Carlos Simeone fue clave en esta victoria: "Hoy es el cumpleaños de mi papá que murió hace dos años y desde arriba me hizo un lindo regalo", dijo primero. Y después añadió: "Hoy era el cumpleaños de mi papá, hace dos años que no está y sabía que había un regalo dando vueltas".

Simeone habló de todo y elogió a todos los que pudo. A Oblak, Lenglet, Witsel, Galán, De Paul, Molina y por supuesto a Sorloth. Ganar de esta manera, sufriendo, es lo que más le gusta al Atlético de Madrid y al Cholo se le ve cómodo en esta faceta: "Contento, no puedo mentir. El equipo sufrió, el Barcelona tuvo muchas situaciones de gol, arriba son muy buenos, esta noche tuvimos una gran noche de Oblak, el partido lo empezó ganando bien el Barcelona, después nos metimos en el partido. En el segundo fue más jugado y tuvimos la de Barrios. Tuvimos la diosa fortuna de la contundencia. El equipo tuvo la paciencia para aprovechar el contragolpe y un golazo, el de Sorloth es un golazo", explicó.

La fortaleza del grupo

Si en la rueda de prensa previa el entrenador habló de que todos tenían que estar metidos para intentar sacar un triunfo de Barcelona, en el post volvió a reforzar esa afirmación: "Los jugadores están preparados para competir. Lo más fuerte que tenemos es el grupo, parece muy fácil decir el grupo, el grupo, pero los cambios entran de verdad. Lo que queremos es estar de esta manera. Para pelear por lo alto, si queremos competir, tenemos que estar bien", explicó, para después en rueda de prensa añadir más.

"Este partido sólo supone tres puntos muy importantes ante un rival buenísimo que confirma el trabajo colectivo. Les dije en el hotel que íbamos a necesitar de todos y cuanto más lejos fuese el partido más posibilidades íbamos a tener", finalizó.

El nivel del Barcelona

También elogió mucho al equipo rival y reconoció que por muchos momentos el rival superó a su equipo: "Una nobleza y una humildad para sufrí y defender ante un equipo que juega muy bien. Creo que hasta el gol fueron muy superiores a nosotros, después del gol creo que empezamos a entrar un poco en el partido, su energía empezaba a bajar y circulando la pelota vimos que pudimos competir. Cambiamos el formato para ver que podíamos estar más cerca y tuvimos varias situaciones después del gol de Rodrigo. El partido fue entrando en un lugar de resistencia y el equipo supo resistir. Y esperar lo que podía pasar, te pueden encontrar de contragolpe con un golazo de Sorloth y un pase de Molina fantástico. Ellos merecieron un poco más", concluyó.

Oblak, el salvador

Por último quiso elogiar a uno de sus capitanes, el esloveno Oblak que salvó al equipo en momentos puntuales: "Sé claramente cuál es nuestro camino y día a día. Tenemos un portero que es muy bueno, no he visto nunca un portero que no salve partidos y que salga campeón. Fuimos capaces de interpretar cómo juega el rival. Ataca muchísimo y gasta muchísima energía", terminó de decir el entrenador argentino antes de explicar que Giménez sintió una molestia y no afirmar que De Paul era el cambio antes del gol del argentino.