FC BARCELONA

Lo que se cuece en el Barça: el nuevo y doble frente que se le abre a Laporta, un caballo con el que puede arder Troya

La oposición, personificada en Víctor Font y Joan Camprubí, se moviliza para lograr que el presidente dé la cara en la Asamblea.

Joan Laporta, en una comparecencia/efe
Joan Laporta, en una comparecencia efe
Miguel Rico

Miguel Rico

Cerrado el mercado con la única, aunque espectacular, incorporación de Dani Olmo, el Barça juega hoy su cuarto partido de Liga. El Valladolid será en Montjuïc el rival del líder. Hansi Flick, en la previa del parón por selecciones, vuelve al Olímpic con pleno de puntos pero con la dolorosísima pérdida de Marc Bernal, quien además de una lesión asociada de menisco, se rompió el martes en Vallecas el ligamento cruzado de la rodilla izquierda. Un año de baja espera el chaval de 17 años que en los próximos días será intervenido por el Dr. Monllau, el mismo que operó a Gavi de la misma afectación y que ya está entrenando con el equipo, en fase final de su recuperación. Va muy bien pero no se forzará su reaparición.

No está la cosa para forzar la máquina. Además, el club, sin músculo económico ni margen de fair play, no puede traer un sustituto aunque sea cedido para Bernal y, como es lógico y recomendable y mirando de nuevo a La Masia, tratará de mantener un arranque que por rendimiento de los jóvenes ha superado todas las expectativas. La pelota entra y eso siempre da tranquilidad al entorno. Tranquilidad y esperanza deportiva. La calma, sin embargo, siempre es efímera en Barcelona y dentro de poco el oleaje volverá a provocar las turbulencias habituales con mareantes y fuertes marejadas.

Sin explicaciones, hasta el momento, del porqué raquítico mercado frente a las expectativas creadas, llegará el momento de hacer públicos los resultados económicos y mientras desde el club se espera con optimismo el cierre del balance económico, la oposición teme todo lo contrario al entender, como veremos más adelante, que los números de Laporta son ficticios y que la situación sigue siendo de emergencia. Y que no puede ventilarse haciendo, como hemos visto en los últimos años, una Asamblea telemática en la que la asistencia presencial fue poco más que testimonial. Y es aquí, con el objetivo fijado en la Asamblea, donde puede volver a arder Troya. El caballo se está armando con ganas de descabalgar a su gente delante del mismísimo Laporta.

Laporta y Font en las elecciones de 2021 EFE
Laporta y Font en las elecciones de 2021 EFE

A Víctor Font, al haber sido segundo en las elecciones de 2021 al frente de Sí al futur y manteniéndose en la carrera electoral del 2026, le podríamos considerar jefe de la oposición y ejercerá como tal en cuanto se den a conocer las cuentas. En su opinión, el FC Barcelona apurará los plazos estatutarios y no las presentará hasta 10 días antes de la Asamblea. Eso, teniendo en cuenta que la Auditoría tiene tiempo hasta el 30 de septiembre para firmar su informe, nos sitúa en octubre. Mes clave porque, acto seguido, Font saldrá, con luz y taquígrafos, a preguntar qué ha pasado con los 400 millones de Barça Estudios, a tratar de evidenciar una vez más que el Barça lleva perdidos en tres años más de mil millones en ingresos recurrentes y temerse que el último ejercicio, en realidad, se haya vuelto a cerrar con pérdidas.

Una valoración, por no decir catastrófica, evidentemente negativa de la cuestión, aunque Font insiste en que simplemente es realidad. Eso sí, falta saber si el club llegará a tiempo para cerrar las negociaciones con Nike y agarrarse al salvavidas de la multinacional que, en opinión de la oposición, lleva meses jugando con ventaja. Nike no tiene prisa y el FC Barcelona necesita el acuerdo cuanto antes. Se avanza, es verdad absoluta, pero no a la velocidad que requiere la urgencia.

Paralelamente, Joan Camprubí Montal, que hace unos meses presentó la propuesta Som un Clam, empezará antes la presión. El día 3 de septiembre estará en Lleida, y este mismo mes visitará Tarragona capital y las Terres del Ebre. El acto cumbre, como colofón y a modo de irrupción definitiva, será en octubre, en Barcelona. La idea es celebrar un acto multitudinario, con no menos de 2.000 personas. Se invitará a los medios, pese a que no se dará rueda de prensa, y centrará su ofensiva, como Font, en la Asamblea con la idea de evitar que sea telemática y con el quimérico objetivo de poder incluir puntos en el orden del día, algo para los que necesitaría 3.000 firmas de socios para añadir cuestiones que el club no haya incluido. El nieto y biznieto de los presidentes Montal i Costa y Montal i Golobart calcula que la Asamblea anual podría convocarse para el 20 de octubre y se ha propuesto convencer a los socios de que es necesario evitar a toda costa que la convocatoria de compromisarios se convierta en un trámite dirigido desde dentro.

