VALENCIA CF

Así se salvó el Valencia la última vez: "Me habría quedado a vivir en Mestalla"

En 1983, el club che también se jugó el descenso hasta el último suspiro. En aquella plantilla estaba Darío Felman, que da en Relevo las claves para salvarse.

Darío Felman en Mestalla. /Jesus Signes
Darío Felman en Mestalla. Jesus Signes
Nacho Sanchis

Nacho Sanchis

El Valencia se va a jugar el descenso en las 16 jornadas que quedan por delante. Es una realidad. Ni Europa, ni mitad tabla, ni otros objetivos: la meta que tiene el club che es la de llegar a los 40 puntos lo antes posible y conseguir mantener la categoría. Este escenario ha sido muy poco habitual en la historia del club, por mucho que bajo la batuta de Meriton se haya coqueteado con el mismo en el último lustro. De hecho, aunque se recuerde con temor, en los últimos años las campañas en las que más cerca se estuvo se terminó con nueve puntos por encima (2020-2021) y otros nueve en la 2007-2008.

Sin embargo, si hay un año en el que el Valencia CF tuvo que sufrir hasta el final ese fue en el curso 1982-83. Aquel año el conjunto che se salvó en la última jornada gracias a un milagroso gol de Miguel Tendillo que le sirvió para ganar en la última jornada al Real Madrid. Hoy, las leyendas de aquella época recuerdan ese momento y ven peligrosas comparativas con el que se vive en la actualidad. Darío Felman jugó 20 partidos aquel curso con el conjunto che y hoy repasa en Relevo cómo se salvó aquel Valencia. Y más importante: cómo se puede salvar este Valencia.

¿Cómo ve la situación del Valencia? ¿Le recuerda a aquella 1982-83?

Estar en esta situación es complicadísimo, el que no la ha vivido no tiene ni idea, no puede sentir lo mismo. Equipos como el Valencia muy pocas veces han estado en esta situación. Los otros equipos que están en el ajo nadan en ese río todos los años. Por eso, cuando un equipo como el Valencia cae ahí abajo, se complica tanto, porque al principio le cuesta creer que de verdad su objetivo es la permanencia.

Ustedes en su año, ¿cómo hicieron para hacer ese cambio de mentalidad?

Es increíble, estábamos disputando Europa pero nos dimos cuenta de que habíamos dejado de ser una fortaleza en Mestalla. Fue durísimo darnos cuenta, pero cuando entras en ese remolino, empiezan las lesiones, el técnico a veces comete errores… Se juntan un montón de factores que cuando uno cae en ese pozo no puede salir. Y tú te matas para salir. Nosotros lo probamos todo: cambiamos los entrenamientos de mañana a la tarde, cambiamos algunos ejercicios, hasta cambiamos la camiseta: un día jugamos con camiseta roja contra el Salamanca para ver si ganábamos un partido, íbamos a jugar con otro color pero quisimos ver si cambiando al rojo ganábamos… Y ni aún así. Lo cambiamos todo y no había manera. Jugamos a propósito con otra camiseta y perdimos.

"Te cuesta creer que peleas por no descender. Nosotros lo cambiamos todo para salir de esa espiral"

Darío Felman Exjugador del Valencia CF

¿Y cómo se da ese 'click' para salir del pozo?

Se tiene que dar como comenzó este proceso. Este proceso comenzó con un entrenador con personalidad, se ganaron cuatro o cinco partidos y dijimos todos: "Che, hay equipo, somos jóvenes y con personalidad". Pasamos de no hacer tres toques seguidos el año pasado a jugar muy bien este año. Pero recuerda que Gattuso dijo que el objetivo eran 40 puntos y todos alucinábamos porque mirábamos más a Europa… y mira. La razón de un entrenador. Es difícil salir de ese bucle. Yo pensaba que con el fichaje de Baraja el plantel haría el click ante el Getafe, al menos en la parte psicológica, la sentimental. Pero resulta que no, volvimos a lo mismo y perdimos con una pelota parada. Tenemos que aportar todos, desde el lesionado, aunque parezca que no sea nada, significa mucho.

¿Me pone algún ejemplo que pasara en 'su' Valencia?

Sí, yo estaba lesionado desde 1981, cuando vino esta racha mala en 1983 el entrenador me pregunto como estaba y yo le dije que fenomenal, pero no era cierto, no estaba bien. Pero quise estar, aporté para el vestuario, para el equipo. Quizás ahora con perspectiva fue un error porque reaparecí y volví a tener los mismos dolores. Jugué cojo, pero eso lanzó un mensaje y creo que ayudó al grupo porque vieron que hasta el cojo quería jugar y ayudar. Llegamos al último partido y el estadio estaba a reventar, la esperanza que nació en el vestuario de decir "vamos a salvarnos" nació por Mestalla. Luego se juntaron todas las estrellas, esto es el fútbol. Cuando acabó el partido y ganamos estábamos en el vestuario todo el equipo en silencio pendientes de como quedaban los resultados que necesitábamos para salvarnos… Y se dieron. Lo festejamos como si hubiéramos sido campeones, con el equipo que había no merecíamos estar ahí abajo pero nadie nos empujó, fuimos nosotros los que nos metimos ahí.

Usted era de los veteranos de aquel Valencia. ¿Qué le decía a los jóvenes?

