GIRONA - VALLADOLID

Los "ocho días dormido" y la resiliencia de Eusebio Sacristán que conecta Valladolid y Girona: "No me salían las frases, no me podía relacionar"

El Pucela fue el primer club del vallisoletano. Y el Girona, hasta el momento, el último. Ambos se enfrentan este viernes.

Eusebio en su época en Girona. /GIRONA FC
Eusebio en su época en Girona. GIRONA FC
Marc Mosull

Marc Mosull

El 30 de diciembre de 2020, Eusebio Sacristán (La Seca, Valladolid, 1964) sufrió un accidente que le provocó un coágulo cerebral y le tuvo más de una semana en coma inducido. "Estuve ocho días dormido, en los que tenía dos posibilidades: podía morir o seguir viviendo", de este modo lo explicaba él mismo en una entrevista a Relevo. A causa de aquella caída, perdió las capacidades motrices, cognitivas y de habla durante un tiempo. "No me salían las frases, no podía relacionarme", relataba.

Con mucho esfuerzo y tras una larga recuperación, el vallisoletano recobró sus capacidades. Y en ese proceso le ayudaron mucho los miembros de la Fundación Eusebio Sacristán, que él mismo creó en 2003 y que trabaja desde entonces para la inclusión de niños y niñas en situación de vulnerabilidad social.

"Había muchos momentos en los que no era capaz de hablar con los demás porque no estaba preparado para ello. Con los niños, iba por las tardes y podía estar una hora con ellos. Pensaban que era uno más de ellos. Me lo pasaba bien, no tenía nada complicado en esa hora que estaba allí", comentaba a este medio.

Eusebio Sacristán cuenta en Relevo su recuperación tras el accidente. IMAGEN: ÁLEX CORRAL | EDICIÓN DE VÍDEO: MICHÉLE NOVOVITCH

Eusebio Sacristán creó una Fundación para ayudar a los demás y, tras el accidente, la Fundación le ayudó a él. También su capacidad de resiliencia, la que le llevó a ganarse la vida con el deporte, permite entender su recuperación. Quería ser futbolista profesional y lo logró con el Valladolid, a los 19 años; se propuso ser campeón de Europa, y lo fue con la Selección Sub-21 y con el Dream Team del FC Barcelona.

"Todo lo que he pensado en este tiempo es que la vida son mentalidades y cuando uno tiene sus mentalidades, las llega a conseguir, aparecen en tu vida. Así que, en esta dificultad tan importante que tengo, lo que tengo que hacer es tener mentalidad y esperanza de que puedo llegar a conseguir recuperarme", se sinceraba Sacristán, exjugador de Atlético de Madrid, Celta y Barça, cuya carrera arrancó en Valladolid y se suspendió, que no finalizó, en Girona. Entonces, siendo entrenador.

Tras dirigir a Celta, Barça B y Real Sociedad, su última experiencia, en Montilivi, terminó en 2019 con un descenso traumático y con Eusebio abandonando la entidad y perdonando el año de contrato que le quedaba: "No sabía por qué había bajado, en un club donde había estado bien, había estado cómodo entrenando... Analizándolo, caí en que a final de temporada empecé a tener miedo, me dio mucho miedo descender. Y a los jugadores les transmití ese miedo".

Desde entonces, han cambiado mucho las cosas en Girona, que ahora juega la Champions. Y, pese al descenso de 2019, el recuerdo que dejó Eusebio en Montilivi es imborrable. Precisamente, cuatro años después de su accidente, el conjunto catalán, hasta el momento el último de su carrera, se enfrenta a su primer club, un Valladolid que le permitió ser profesional. Mientras tanto, Eusebio Sacristán, centrado en su Fundación, sigue con su recuperación y no descarta la posibilidad de volver a entrenar. Nadie duda de que si se lo propone, lo alcanzará.