Roberto Olabe niega que se marche por un Imanol Alguacil al que ya busca renovar: "No vengo al trabajo a hacer amigos… ni enemigos"
El Director de Fútbol de la Real Sociedad admite que "muchas veces" no piensan igual, pero formará parte de las negociaciones con el técnico.
Roberto Olabe dejará la Real Sociedad, por tercera vez en su carrera, el próximo mes de junio. Hasta entonces quiere seguir centrado en un proyecto al que le quedan "cosas chulas" por delante y en el que seguirá conviviendo mano a mano con el actual entrenador realista, al que ya busca renovar y con el que se reunió recientemente. Su relación con Imanol Alguacil, muchas veces en entredicho, fue uno de los vértices de su intervención de este jueves en el Reale Arena y el responsable del área deportiva quiso desmentir que su salida tenga que ver ello.
Eso sí, admitió que no mantiene una relación más allá de la profesional con el oriotarra y que tienen "muchas veces" puntos de vista diferentes que, en su opinión, significan "una riqueza" para el proyecto txuri-urdin. "Lo que penséis e interpretéis... no soy yo el que puedo dar una respuesta a ello", respondió en primer lugar en cuanto se le preguntó por esa relación o, concretamente, por la opinión que haya en el entorno realista sobre ella.
Después pasó a explicar el lugar que ocupa Imanol en la estructura, recordando también al entrenador del Sanse, Sergio Francisco, o a José Luis Sánchez en el femenino, poniendo en valor la figura de los entrenadores. "Son elementos muy importantes que le sacan brillo a cada uno de esos ámbitos y a ellos les miramos con admiración, deseo y ayuda", completó, en una declaración que sirvió de contexto antes de responder a la pregunta directa en la rueda de prensa que ofreció este jueves.
¿Cómo es su relación con Imanol? "Me lo habéis preguntado mucho: a mi lugar de trabajo no he ido nunca a hacer amigos… ni enemigos, aunque mis mejores amigos provienen del fútbol. Imanol y yo muchas veces no pensamos igual, pero ahí está la riqueza", lanzó el todavía Director de Fútbol, antes de insistir en que "el pensamiento crítico y en la divergencia" les hace "mejores" por "explorar qué hay detrás de esa diferente opinión". "No creo demasiado en ser del mismo palo, intento que nos digamos 'no' y que tengamos diferentes opiniones. No solo con Imanol, sino con todas las personas que trabajan en Zubieta y que hacen este proyecto tan apasionante".
Más allá de lo que supone para el proyecto txuri-urdin, Olabe afirmó que con Imanol mantiene "una buena relación profesional" que no tiene continuidad más allá: "Efectivamente no nos lleva a una relación personal fuera de Zubieta, pero sí tenemos la misma mirada, el mismo compromiso por un modelo que es parte del desgaste". Todo esto, asegura, no tiene que ver con su decisión que abandonar el club donostiarra a final de temporada, un año antes de lo que marcaba su contrato. "¿Si me voy por Imanol? No. Mi relación es desgastante con Imanol, con Jokin (Aperribay), con Erik (Bretos)... Tenemos muy claro que el ámbito de unos y de otros es diferente. No sé si habrá alguien al que decepcionará, pero el motivo de mi decisión no es mi relación con Imanol, ni mucho menos".
Proceso de renovación
Más allá de la relación diaria entre Olabe e Imanol, la continuidad o la apuesta por el entrenador es una de las partes que ha influido en esa percepción sobre sus más y sus menos. Cuando aterrizó el Director de Fútbol en esta tercera etapa, el entrenador venía de haber sustituido a Eusebio durante unos meses, pero la idea de la entidad fue la de dar las riendas del primer equipo a Asier Garitano y, sobre todo, incluir en su staff a una persona de la confianza de Olabe por su paso por la Academia Aspire: Rubén de la Barrera.
No duró mucho esta dupla y se apostó entonces de nuevo por Imanol, ya confirmado como primer entrenador. Su buen hacer, consiguiendo siempre clasificarse para competiciones europeas, además de ganar una Copa del Rey, llevó a la entidad a seguir contando con él, aunque siempre con la sombra de Xabi Alonso, que lucía en el Sanse. Olabe era uno de los que veía al hoy entrenador del Bayer Leverkusen como una apuesta futura y desde esa visión surgió esa opinión pública de tirantez con Imanol con el que nunca tuvo feeling pero, según aseguran diferentes fuentes, tampoco problemas más allá de las 'disputas' lógicas en todo proyecto.
Hoy, la situación cambia drásticamente con la salida de Olabe a partir del próximo mes de junio, precisamente cuando Imanol debe negociar su renovación. El oriotarra finaliza contrato el próximo mes de junio y ya ha tenido el primer acercamiento con los responsables del club. Aperribay, que se implica mucho –con su presencia en las reuniones– en este tipo de negociaciones, está convencido de que podrá convencerle para seguir en la entidad. Y Olabe formará parte de este proceso pese a su situación actual, por lo que su objetivo es el de firmar una renovación que se antoja clave en el proyecto de la Real Sociedad más allá de ser amigos o enemigos.