Una llamada de Ansu Fati en plena noche encendió una alarma en su cuerpo que aún perdura: "El Barça manda... y trabajó el doble"
El doctor achaca los primeros problemas del delantero a su rehabilitación en el Barça y no a la primera operación.
El fútbol está siendo cruel, muy cruel, con Ansu Fati, el futbolista que enamoró al Barça y al fútbol internacional en la campaña 2019-20, con Ernesto Valverde, cuando asomó como un león por el profesionalismo. Goles, regates, una velocidad endiablada y una toma de decisiones que recordaba a la de aquellos escogidos que saben lo que hacer en los momentos en los que se suele nublar la vista. Pero llegó una inoportuna lesión de rodilla el 7 de noviembre de 2020, una rotura del menisco interno, y allí empezó una espiral de la que no ha podido salir todavía. El miércoles pasado, el jugador volvía a lesionarse y permanecerá un mes de baja.
El doctor Ramon Cugat fue el encargado de la primera operación. Tras ese proceso de inclemencias ha habido múltiples habladurías y el doctor, una eminencia en las rodillas, inmerso siempre en innovaciones, aportó luz -o al menos explicó su punto de vista- en un encuentro con periodistas este lunes en la Clínica Quirón. "Ansu Fati tiene la rodilla bien, puede volver a ser el que era, quizás necesita un trabajo más específico y coger confianza", introduce el doctor antes de entrar en la máquina del tiempo.
Después de la lesión, el jugador fue operado el 9 de noviembre y comenzó la rehabilitación en la misma clínica. Allí se le practicaron 13 sesiones, una al día, por lo que estuvo las primeras dos semanas bajos los cuidados de Cugat y de su equipo. Pero el Barcelona, cuyo equipo médico lo gestionaba el doctor Lluís Til, que había llegado con Ronald Koeman al club, decidió que debía regresar al Camp Nou para hacer allí la recuperación. Era la sesión 14 y, por la noche, Ansu Fati llamó a la clínica Quirón para alertar de que tenía la rodilla inflamada. Allí se encendieron las primeras alarmas en su cuerpo que todavía se mantienen.
"Trabajábamos aquí una vez al día, y allí le hicieron entrenar dos, por lo que se rompieron los puntos"
Doctor de la Clínica QuirónCugat lo explica así: "Lo llevábamos aquí e hicimos 13 sesiones, pero en la sesión 14 se le hinchó la rodilla porque había trabajado el doble... Trabajábamos aquí una vez al día, y allí le hicieron entrenar dos, por lo que se le rompieron los puntos de sutura", explica. "En estos casos manda el Barça y quiso recuperarlo allí", añade. "Pero ahora eso es pasado. Su padre me dijo que la rodilla está bien", finalizó.
Después de aquello, incluso, Ansu Fati, al ver que las cosas no le funcionaban, pasó otras dos veces por quirófano en Barcelona y una tercera en Oporto, donde se le practicó una artroscopia. En el mismo acto y en declaraciones posteriores al Què t'hi jugues, añadió que "su padre me llamó un día y me dijo que todo el mundo habla de la rodilla, pero que él se encuentra bien de la rodilla y que últimamente ha tenido problemas en los isquiotibiales, esto es palabra del padre de Ansu Fati".
Su regreso al FC Barcelona no pudo empezar peor: con un pisotón
La pretemporada no pudo empezar peor para Ansu Fati. Si bien durante los primeros días el club le comunicó que estaba dispuesto a darle una oportunidad para que se ganara un puesto en la plantilla, una lesión producida de un pisotón a escasos días de ir a la gira de los Estados Unidos. No empezó a jugar hasta mediados de septiembre. Debutó de manera testimonial en Mónaco y desde entonces acumula 158 minutos en siete participaciones y una titularidad.
Hansi Flick, consciente de los antecedentes del futbolista, ya advirtió en sala de prensa que se debía ir con mucha calma con el jugador, que ha ido teniendo minutos en los tramos finales de los partidos. Aunque el Barça intentó este verano que saliera cedido, teniendo en cuenta que es una de las fichas más elevadas de la plantilla -le dieron el diez en 2021 y su renovación fue elevada en un momento ya sin Leo Messi-, el futbolista se centra esta campaña en al menos salir de esta espiral y recordar sus grandes momentos.