A tenor de los pasos apuntados, parece que Sí al Futur y Som un clam, en este primer tramo de la acción continua, caminan en la misma dirección y con el mismo objetivo, la Asamblea. Llegados a este punto, uno se pregunta si no les convendría hablar para acumular un frente más potente. La respuesta es que ya han hablado, de temas generales, particularmente de economía, y ambos grupos prefieren seguir su línea. Esto, para entendernos, es lo mismo que ocurre con la política catalana, particularmente en lo referido al independentismo.

Son pocos quienes creen que, ante unas elecciones generales, la suma de todos los partidos independentistas obtendría mejores resultados globales que el fraccionamiento que comporta la división de votos. Ocurre que en la política, como en el fútbol, nadie se fía de nadie y cada uno va a lo suyo. No habrá novedades en este aspecto. En consecuencia, ahora, presión de Laporta desde dos frentes, y cuando lleguen las elecciones, ya se verá. En ese caso, Font, Camprubí y cualquier otro aspirante a la dirección del FC Barcelona debería tener en cuenta que Laporta es mejor candidato que presidente y con eso le ha dado para estar donde está.

¿Sabías que...?

Araújo, en Uruguay hasta el 15 S

La última semana ha sido intensa en lo que se refiere a la posición de central en el FC Barcelona. Se ha renovado a Lenglet, extendiéndole un año su contrato para diferirle el salario de este curso, y acto seguido se ha marchado cedido al Atlético. Christensen, con fascitis plantar, entró en la enfermería con una previsión de baja por dos meses y salió de allí con una lesión de larga duración. Cuatro meses fuera y, casualmente, margen salarial para inscribir a Dani Olmo. Por último, el Girona apretando hasta el último momento para llevarse otra vez a Eric García. Deco, desde el primer momento, y Flick se opusieron a la operación porque el Barça va justo, justísimo de marcadores. Sólo están disponibles Cubarsí e Iñigo Martínez, dado que Kounde juega, y juega bien, de lateral derecho. El cuarto hombre sería Araújo pero Ronald aún tiene para rato. Lesionado en la Copa América, tendón isquiotibial muslo derecho, fue operado el 22 de julio en Finlandia por el Dr. Lasse Lempainen. Cinco meses de baja y permiso del club para hacer en su país la primera fase de recuperación. Que se sepa, Araújo tiene autorización para seguir en Uruguay hasta el 15 de septiembre. Conclusión, si surge un nuevo contratiempo habrá que recurrir nuevamente al Barça Atlétic.

Nike-Barça, todo igual

El FC Barcelona tiene firmado un contrato hasta 2028 pero llevan meses y meses negociando para mejorarlo y ampliarlo hasta 2034. Durante todo este tiempo han ido apareciendo noticias más o menos interesadas con cifras espectaculares, llegándose a dar por cierto que la multinacional norteamericana pagaría 90 millones por temporada más un bonus inicial de 120 millones. Números, desde luego, que sacarían al Barcelona de no poco apuros. Entre ellos, uno esencial que ha martirizado el día a día del club: el 1x1. Pues bien, a día de hoy, que quiere decir exactamente 30 de agosto, no nos consta ninguna llamada de las partes para agilizar el desenlace. Es decir, no se avanza. Cuestión que, con el mercado cerrado, mantiene absolutamente abierto el interrogante sobre cuándo podría culminarse satisfactoriamente la negociación. Ahora lo que aprieta y urge ya no es tener vía libre de la LaLiga poder inscribir jugadores. La cuestión esencial es poder hacer un ingreso más que sustancial para que cuando los auditores cierren su trabajo, los números del club sean azules y no granas. Un reto de categoría.

Moleiro, Barça, Arabia…

Alberto Moleiro, tinerfeño de la UD Las Palmas, le metió el jueves un golazo al Madrid en el que se pudo observar toda la calidad de un chaval de 20 años que está siendo seguido por clubes importantísimos. Cuentan que tiene 60 millones de cláusula pero que el club estaría dispuesto a escuchar ofertas por la mitad. El Barça, que ya había comprado a Pedri, intentó con Ramon Planes primero y Mateo Alemany después, acceder al traspaso, pero Miguel Ángel Ramírez, presidente insular, consideró insuficientes todas las propuestas. Pero detrás de él no sólo anda el Barça. El mismo Ramon Planes, ahora Director Técnico del Al Ittihad, volvió a intentarlo hace poco con la misma suerte que en el primer asalto pero, ojo, que la apuesta Moleiro no se limita a este club. Su nombre está en la lista de jugadores jóvenes que Arabia quiere incorporar a uno de sus clubes y si estos se empeñan…