Lo nunca visto en el Bernabéu: un cruzado y dos lesiones de un mes ¡en 18 minutos!

Las brujas que parecen perseguir al Real Madrid con las lesiones se dieron un festival en el partido de este sábado ante Osasuna: Rodrygo se retiró con dolor en el recto femoral derecho en el minuto 20, Militao se rompió el cruzado en el 30' (con afectación de ambos meniscos) y Lucas Vázquez sintió un pinchazo en el 38'. Los asistentes al Bernabéu, que ya han lamentado en los últimos tiempos los percances graves de Courtois, Carvajal o el propio Éder, no dieron crédito. Ancelotti, tampoco.

El primero en llevar la preocupación al semblante del técnico italiano fue Rodrygo, gafado. El brasileño se rompió el isquiotibial hace 17 días contra el Dortmund, reapareció el martes frente al Milan y, en su regreso a la titularidad ante Osasuna, abandonó el terreno de juego con los ojos vidriosos. Luego rompió a llorar en el banquillo y estará un mes de baja. Los doctores y Militao (le dio un beso antes de que fuese sustituido por Brahim) le arroparon. El '3' no podía imaginarse lo que vendría después...

Tras una disputa en el área, el central pegó un alarido que estremeció al estadio y reclamó la entrada inmediata de las asistencias. Sus gritos y gestos no auguran nada positivo e infunden pánico por una posible rotura de cruzado, el mismo contratiempo que sufrió en la jornada 1 de la temporada pasada en San Mamés. Si aquella vez se dañó la rodilla izquierda, en esta ocasión se quejó de la derecha. Lucas Vázquez se llevó la mano al rostro en señal casi de desesperación... y luego le tocó a él.

En el 38', el lateral (le esperan cuatro semanas en el dique seco) se tiró al suelo tras sentir un pinchazo en el abductor izquierdo y pidió el cambio. Como Ancelotti ya había realizado dos ventanas de sustituciones y sólo le quedaba una, pidió al gallego que aguantase hasta el descanso (lo hizo cojo) para quedarse con otra oportunidad para introducir algún revulsivo en la segunda mitad. Lucas fue sustituido en el intermedio por Modric y Valverde pasó al lateral.

Si la baja de Rodrygo tiene reemplazo (entró Brahim y Güler espera su turno), los percances en la defensa suponen un quebradero de cabeza para el cuerpo técnico. Alaba sigue en la enfermería, y todavía le queda tiempo en ella pese a haber empezado esta semana a tocar balón, y ahora mismo sólo hay dos centrales sanos con ficha de la primera plantilla: Rüdiger y un Vallejo con el que no se cuenta. Tchouameni, opción de emergencia, tiene para un mes. Para sustituir a Militao, Ancelotti echó mano del castillista Asencio y el canterano cumplió con nota, hasta el punto de dar una asistencia sensacional a Bellingham para el 2-0. Todo apunta a que se quedará con los 'mayores'.

Con Carvajal también en el dique seco, la baja de Lucas obligará al entrenador a recurrir a Mendy a pierna cambiada, mantener ahí a Valverde o mirar a Valdebebas. El juvenil Fortea, que se ha ejercitado con el primer equipo en los últimos 10 días y se exhibió entre semana en la Youth League ante el Milan, es la opción que más gusta para el '2'. Sobre todo Loren Aguado y David Jiménez, del Castilla, también cuentan.