Primero que es difícil mantener la calma cuando uno no gana. Cuando nos juntábamos yo cogía al jugador joven de turno y le decía: cual es tu problema cuéntamelo, confía en mi. Qué es lo que pasa, por qué no te salen las cosas. Buscaba hablar las cosas, comunicarme con el equipo. Los que mas experiencia teníamos buscábamos que volviéramos a cero, que nos olvidáramos de los errores cometidos… Que pensáramos que lo importante era llegar vivos a los últimos partidos y ahí empezaba todo, pero era dificilísimo porque salir de ese bucle mental es complicadísimo. El fútbol tiene estas cosas.

"Llevaba lesionado dos años, pero decidí volver a jugar por la mala racha en la que estábamos sin estar del todo bien; creo que eso ayudó al vestuario"

Darío Felman Exjugador del Valencia

¿Y cómo lo vive un vestuario?

Nosotros nos reuníamos mucho sin el entrenador. Los entrenadores cuando se juntan llaman a tres o cuatro jugadores, los capitanes, pero el plantel siempre tiene momentos de soledad, de intimidad, de privacidad. Nosotros en las concentraciones procurábamos hablar mucho. Yo me juntaba con Ricardo Arias, con Kempes, con Tendillo… Mirándonos a los ojos nos preguntábamos por qué nos pasaba lo que nos estaba pasando, porque éramos los mismos que ese año llegamos a cuartos en competición europea. Pero no había explicación, sufríamos mucho y no sabíamos como frenar la caída al abismo. Éramos responsables porque aquí el entrenador no juega, el presidente no juega… Los jugadores somos los responsables y entre nosotros jamás nos reprochamos nada, eso es clave que eso suceda ahora, que el vestuario se mantenga sano.

Si alguien le preguntara. ¿Cómo se salvaron? Qué le diría.

Con un cabezazo de Tendillo y con un estadio a morir. Yo no sé si cuando fui campeón con el Valencia vi ese ambiente que vi en el partido ante el Real Madrid, me habría quedado a vivir ahí. Te juro que me habría quedado a vivir en Mestalla disfrutando de la gente en ese momento.

Si fuera un veterano del equipo actual, ¿qué le diría a los jugadores jóvenes?

Que hoy en cada uno de nosotros hay una familia, algunos son papás, los abuelos… Juguemos por ellos, comprometámonos en cada uno dar la capacidad que tenemos. Creo que algunos jugadores se sienten solos, que no tienen el apoyo de la institución, pero el jugador tiene ese estirpe ganador y es difícil que se convenzan de que no sirven y que van a descender sí o sí. Al equipo se le están juntando las cosas que a nosotros se nos juntaron: caen lesionados jugadores buenos, los que quieren estar no están, los que están y tienen opción de marcar clarísima la fallan, se hace todo pequeñito… No hay una varita mágica que los ayude, ellos solos tienen que salir de este pozo. ¿Cómo? Ganando. Si el lunes en vez de perder hubieran sumado un puntito estaríamos hablando otro idioma. ¿Cómo puede ser que antes del Mundial el mismo equipo que hizo un partidazo ante el Betis juegue ahora como juega?

"Me habría quedado a vivir en Mestalla, en ese ambiente. Nos salvamos por Tendillo y por Mestalla"

Darío Felman Exjugador del Valencia C.F

¿Le da miedo la situación?

Sí, me da miedo, decimos que queda mucho, pero cada vez queda menos.

¿Y qué le pasa al Valencia actual?

Falta comunicación, necesitan hablar más entre sí los jugadores, ya no solo en el vestuario sino en el terreno de juego. Tenemos que volver a tener la sensación de que aquí en Mestalla el sábado tenemos que dejar la vida, nos tienen que llamar los bomberos para sacarnos de la cancha porque estamos muertos, no llegar a casa pensando "si hubiera hecho esto a lo mejor habríamos ganado".

¿Si hacen eso de dar todo, hay plantilla para salvarse?

Sí. Sin duda. Hay equipo peores que el Valencia, el problema es que no se ha podido ganarles. Ni siquiera al Elche que, con todo el respeto, tiene nueve puntos, se le pudo ganar en casa. Necesitan convencerse de que son mejores que otros equipos.

¿Quién era el líder de su equipo?

El líder era Mario Alberto Kempes por lo que representaba y significaba, pero era un líder impuesto. Pero él no era el líder natural. El capitán por ejemplo era Saura. Pero no hay secretos de liderazgo, todos han de asumir responsabilidades, ahora los dos líderes del equipo como Gayà o Cavani están lesionados, el resto debe dar un paso adelante.

¿Qué le diría a Rubén Baraja?

Más bien, qué le diría a la plantilla con Baraja. Que le escuchen, que aprendan de él, ser entrenado por una leyenda del club desprende un aura que otros entrenadores no tienen. A mí me entrenó Di Stéfano que siendo más leyenda madridista, en Valencia también era muy querido (ganó una liga como entrenador) y yo aprendí mucho de él. Se tienen que impregnar de como Baraja siente el club, respeta al club etc.

¿Sienten más el club los jugadores que son de Valencia?

Sin duda y te lo digo por experiencia propia. Lo sufrimos más. Seguro que Gayà lo sufre más que nadie.