REAL BETIS 3 - VALENCIA CF 0

El orgullo amargo del Valencia

El director corporativo del club señaló que era un orgullo para el club tener a tanto joven, una frase que escondía las carencias que mostró el equipo y la realidad de un partido que acabó 3-0.

Fran Pérez en el Benito Villamarín. /LaLiga.
Fran Pérez en el Benito Villamarín. LaLiga.
Nacho Sanchis

Nacho Sanchis

Comentaba Javier Solís, director corporativo del Valencia CF y portavoz de la entidad, que es "un orgullo" que hubiera "tantos jugadores de la Academia presentes en el Benito Villamarín". La frase sobre el papel lucía interesante, pero lo que escondían las palabras de Solís eran las carencias de una plantilla más que corta, unos procesos con algunos jóvenes demasiado adelantados y, a la postre, una diferencia con el Betis, antaño rival directo del Valencia, que se vio reflejada en el luminoso.

Con doce jugadores de campo del primer equipo se plantó el Valencia en el Benito Villamarín. Uno de ellos con molestias (André Almeida), otro algo pachucho tras haber sufrido gastroenteritis aguda esta semana (Fran Pérez) y lo más importante, sin uno de sus puntales ofensivos como es José Gayà. La convocatoria era de 20 futbolistas, 9 de ellos eran canteranos que hace menos de 12 meses estaban jugando en Segunda RFEF.

Lo que pasó en el terreno de juego es que el orgullo del que hablaba Javier Solís previo al partido se tornó en amargura. En Sevilla se vio un Valencia tan voluntarioso como siempre pero al que simplemente no le dio para asaltar el estadio verdiblanco. La superioridad bética fue absoluta, de hecho no dio la sensación de que los de Pellegrini forzaran demasiado la máquina durante los 90 minutos.

El Valencia encajó los dos goles a balón parado, uno de los males del equipo la campaña pasada, para darle la vuelta Baraja miro a su banquillo para revolucionar el partido, pero solo pudo optar por Hugo Guillamón, un mediocentro defensivo para intentar remontar, y Mario Domínguez, un canterano con tanto futuro como presente todavía por pulir. Mientras, Pellegrini introducía en el verde a Abde y Borja Iglesias.

Por medio de Abde llegó el tercer gol y mientras el Villamarín festejaba, Baraja veía como Diakhaby se rompía en los isquiotibiales, la enésima baja para El Pipo, que está haciendo malabares para mantener a los 'veteranos' el máximo tiempo posible, con los riesgos que ello comporta. Al final, el Valencia perdió y el orgullo del que hablaba Solís (jugaron hasta 8 jugadores formados en la Academia), se volvió amargura.

Baraja: «O vamos al 200% o no hay ninguna opción».

Baraja: «Nuestra realidad es esta»

Rubén Baraja se mostró algo estoico en la sala de prensa y asumió la realidad de su equipo que nunca se ha escondido desde el club: el objetivo es no bajar. "Tenemos que asumir que esta era nuestra realidad, sabíamos que nos iba a costar un mundo sumar en este tipo de partidos. A eso hay que sumarle que no hemos sido contundentes y nos han metido dos goles a balón parado, así es imposible competir. Tenemos que entender que o vamos al 200% o en los partidos que hoy pasa lo que ha pasado", explicó.