Modric cubrió como pudo el vacío sin Kroos... ¿y ahora qué?: la primera 'patata caliente' para Xabi Alonso está en el centro del campo
Sin el alemán ni el croata, los blancos pierden la figura del centrocampista técnico y de gran peso en la circulación de balón.
El adiós de Luka Modric, entre lágrimas, ovaciones unánimes, pasillos y manteos, representa el final de una de las etapas más brillantes del centro del campo del Real Madrid. El propio Toni Kroos, espectador de lujo (e inesperado) del último baile del 10 en el Bernabéu, hizo lo propio el 25 de mayo de 2024, aunque en su caso optó por colgar las botas. Ambos conformaron una de las sociedades más vistosas y ganadoras de la última década, artífices de machadas históricas en la Champions (cinco títulos compartidos) que aumentaron el palmarés del club blanco en la máxima competición continental.
Por lo tanto, el adiós de Modric deja huérfana la figura de centrocampista de grandes condiciones técnicas y peso en la circulación del balón. Con su marcha, el Madrid pierde a su capitán, a uno de sus argumentos competitivos más potentes y, también, a uno de sus arquitectos del juego. Algo que ya ocurrió la pasada campaña cuando Kroos, presente por sorpresa en su despedida, anunció su retirada. En su caso, lo hizo en plenitud y en lo más alto, después de ganar la Decimoquinta en Londres y de convertirse en el metrónomo del conjunto merengue durante una década.
Sin el alemán, Modric asumió —más todavía— galones y responsabilidades y, aunque su rol fue más de revulsivo que de titular indiscutible (más de 2.800 minutos este curso), fue capaz de imponer su fútbol en cualquier tipo de contexto y escenario. También su pausa, una de sus principales características y bazas, o su visión periférica, capaz de ordenar y desordenar al equipo con un simple pase de tres dedos, ya marca de la casa para el 10.
Otro reto para Xabi Alonso... después del Mundial de Clubes
Así, sus condiciones, sumadas a un historial ganador sinigual, convierten al croata en un símbolo del Real Madrid (y del madridismo). Su adiós, además, supone la pérdida de un centrocampista técnico y con un protagonismo excelso con balón, rol que únicamente podrá replicar, por atributos, Dani Ceballos. Xabi Alonso, eso sí, se encontrará un amplio abanico de centrocampistas en el que futbolistas como Camavinga, Tchouameni, Bellingham o Güler deberán dar un paso adelante, con Fede Valverde consolidado como uno de los pulmones del equipo. El charrúa, perfil distinto al del croata, ha mejorados sus prestaciones con balón en la medular en una temporada marcada por la superioridad del Barça.
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— Real Madrid C.F. (@realmadrid) May 24, 2025
Xabi Alonso, aunque podrá disfrutar del croata en el Mundial de Clubes (tanto él como Lucas Vázquez lo disputarán), apunta un nuevo reto en su lista de tareas para la 25-26: encontrar con un centrocampista que gestione los tiempos como el 10 o como el propio Kroos y que, en medio de un fútbol absolutamente físico, sea capaz de imponer su pausa y ritmo.
Arda Güler, titular en las últimas jornadas de Liga, aprovechando la ausencia de Rodrygo y la lesión de Brahim, oposita a retrasar su posición y, con mayor libertad, ordenar y dirigir al equipo. No obstante, y en el carrusel de cambios que ya anticipó Relevo, no se descarta la posibilidad de que el Real Madrid acuda al mercado de fichajes en busca de un centrocampista de corte técnico que gestione el balón de manera similar a Kroos y Modric. Mientras tanto, Xabi Alonso tiene deberes... y un reto mayúsculo por delante.